Sílice cristalina respirable: riesgos laborales y medidas de prevención
La silicosis sigue siendo problema importante para de salud laboral
Exposición laboral a polvo respirable de sílice cristalina
Entre otros procesos industriales, y tomando como referencia los criterios notificación y registro de enfermedades profesionales del Real Decreto 257/2018, de 4 de mayo, se podrían incluir:
- Los trabajos en minas, túneles, canteras, galerías, obras públicas.
- El tallado y pulido de rocas silíceas, trabajos de canterías.
- Los trabajos en seco, de trituración, tamizado y manipulación de minerales o rocas.
- La fabricación de carborundo, vidrio, porcelana, loza y otros productos cerámicos, fabricación y conservación de los ladrillos refractarios a base de sílice.
- La fabricación y manutención de abrasivos y de polvos detergentes.
- Los trabajos de desmoldeo, desbardado y desarenado en las fundiciones.
- Los trabajos con muelas (pulido, afinado) que contengan sílice libre.
- Los trabajos en chorro de arena y esmeril.
- La Industria cerámica.
- La Industria siderometalúrgica.
- La fabricación de refractarios.
- La fabricación de abrasivos.
- La industria del papel.
- La fabricación de pinturas, plásticos y goma.
El contenido en SCR de los conglomerados de cuarzo puede variar entre el 70 y el 90%, y es mucho más alto que el de la roca ornamental utilizada tradicionalmente, como el granito (30%) o el mármol (3%), y según las recopilaciones bibliográficas publicadas, el corte y pulido de los conglomerados de cuarzo, sin supresión del polvo con agua, está asociado con la generación de niveles extremos de polvo de sílice respirable, 300 veces por encima del límite de exposición presentan mayor riesgo a padecer silicosis complicada y/o acelerada que los trabajadores expuestos a polvo de sílice de roca ornamental.
Cada una de las distintas formas de la sílice, en función de sus propiedades y características, químicas, físicas y eléctricas tienen aplicaciones específicamente para un sector industrial, aunque de forma general son inertes, resistentes, quebradizas y con un punto de fusión alto. Los enlaces intramoleculares covalentes polares se traducen en estructuras moleculares tetraédricas ordenadas, y la podemos encontrar de forma cristalina o amorfa, tanto en depósitos sedimentarios naturales como en productos creados artificialmente en hornos a altas temperaturas. En su forma amorfa, cada molécula se organiza de forma limitada en relación con las demás, dando como resultado un sólido transparente. Es difícil de encontrar en la naturaleza, y se usa industrialmente como componente principal del vidrio y, también, en el sector de la electrónica.
La sílice cristalina es un componente clave del suelo, la arena, el granito y otros minerales presentes en la naturaleza. Por sí misma, la sílice cristalina, no representa un problema para la salud, como lo podemos observar en la arena de nuestras playas, que están compuestas en más de un 90% de cuarzo, pero con un tamaño que no la hace peligrosa para nuestro organismo. Créditos imágenes: Instituto Nacional del Cáncer y dominio público para silicon dioxide, SiO2.
La sílice cristalina, y se presenta principalmente en forma de cuarzo, cristobalita y tridimita, siendo el cuarzo su forma más habitual, entre sus ventajas hay que mencionar que tienen muchas aplicaciones industriales que derivan de sus propiedades físicas y químicas tales como son la dureza o la resistencia, sin olvidar su resistencia química, su alto punto de fusión, la piezoelectricidad, la piroelectricidad y su transparencia.
La sílice cristalina es un componente clave del suelo, la arena, el granito y otros minerales presentes en la naturaleza. Por sí misma, la sílice cristalina, no representa un problema para la salud, como lo podemos observar en la arena de nuestras playas, que están compuestas en más de un 90% de cuarzo, pero con un tamaño que no la hace peligrosa para nuestro organismo. El peligro comienza cuando el material compuesto de sílice cristalina, se somete a un proceso mecánico de corte, tallado, perforación, molienda, granallado, lijado, u otro tipo de acciones mecánicas de disgregación que pueden liberar partículas de sílice en unas granulometrías lo suficientemente pequeñas como para penetrar hasta la zona alveolar de los pulmones, pudiendo quedarse allí depositadas, produciendo daños a la salud irreversibles. Factores que afectan la toxicidad de la sílice cristalina son: concentración; porcentaje de sílice cristalina libre; duración de la exposición; tamaño de la partícula; y las características de superficie-fragmentación.
