Entrevista a Luis Carlos Valero, portavoz de Asaja-Jaén
Dibújenos un esbozo rápido del sector del aceite en Jaén.
La provincia cuenta con unas 380 cooperativas y almazaras privadas, y más de 110.000 declaraciones de cultivo.
¿Y cuántos olivos siembran el paisaje?
En Jaén hay 600.0000 hectáreas de olivar, lo que corresponde a unos 60 millones de olivos. Suponen el 43,41% de toda la superficie de la provincia y el 80% de toda la superficie cultivada. Jaén produce aproximadamente el 40% de toda la producción española de aceite.
Entonces su cultivo será importante para la economía de la provincia…
Del olivar vive directamente el 37% de la población activa jienense y genera el 20% del PIB de la provincia. En dinero total supone entre unos 1.200 y 1.500 millones de euros todos los años (incluida la subvención europea). El aceite es tan preciado en Jaén por su preponderancia en la economía del 99% de los pueblos de la provincia. Es su sustento, ya que las alternativas son prácticamente nulas.
¿Cómo es el aceite de Jaen?
En la provincia predomina la variedad Picual, con más del 96% de la producción. El resto lo componen algunas variedades autóctonas en algunas zonas concretas (royal en la sierra Cazorla) y nuevas plantaciones singulares de arbequino. El aceite picual se caracteriza por gran volumen, distinguiéndose sobre todo por su gran estabilidad y unos sabores y aromas muy intensos que se diferencian del resto de los aceituna.
Y cuentan con tres denominaciones…
Sí, Cazorla, Segura y Mágina. Cazorla dispone del cambio varietal de royal, mientras que en Segura y Mágina predomina el Picual. El resto de la provincia lleva algún tiempo tratando de organizarse en una gran IGP o similar.
¿Cómo ha cerrado el sector la campaña de cosecha de aceituna? ¿Cuál ha sido su producción?
La campaña, cuyos datos de cierre están por confirmar, apunta a una producción de 130.000 toneladas de aceite en Jaén (a 31 de enero de 2013). El año anterior la producción fue de 677.000 toneladas. Por tanto, es una campaña catastrófica, con poca cantidad y aceites muy planos.
Ustedes están en contacto directo con los agricultores del olivar, y pueden constatar su descontento. Además de la baja producción estimada de este año, ¿qué otros problemas sufren?
La falta de rentabilidad, junto con una deficiente estructura de comercialización de los aceites, nada adecuada para conseguir mejores precios.
…sin embargo, España es el mayor productor español de aceite del mundo, y, como dice, Jaén, su abanderado.
Así es, pero hoy el cultivo se sostiene sólo gracias a las ayudas de la Política Agraria Comunitaria.
¿Y qué se puede hacer?
Yo restringiría las posibilidades de que el Tribunal de la Competencia intervenga en la gestión de producciones y mercados, ya que ha sido siempre la espada de Damocles que ha gravitado sobre nuestras cabezas a la hora de organizarnos para vender mejor nuestro producto.
¿No se sienten respaldados por las administraciones?
El olivo es un sector estratégico. Así que las administraciones tendrían que establecer barreras sin fronteras —cosa que dudo que sea posible por la Organización Mundial de Comercio— o exigir las mismas normas a los que importan sus productos a la UE que las que se nos exigen a los agricultores de la UE. Por lo tanto, considero que el apoyo de la Administración es insuficiente.
Proponga un plan.
Reconversión del cultivo para solventar la falta de competitividad de nuestros olivos frente a las nuevas plantaciones nacionales e internacionales y planes urgentes de modernización para nuestras explotaciones.