Entrevista a Antonio Domínguez, director general de Griesser para España y Portugal
Con más de 1.300 empleados, seis fábricas y dos filiales propias en toda Europa, Griesser se distingue por su alto nivel de calidad y servicio. En los dos últimos años, la firma no ha parado de crecer y de incorporar nuevos productos y servicios dentro del territorio nacional, manteniendo una gran red de contactos que impulsan la marca en cuanto a proyecto, instalación y mantenimiento. De todo ello nos habla a continuación Antonio Domínguez.
¿Podría hacernos un escueto resumen sobre las debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades por las que atraviesa el sector de la protección solar?
El sector de la protección solar atraviesa uno de los momentos con más oportunidades debido a la paulatina concienciación del usuario final y del sector de la construcción y de la rehabilitación por una mejora considerable en la calidad de las viviendas y lugares de trabajo, tanto a nivel de eficiencia energética como de confort visual interior. Todos los productos de protección solar relacionados con la mejora de la eficiencia de las ventanas, los huecos de las fachadas y techos y de las superficies acristaladas están viviendo un aumento de las ventas por el creciente interés de los arquitectos y decoradores de mejorar aún más el confort de los edificios.
En Griesser tenemos la fortaleza de contar con 1.300 empleados en 6 fábricas y 2 filiales propias, lo que asegura un nivel de calidad y de servicio inmejorables en todo el proceso técnico-comercial. Somos capaces de fabricar grandes cantidades en plazos muy cortos de entrega y, gracias a la estrecha colaboración con proveedores y nuestro volumen de compra, intentamos asegurar el servicio y la logística en los niveles más altos de forma que la situación actual nos afecte lo menos posible.
Creemos que la única amenaza que puede entorpecer el buen desarrollo del sector es la baja calidad de los productos sin marca o de fabricantes orientados exclusivamente al precio con los consiguientes fallos y problemas durante la corta vida útil que ofrecen. En muchos casos, los productos de baja calidad pueden hacer creer al usuario que todos los productos son iguales y generar desconfianza. Es importante concienciar a usuarios, arquitectos, decoradores y profesionales del sector que instalen productos de fabricantes reconocidos en el sector con una larga experiencia, con capacidad de servicio postventa y con un sistema de trazabilidad que identifique cada unidad de producto instalada.
Nosotros, desde Griesser y weinor, apostamos por la máxima calidad, con un precio adecuado al producto en cuestión y por un seguimiento absoluto de la trazabilidad y de la identificabilidad de cada unidad en particular o del proyecto al completo. Además, añadimos servicios de postventa formados y garantizados por Griesser.
¿Cómo valora la trayectoria de su empresa y del sector en el periodo 2020 y 2021?
Griesser, durante estos dos años, no ha parado de crecer y de incorporar nuevos productos y servicios dentro del territorio nacional, aumentando su presencia desde la prescripción y el proyecto en su nacimiento hasta su instalación y mantenimiento. Tenemos una gran red de contactos que impulsan nuestra marca en los tres niveles: proyecto, instalación y mantenimiento.
Las persianas graduables tipo Metalunic y Lamisol han sido durante estos dos años los productos de más éxito dentro de este segmento de producto junto con los sistemas verticales textiles Solozip con cremallera lateral. Gracias a ellos hemos consolidado las ventas y hemos crecido más de un 30% en facturación. Se trata de productos de máxima calidad y garantía. Usuarios, instaladores y arquitectos han podido comprobar la diferencia en la calidad y han hecho apuestas claras por Griesser a todos los niveles, desde la pequeña reforma hasta los proyectos más grandes.
¿Cuáles son las perspectivas para 2022?
Las perspectivas para la persiana graduable y los toldos verticales es de un fuerte crecimiento por las nuevas necesidades del sector y por las nuevas tendencias de ahorro energético, así que esperamos un fuerte crecimiento que solo se podría frenar por la falta de disponibilidad de materias primas y la logística internacional. Griesser, gracias a su dimensión como grupo empresarial con una fábrica en Suiza, dos fábricas en Francia, otra en Austria y dos en Alemania está apostando por la capacidad de producción y el stock para asegurar unos correctos plazos de entrega y, sobre todo, muy precisos para ayudar a los Griesser Partners a trabajar con una marca eficiente y en quien confíen.
¿Tienen previsto presentar alguna novedad en los próximos meses y, si es así, podría hacernos una breve descripción de la misma?
Griesser continúa con su trayectoria de lanzar como mínimo un producto cada año y para este año 2022 está previsto lanzar un nuevo modelo de toldo vertical, el Solocreen IV. Con un mismo diseño, se puede instalar encastrado en nichos de obra o cajones túneles, en superficies con cajón de aluminio protector termo-lacado y con distintos tipos de sistemas de retención contra el viento: cables tensados con muelle supresor del golpe de viento, varillas de acero inoxidable e incluso con guías laterales de aluminio que son capaces de permitir la instalación autoportante del cofre en las guías. Este sistema permite cubrir grandes huecos y ventanas de forma segura contra el viento y con las garantías y certificaciones propias de uno de los mayores fabricantes del mundo de la protección solar.
