Repsol Química teme que el trazado del AVE hipoteque el futuro de las instalaciones de Tarragona

En ocasión de la visita del presidente de la Generalitat catalana a las obras de la nueva planta de óxido de propileno y estireno que será inaugurada el próximo otoño, el equipo directivo de Repsol Química planteó a Jordi Pujol la necesidad de considerar el trazado del AVE en función de las necesidades del complejo petroquímico. "El trazado del AVE ya está decidido", respondió secamente Pujol. El director general de Repsol Química y su equipo directivo argumentaron que, con la línea del AVE a sólo 300 m de de Repsol, quedaba hipotecado el crecimiento futuro de estas instalaciones, limitando así las inversiones del futuro. Fue una conversación promovida por los directivos de Repsol Química en el transcurso de la visita a las instalaciones. Autoridades, directivos de Repsol y periodistas vestían casco. En los parlamentos formales posteriores, el presidente de la corporación Repsol defendió la necesidad de dotar al complejo de Tarragona de decisiones estructurales y ayudas económicas que le permitan competir con los del norte de Europa y convertirse en el principal complejo del Mediterráneo. Pujol respondió con voluntad de resolver estos problemas pero indicando que muchos de ellos dependen de la adnministración central, para lo que ofreció la mediación de la Generalitat. Repsol Química está invirtiendo 88.000 MPtas en Tarragona en una planta con la más moderna tecnología, de los cuales, entre 5.000 y 8.000 MPtas (según las fuentes) están dedicadas al tratamiento de aguas residuales, respondiendo así al "Compromiso de Progreso" adoptado por la industria química.