Aislar el jardín en invierno

Tener en casa vegetación autóctona puede ayudar a prevenir que se hiele, ya que está acostumbrada a las temperaturas de la zona. Sin embargo ante situaciones imprevistas como por ejemplo bajones bruscos, debemos tomar algunas precauciones.

Cuando escuchamos en las predicciones que el frío se va a incrementar de una forma significativa, debemos tapar con plástico todas las plantas ya que es uno de los mejores aislantes para estos casos.

Normalmente en todas las tiendas especializadas en jardinería disponen de este tipo de elementos para tu casa. Cada tipo de planta tiene que estar en un entorno que se adapte a sus necesidades.

Por ejemplo, si tenemos un pequeño huerto podemos cubrirlo con un túnel de polietileno que mantenga el suelo caliente y permita así que siga su crecimiento habitual.

Si nuestras plantas son muy sensibles y tenemos bastante espacio en nuestro jardín, podemos construir un invernadero que las mantenga en condiciones óptimas. Si no disponemos de mucho sitio podemos reutilizar las bolsas de la compra y hacer mini-invernaderos que aíslen a cada planta de forma individual y sencilla.

Los avances tecnológicos permiten que elementos que antes solo se utilizaban en sectores especializados lleguen a nuestros hogares. Este es el caso del polipropileno, que antes solo se empleaba en agricultura y ahora podemos usarlo en nuestro jardín.

Se trata de un aislante más que recomendable para utilizar en cualquier tipo de plantación. Es reciclable, ligero y reutilizable ya que podemos lavarlo fácilmente. Todas estas cualidades hacen de él un elemento muy cómodo para proteger nuestra vegetación del frío. El polipropileno tiene un gran potencial para ser aprovechado como fuente de energía tras su vida útil.

Las heladas llegan con fuerza durante la noche así que este es el momento del día en el que debemos cubrir las plantas. Durante el día es mejor mantenerlas destapadas y en una zona soleada para que les dé la luz y el aire suficiente.