La sílice cristalina respirable (SCR) es la parte de la sílice cristalina que es suficientemente pequeña como para entrar en las partes de los pulmones donde se produce el intercambio de gases cuando se inhala. Según su tamaño se depositan: si es menor a 5 µm (micrómetros) en el espacio nasofaríngeo; de 1 a 5 µm en alvéolos y parénquima pulmonar; y si es menor a 1 µm, suspendidas en aire inspirado y exhalada.
El riesgo a desarrollar la enfermedad profesional por la exposición a sílice cristalina respirable
La inhalación de polvo de sílice cristalina produce:
- La silicosis, que está reconocida como enfermedad profesional, en el Anexo I del RD 1299/2006 por el que se aprueba el cuadro de enfermedades profesionales en el sistema de la Seguridad Social
- Cáncer de pulmón, que aumenta en personas que han desarrollado silicosis; está reconocido como enfermedad profesional por el Real Decreto 257/2018, donde se añade un nuevo agente, el polvo de sílice libre, como generador de cáncer de pulmón.
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Término genérico para describir enfermedades pulmonares progresivas que incluyen enfisema, bronquitis crónica y asma refractaria (no reversible).
Existen tres tipos de silicosis, dependiendo del menor o mayor nivel de sílice cristalina:
- Silicosis crónica, la cual resulta de la exposición prolongada (más de 20 años) a bajas cantidades de polvo de sílice. Este polvo causa inflamación en los pulmones y ganglios linfáticos del tórax. Esta enfermedad puede hacer que las personas tengan dificultad para respirar y es la forma más común de silicosis.
- Silicosis acelerada, la cual se presenta después de la exposición a cantidades mayores de sílice en un período más corto (5 a 15 años). La inflamación de los pulmones y los síntomas ocurren más rápidamente que en la silicosis simple.
- Silicosis aguda, la cual resulta de la exposición a cantidades muy grandes de sílice durante corto tiempo. Los pulmones se inflaman bastante y se pueden llenar de líquido, lo que causa una dificultad respiratoria grave y una baja de los niveles de oxígeno en la sangre. Presenta compromiso renal, hepático y esplénico.
La manifestación radiológica clásica de la silicosis simple es la presencia de un patrón nodular difuso y bilateral con tendencia a mayor afectación en los lóbulos superiores y en las zonas posteriores del pulmón. Desde la forma crónica simple puede progresar a una silicosis complicada. Dentro de este grupo se encuentra la fibrosis pulmonar intersticial siendo el síntoma más frecuente la tos. Los estudios de imágenes se comportan de forma similar a la fibrosis pulmonar idiopática (FPI), aunque se trata de una forma clínica poco estudiada, su evolución parece transcurrir diferente a la FPI3.
La silicosis acelerada es aquella que aparece tras 5-10 años de exposición a sílice cristalina y progresa hacia formas complicadas con mayor frecuencia y velocidad. Suele cursar con disnea secundaria al deterioro acelerado de la función pulmonar.
Medidas de higiene personal y de protección individual necesarias cuando exista riesgo por exposición por exposición a polvo respirable de sílice cristalina
- No comer, beber o fumar en las zonas de trabajo. Se dispondrá de una zona específica para ello (comedor), que deberá estar limpia y, por tanto, exenta de riesgo por exposición a SCR, la cual estará separada de la zona de trabajo, con las condiciones necesarias para evitar la exposición durante el descanso.
- Proporcionar al personal ropa de protección o de trabajo apropiada según las condiciones de trabajo, recomendando la disponibilidad de ropa de recambio disponible en el centro del trabajo. Como parte habitual de cada tarea, el hábito de una limpieza adecuada de la ropa de trabajo para eliminar las partículas de SCR que pudieran quedar adheridas a la misma.
- Disponer de vestuarios que cuenten con lugares separados para guardar la ropa limpia y la ropa de protección o de trabajo, exenta de riesgo por exposición a SCR, la cual estará separada de la zona de trabajo.
- Disponer de un lugar limpio y específico para el almacenamiento de equipos de protección respiratoria reutilizables, que deberán ser revisados para asegurar su buen funcionamiento y óptimas condiciones de acuerdo con las especificaciones del proveedor.
- Disponer de aseos que cuenten con los medios necesarios para poder llevar a cabo una correcta higiene personal, con una estricta de higiene personal, tanto para la limpieza de manos antes de comer y beber, como para lavarse y cambiarse la ropa de protección al abandonar las zonas con riesgo por exposición a SCR.
