Piezas de plástico para seguidores del 'heavy metal'
Los propietarios de una Harley Davidson suelen sumar al precio de compra de la moto aproximadamente un 30 por ciento más en accesorios. Una parte de estas piezas, como por ejemplo cubiertas cerrables para el depósito, indicadores de gasolina y temperatura del aceite, relojes o medidores de aceite, provienen de la empresa Fernholz. “Nuestra gama de productos ha aumentado en los últimos años, pero las piezas siguen haciéndose, como antes, en series muy cortas. Para este tipo de producción las máquinas Elektra de Ferromatik han demostrado ser las más adecuadas, gracias a su reducido tiempo de puesta en marcha“, explica Thomas Fernholz.
en piezas de metal
Los establos han desaparecido ya por completo. En su lugar se encuentra una fábrica de alta tecnología con doce inyectoras Ferromatik. En la nueva fábrica los colores son Ferromatik, desde el marco de las ventanas hasta los tiestos de las plantas. “Así expresamos la colaboración durante años entre Fernholz y Ferromatik“ afirma Thomas Fernholz. Hasta hace unos años la primera MH 80 todavía estaba en funcionamiento. Entretanto, la producción se realiza mayoritariamente en las máquinas totalmente eléctricas de la serie Elektra. Cuando Thomas Fernholz se convirtió en el director general en el año 2000, ya tenía claro que el futuro era de las máquinas eléctricas. “El concepto del accionamiento con rodillera me convenció desde el principio. El índice de rechazos es prácticamente nulo”.
También hay que decir que vive con su familia en la granja renovada que se encuentra justo junto a la fábrica. “Así se aprende a valorar lo silenciosas que son las máquinas“.
Pero el director general de esta empresa no sólo es un defensor de la tradición. Ya en los años 80 fue uno de los primeros que construyó en Alemania tablas de 'windsurf', junto con la entonces nueva marca Windsurfing Chiemsee. “En aquel entonces tuve que aprender a nadar por mi solo“ así define su incursión en este mundo. En la actualidad, de nuevo en el negocio familiar, ha sorprendido incluso a los ingenieros de aplicaciones de Ferromatik por su forma de hacerse con las modernas técnicas de inyección de plásticos. “No hubiésemos pensado que iba a ser tan rápido aplicando las nuevas técnicas“. Se refieren a la inyección de polvo metálico (Metal Injection Molding = MIM) de una pieza compleja para el sector médico, en concreto para una pieza de una máquina para diálisis. En este proceso se trabaja con polvo metálico y plástico como base. Tras la inyección, la parte de plástico de la pieza se elimina en una atmósfera de gas y la pieza se sinteriza en una atmósfera de hidrógeno.
La ventaja decisiva en la inyección de polvo metálico es la posibilidad de obtener las ventajas de la inyección en piezas de metal. El resultado son piezas en las que la posibilidad de formas es tan flexible como en las de plásticos, pero cuya resistencia es como la del metal. Una libertad semejante le tenía que gustar a un amante de las Harley. Y no solo a él.