El trabajo sedentario: un riesgo importante para la salud musculoesquelética
Redacción Interempresas30/08/2021
El cuerpo humano está diseñado para el movimiento y el trabajo sedentario representa un riesgo considerable para la seguridad y la salud en el trabajo (SST), ya que puede provocar el desarrollo o el agravamiento de trastornos musculoesqueléticos (TME) y otros problemas de salud. De hecho, el 60% de los lugares de trabajo consideran actualmente que estar sentado es un factor de riesgo.
Los riesgos asociados al trabajo sedentario pueden afectar a todos los trabajadores que pasan periodos prolongados de tiempo sentados o de pie, como los oficinistas, los trabajadores de fábricas, los conductores, los cajeros o los trabajadores del comercio minorista, los crupieres de los casinos, los dependientes de las gasolineras y otros.
Se debe fomentar los estiramientos musculares para evitar lesiones.
El grado de sedentarismo en el trabajo es alarmante si se tienen en cuenta los problemas de salud asociados al trabajo sedentario y a los periodos prolongados de sedestación. La inactividad en el trabajo puede causar o agravar los TME, como la rigidez muscular y el dolor de espalda o de columna. También puede contribuir al desarrollo de enfermedades cardiovasculares, diabetes de tipo 2, obesidad, ciertos tipos de cáncer, problemas de salud mental e incluso la muerte prematura.
Por lo tanto, es esencial que los trabajadores que permanecen sentados o de pie durante largos periodos de tiempo colaboren con su empleador para garantizar que puedan seguir bombeando la sangre y haciendo circular el oxígeno.
¿Cómo pueden los empresarios ayudar a aliviar el problema?
A las empresas les interesa animar a los trabajadores a evitar los periodos prolongados en los que están sentados o de pie, ya que promover formas saludables y activas de trabajar y prevenir las enfermedades a largo plazo puede aumentar la concentración y, en consecuencia, la productividad. Muchas de las medidas que pueden adoptar los empresarios son pequeñas, sencillas y rentables.
Por ejemplo, los empresarios pueden considerar la disposición del entorno de trabajo desde la perspectiva de reducir el trabajo sedentario. Colocando estratégicamente determinados recursos, como impresoras y papeleras, en zonas comunes, los empresarios pueden asegurarse de que los trabajadores tengan que atravesar la oficina para acceder a ellos. Los empresarios también pueden proporcionar equipos como puestos de trabajo para sentarse o estar de pie, sillas ergonómicas que permitan sentarse de forma dinámica y teléfonos inalámbricos para dar a los trabajadores la oportunidad de caminar durante las llamadas.
Las empresas también pueden considerar la posibilidad de cambiar la cultura empresarial para inyectar más movimiento en las actividades laborales. Por ejemplo, los empresarios pueden introducir pausas de estiramiento obligatorias en cada reunión para dar a los trabajadores la oportunidad de moverse y estirar los músculos. También pueden dar a los trabajadores el control de su carga de trabajo, para que sientan que pueden tomarse descansos cuando lo necesiten.
Por último, los empresarios deben consultar a los trabajadores con un enfoque participativo para obtener sus ideas y sugerencias. Los resultados de esta consulta pueden servir de marco para una política concreta o una estrategia de prevención. No todas estas soluciones serán pertinentes en los escenarios de teletrabajo, pero los empresarios pueden proporcionar equipos ergonómicos, fomentar el estiramiento y, lo que es más importante, concienciar sobre el tema siempre que sea posible.
¿Qué pueden hacer los propios trabajadores para reducir el riesgo?
Los trabajadores también deben asumir cierta responsabilidad para mantenerse activos y evitar los riesgos para la salud asociados al trabajo sedentario. Es importante que los trabajadores cambien regularmente de posición entre estar sentados, de pie y en movimiento. Los trabajadores deben recordar que lo contrario de estar sentado no es estar de pie, sino moverse. Los trabajadores también deben considerar la posibilidad de hacer microdescansos cada 20-30 minutos para tener la oportunidad de moverse, estirarse y restablecer su postura. Se recomienda encarecidamente que, además, los trabajadores se levanten y se muevan durante 10 minutos después de dos horas de estar sentados.
Los trabajadores también pueden buscar pequeñas oportunidades para ser más activos en su vida diaria, como subir las escaleras en lugar del ascensor, caminar mientras hablan por teléfono y hacer pausas regulares para estirarse. Incluso cuando están sentados, los trabajadores deben cambiar regularmente de postura y sentarse de forma ‘dinámica’, desplazando de vez en cuando su peso de un lado a otro o colocando el respaldo para poder inclinarse hacia atrás. Los conductores deben parar para hacer pausas regulares y salir del vehículo para comer, estirarse, hacer llamadas telefónicas y descansar.
Para reducir el riesgo de padecer un TME, los trabajadores y las empresas deben colaborar para evitar los periodos prolongados de sedestación. Es importante recordar que la siguiente postura es la mejor y que la variedad de posturas y movimientos es la clave.
Para obtener más información, se puede visitar la sección del área prioritaria de trabajo sedentario del sitio web Healthy Workplaces Lighten the Load. Para obtener una guía de buenas prácticas divertida, entretenida y útil, puede visualizarse el cortometraje ‘Keep Moving at Work’ y seguir la campaña en Facebook, Twitter y LinkedIn para obtener más noticias e información.