- El personal identificado en la evaluación de riesgos como expuesto dispondrá, dentro de la jornada laboral, del tiempo necesario para su aseo personal, con un máximo de diez minutos antes de la comida y otros diez minutos antes de finalizar su trabajo.
- La empresa se responsabilizará del lavado y descontaminación de la ropa de trabajo. El personal sustituirá la ropa de protección SCR o de trabajo por la ropa de calle, al finalizar la jornada laboral antes de abandonar el centro de trabajo, y en ningún caso debe trasportar la ropa y el calzado de trabajo a su domicilio.
- Aplicar una rutina de limpieza en las instalaciones citadas (comedor, vestuario, área de almacenamiento de equipos y aseos) y en ningún caso las operaciones de limpieza no deben constituir por sí mismas un foco de riesgo para el personal que las efectúe, por lo que se evitará la puesta en suspensión de partículas de SCR.
Cuando sea necesario recurrir al empleo de equipos de EPI destinados a proteger a las personas trabajadoras, tanto del riesgo por inhalación de polvo de SCR, como por déficit de oxígeno, se recurrirá a la utilización de los equipos de protección respiratoria filtrantes, quedando habitualmente relegados los aislantes a situaciones de emergencia, espacios confinados con deficiencia de oxígeno, o situaciones en las que se desconoce la concentración de los contaminantes.
Como criterios generales para valorar la idoneidad del EPI de protección respiratoria en los trabajos y tareas a desempeñar deben tenerse en cuenta otros factores, los que se enumeran a continuación:
- La existencia de otros contaminantes en forma de gas o vapor.
- Compatibilidad con otros EPI necesarios.
- La movilidad y desplazamientos de la persona trabajadora durante el desarrollo de sus tareas.
- La visibilidad.
- El ritmo de trabajo.
- El estrés térmico.
- La necesidad de comunicación verbal.
- El tiempo de uso.
De forma general, se recomienda que los EPI de protección respiratoria proporcionen un nivel de protección, como mínimo, de tipo FFP3 (en el caso de mascarillas autofiltrantes) o filtros P3 (cuando se empleen medias máscaras o máscaras completas dotadas de filtros). En caso de utilizar equipos filtrantes asistidos, también se recomienda seleccionar el nivel de protección más elevado dentro de cada tipo. Si la protección respiratoria con tipos de EPI fuera insuficiente por atmósferas deficientes de oxigeno o porque no se conoce con certeza la concentración de SCR, o se prevé que sea elevada, se utilizarán los equipos de protección respiratoria aislantes, que constan de una pieza o adaptador facial y de un suministro de aire respirable, independiente del entorno. La Norma UNE-EN 529:2006 recoge las recomendaciones sobre selección, uso, cuidado y mantenimiento y la guía de los equipos de protección respiratoria.
Referencias:
- Confederación Sindical de CC. OO. (2023) Análisis de las estadísticas de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales en España en 2022. Secretaría Confederal de Salud Laboral y Sostenibilidad Medioambiental.
- Instituto Nacional Silicosis (2022). Nuevos casos registrados en INS durante el año 2021.
- Servicio de Salud del Principado de Asturias. Oviedo.
- Instituto Nacional de Silicosis (INS) (2022). Guía Técnica para la prevención del riesgo por exposición a la sílice cristalina respirable (SCR) en el ámbito laboral.
- Hayley Barnes, Nicole S.L. Goh, Tracy L. Leong, Ryan Hoy (2019). Silica-associated lung disease: An old-world exposure in modern industries. Respirology. Asian Pacific Society of Respirology. Volume24, Issue12.December 2019. Pages 1165-1175. https://doi.org/10.1111/resp.13695.
- Ministerio de Sanidad (2020). Protocolo de vigilancia especifica. Silicosis. Centro Publicaciones Ministerio Sanidad.
- Hayley Barnes, Nicole S.L. Goh, Tracy L. Leong, Ryan Hoy (2019). Silica-associated lung disease: An old-world exposure in modern industries. Respirology. Asian Pacific Society of Respirology. Volume24, Issue12.December 2019. Pages 1165-1175. https://doi.org/10.1111/resp.13695
- Rattia-Rivas CE, Martinez-Aguirre S, Affinito M, Lonighi SS, Maqueda J. Silicosis en trabajadores expuestos a conlomerados de cuarzo. Medicina y Seguridad del Trabajo (Internet). 2022;68(266):11-24. doi: 10.4321/s0465-546x2022000100002.