La industria valora cómo previsiblemente evolucionará la próxima Campaña de Navidad y Reyes (Parte 1)

Las ventas online seguirán muy presentes en la Campaña de Navidad y Reyes.

“Creemos que la Campaña de Navidad y Reyes tendrá una evolución estable. Estamos todavía en una etapa de recuperación económica y lo más seguro es que sea una Campaña conservadora. Los clientes están teniendo muchas dudas y la compra está siendo sobre la marcha en algunos productos. Tenemos que estar más pendientes de los clientes e ir controlando el stock más a menudo”.

“Esperamos una Campaña de Navidad y Reyes estable por la dinámica de los últimos años y, en especial, de los últimos 18 meses, además de por las previsiones de nuestros clientes. La distribución cada vez es más conservadora y suele primar minimizar cualquier exceso de inventario. Por su parte, el e-commerce seguirá en la senda de crecimiento, y ocupará cada vez mayor cuota de mercado, al menos durante los próximos años”.

“Creemos que los clientes seguirán apostando por un juguete educativo y socializador. Por su parte, el e-commerce seguirá imparable y cada vez su peso será mayor. Las empresas tendrán que mejorar y actualizar sus sistemas de gestión para mejorar la experiencia de compra del cliente. Esperemos que se divida la acción de compra de manera sostenible para que todos los puntos de venta crezcan de igual manera”.

“Para la Campaña de Navidad y Reyes, en un principio las cadenas intentarán mantener precios, pero finalmente los precios tenderán a incrementarse de una manera significativa, ya no hay muchas más opciones. También muchas empresas tendrán problemas de suministros y habrá retrasos en las entregas. Además, por parte del consumidor, creo que habrá una tendencia en anticipar las compras y seguirá apostando por el e-commerce”.

“Prevemos una Campaña de Navidad y Reyes estable porque aún el consumidor permanece con cierto control en el gasto del dinero, sobre todo en artículos que no son de primera necesidad. Y, aunque en principio será una Navidad en donde las familias volverán a encontrarse, no hay una seguridad cierta de que esto suceda. Los padres buscan sobre todo algo que entretenga a los niños dentro de casa, que sea de calidad y a buen precio”.

“Para la próxima Campaña de Navidad y Reyes, el comprador de juguetes creo que será más conservador y no tomará ningún riesgo. Puede ser que la tendencia de compra de la pasada Campaña se siga manteniendo, en donde la tienda de barrio y el e-commerce se posicionaron. Y, concretamente, el canal online seguirá creciendo. Todos nos vamos adaptando y mejorando los sistemas con la digitalización, cambios que se verán reflejados también en las ventas”.

“El comprador final cada vez tiene más en mente la premisa de ‘menos es más’ por lo que va a decantarse por productos donde la utilidad y la experiencia de juego sean primordiales, teniendo en cuenta las preferencias de sus hijos y priorizando los productos que les aporten tanto en marca como en licencia. El e-commerce, por su parte, cada vez está más arraigado y los juguetes que no necesiten una explicación extra o asesoramiento se verán más introducidos en las cestas de compra telemática”.

“Esta Campaña va a estar muy condicionada por el suministro de mercancía desde Asia y el incremento de precios en la fabricación. Además, el aumento del precio del transporte se ha sumado a la dificultad para encontrar contenedores para poder traer la mercancía. Todo hace prever que veamos un desabastecimiento de ciertos juguetes y esto ayude a que los consumidores adelanten sus compras. Va a ser una Campaña de Navidad en la que las grandes plataformas logísticas de los clientes van a tener que ser ágiles y flexibles para capitalizar las ventas”.

“La pasada Campaña fue realmente extraña, igual que la situación general que nos tocó vivir. Sin embargo, al final las ventas no fueron tan malas. Para la próxima Campaña se va a tener que hacer un gran esfuerzo por parte de la distribución para programar los pedidos, puesto que 2021 está destacando por los problemas de suministros y por tanto de stocks. En mi opinión la Campaña de Navidad y Reyes dependerá de la disponibilidad de producto”.

“Creemos que las ventas tendrán una evolución estable. Dada la situación de muchos proveedores de materias primas, creemos que es posible que falte producto y puede que las grandes novedades no lleguen a tiempo. Esto sumado a la incertidumbre actual, puede derivar en una estabilización de las ventas en comparación con el año anterior. Además, dada la situación económica del país y el impacto del Covid-19, creemos que es posible que las ventas se concentren en menor compra final”.

“La prudencia en las compras durante la Campaña anterior se tradujo en una disminución generalizada de la oferta. En consecuencia, las ventas no respondieron a la demanda. Este año los comerciantes saben que lo importante es la disponibilidad, y los pedidos que estamos recibiendo reflejan esta situación. Hemos visto que el consumidor no puede permitirse visitar tiendas por ocio, sino por necesidad. Entonces, si solo entra una vez, nuestra oferta debería ser lo suficientemente completa para que saliera con la compra hecha”.

“Esperamos una Campaña de Navidad y Reyes estable, ya que el virus sigue presente y todos los clientes están siendo muy precavidos, a lo que hay que añadir la subida de precios por la crisis de materias primas y los contenedores al alza. Hay que ofrecer productos de alto valor de juego tanto para jugar fuera como dentro de casa. Ya no sirven los productos de relleno, ya que se ha producido una fuerte selección tanto de artículos como de fabricantes”.

“El problema de transporte desde China creo que va a afectar mucho, sobre todo por la falta de producto y el incremento de los costes, que al final se va a traducir en el aumento del PVP de los productos. Por su parte, los consumidores seguirán priorizando los artículos de moda, de calidad y a precios competitivos. La demanda se repartirá entre la tienda física y el e-commerce, con un crecimiento de este último”.

“Va a ser una Campaña de Navidad y Reyes complicada, marcada por las dificultades derivadas de la escasez y encarecimiento de las materias primas, por los problemas del tráfico marítimo y por el impacto de la subida de los fletes. Esto podrá causar retrasos en las entregas de algunos productos al retail, así como obviamente subidas de precios de los productos. Por lo tanto, el consumidor saldrá perjudicado por la inflación y los fabricantes y retailers por la caída de márgenes”.

“Los resultados que estamos viendo estos meses con respecto a cifras previas a la pandemia (es decir, 2019) muestran una tendencia a la baja y creo que será complicado recuperar este terreno en lo que resta de año. Los resultados dependerán mucho de cómo esté la situación al acabar el verano y que las restricciones sean las menos posibles para que no hagan mella en la confianza de los consumidores de cara a la Campaña de Navidad y Reyes”.