Lo que se necesita para adoptar la impresión médica en 3D

Tras décadas de desarrollo de materiales y optimización de procesos, las aplicaciones actuales para la fabricación aditiva van mucho más allá de la investigación y la creación rápida de prototipos. Debido a las consecuencias de la pandemia de la corona, cada vez más empresas se están volcando a la impresión en 3D, especialmente cuando se trata de dispositivos médicos o piezas de repuesto.

Los sistemas de fabricación aditiva han encontrado su camino en las fábricas así como en las instalaciones de producción y están listos para hacer avanzar las innovaciones más rápidamente. Un estudio de Deloitte, por ejemplo, muestra que, además de la personalización de los tratamientos con datos en 3D y productos impresos, el paso de una lógica de producto a un enfoque de servicio o “reparto de valor generado” es uno de los principales impulsores de la impresión médica en 3D.

Desde 2015, Kumovis se ha especializado en la impresión en 3D en la industria médica. El año pasado, Kumovis R1, la primera impresora 3D del mundo con integración de sala limpia, entró en producción en serie. Esto ha hecho realidad la compatibilidad de la calidad reproducible, la resistencia mecánica y el cuidadoso procesamiento con polímeros de alto rendimiento. Los implantes impresos en 3D así como las guías e instrumentos quirúrgicos son cada vez más populares en el campo de la medicina. Por lo tanto, es más importante que nunca revisar y (re)evaluar las tecnologías orientadas al futuro y valorar el valor añadido de la fabricación aditiva para su empresa.

La impresora Kumovis R1 es un sistema de material abierto, lo que significa que con ella se pueden procesar más de diez polímeros con diversas propiedades. Tres de los ejemplos más destacados son el poliéter-éter-cetona, o PEEK para abreviar, así como el PEKK y el Ultem.

Gráfico que muestra los polímeros imprimibles en 3D para aplicaciones médicas.

Además, las polisulfonas como la PPSU y los materiales reabsorbibles tienen una demanda cada vez mayor en lo que respecta a la impresión médica en 3D, por ejemplo para fabricar implantes individualizados. Kumovis es el principal fabricante en lo que respecta a impresoras 3D dedicadas a la comunidad médica y al procesamiento cuidadoso de materiales reabsorbibles. Esto se demuestra, entre otras cosas, por los valores de pérdida de IV: los materiales reabsorbibles, por ejemplo, sólo se procesan en un 9% con la Kumovis R1.

La tecnología médica y la de salas limpias a menudo van juntas y son mutuamente dependientes. Con el R1, Kumovis ha desarrollado una impresora 3D cuya cámara de construcción corresponde a la clase de sala limpia 7 según la norma ISO - para alcanzar esto, se utiliza un sistema de filtro HEPA. Así que nada se interpone en el camino de la mejor calidad de implante de la impresora 3D.

La experiencia de los últimos años también muestra que algunas partes tienen que ser repensadas y parcialmente rediseñadas antes de que se conviertan en un caso de uso de la impresión 3D. Una modificación del diseño a menudo permite funcionalidades adicionales. Además de ofrecer el suministro y la puesta en marcha del sistema de impresión 3D R1, Kumovis coopera con los clientes para que puedan beneficiarse de las experiencias a largo plazo de un equipo de ingenieros. Además del diseño, esta oferta también incluye la selección del material óptimo para el respectivo dispositivo médico. De esta manera, la impresión médica en 3D no sólo puede introducirse con éxito en las producciones existentes, sino que el próximo proyecto de desarrollo también puede pensarse en 3D desde el principio.