Riesgos laborales en casa
Paula Llull07/07/2014
No sólo se trata de ética o de moral. Se trata de prevención. Prevención, que a su vez se traduce en ahorro económico y ahorro de disgustos, porque no creo que a ninguno nos haga gracia que la persona que limpia en casa sufra un accidente con graves consecuencias.
En muchos rankings donde se consideran los trabajos más peligrosos siempre aparece el de “limpiar ventanas de rascacielos”. Aunque la mayoría de nosotros no vivimos en un rascacielos, la verdad es que tienes casi las mismas probabilidades si te caes de un quinto piso…
La mayoría de empleados de hogar han ayudado alguna vez a hacer las ventanas por fuera, si no es que esa es su tarea habitual.
El hecho de trabajar sin cotizar nos priva de muchas de las ventajas que el sistema público nos brinda como la asistencia sanitaria, sistema de pensiones, paro y bajas por enfermedad.
-El empleado de hogar limpia ventanas. Si no está bien asegurado mediante EPIS y demás medidas de protección, puede caerse y sufrir daños graves o incluso la muerte. Si no está preparado no se le puede pedir que realice según que tareas.
Etiqueta productos químicos
-El empleado de hogar utiliza productos químicos. Si el empleado desconoce los efectos que pueden tener estos sobre su salud, puede enfermar y necesitar asistencia médica. Este tipo de productos, si son utilizados de forma equivocada pueden provocar accidentes con consecuencias mortales. Se necesita cierta preparación para manejar los productos, además de leer bien las etiquetas.
-El empleado de hogar debe ir correctamente vestido, tanto para protegerse como para no sufrir dolencias ergonómicas. Estar mucho tiempo agachado y dedicarse las ocho horas de la jornada a limpiar puede producir lesiones musculares, caídas que pueden desembocar en roturas. Existen también muchas probabilidades de sufrir un accidente doméstico como una quemadura o un resbalón planchando, lavando o cocinando.
En muchos rankings donde se consideran los trabajos más peligrosos siempre aparece el de “limpiar ventanas de rascacielos”. Aunque la mayoría de nosotros no vivimos en un rascacielos, la verdad es que tienes casi las mismas probabilidades si te caes de un quinto piso…
La mayoría de empleados de hogar han ayudado alguna vez a hacer las ventanas por fuera, si no es que esa es su tarea habitual.
El hecho de trabajar sin cotizar nos priva de muchas de las ventajas que el sistema público nos brinda como la asistencia sanitaria, sistema de pensiones, paro y bajas por enfermedad.
Principales riesgos que corre un empleado de hogar
-El empleado de hogar limpia ventanas. Si no está bien asegurado mediante EPIS y demás medidas de protección, puede caerse y sufrir daños graves o incluso la muerte. Si no está preparado no se le puede pedir que realice según que tareas.
Etiqueta productos químicos
-El empleado de hogar utiliza productos químicos. Si el empleado desconoce los efectos que pueden tener estos sobre su salud, puede enfermar y necesitar asistencia médica. Este tipo de productos, si son utilizados de forma equivocada pueden provocar accidentes con consecuencias mortales. Se necesita cierta preparación para manejar los productos, además de leer bien las etiquetas.
-El empleado de hogar debe ir correctamente vestido, tanto para protegerse como para no sufrir dolencias ergonómicas. Estar mucho tiempo agachado y dedicarse las ocho horas de la jornada a limpiar puede producir lesiones musculares, caídas que pueden desembocar en roturas. Existen también muchas probabilidades de sufrir un accidente doméstico como una quemadura o un resbalón planchando, lavando o cocinando.