Los plásticos, clave para fomentar la economía circular
Funseam ha inaugurado la cuarta edición del ciclo de Economía Circular, que en esta ocasión cuenta con colaboración de la Fundación Repsol. El ciclo revisa el papel de los plásticos como materiales clave para la transición hacia una economía circular y climáticamente neutra. Por eso la primera sesión tuvo lugar en el Instituto Tecnológico del Plástico, Aimplas, en Paterna (Valencia), con la presencia del director general de Calidad y Educación Ambiental de la Generalitat Valenciana, Jorge Blanco Coll.
El sector público y los principales actores de toda la cadena de valor del plástico —productores, transformadores y recicladores— se dieron cita en esta primera sesión, en la que se analizó el papel de la nueva legislación y las vías de financiación necesarias para el fomento de la economía circular.
El director general de Funseam, Joan Batalla, destacó que el sector de los plásticos “es el mejor ejemplo del cambio de paradigma que necesita la sociedad para hacer frente a la emergencia climática”, señalaron en una nota de prensa fuentes de la Fundación para la Sostenibilidad Energética y Ambiental. Batalla afirmó que “la correcta gestión de los residuos plásticos es clave para avanzar hacia una mayor sostenibilidad. Sin duda, todo parte de un consumo responsable y sostenible, pero, una vez utilizados, es imprescindible realizar una gestión adecuada para aprovecharlos como recurso”.
La directora de Educación y Conocimiento de Fundación Repsol, Arantza Hernanz, puso de manifiesto que las emisiones contaminantes no sólo no se reducen, sino que siguen aumentando. “Hay que tocar todas las palancas para avanzar en la descarbonización y la economía circular va a ser una de ellas. No hay industria que no se vaya a descarbonizar sin la economía circular”. Hernanz añadió que Repsol “trabaja desde hace tiempo en esa línea y está transformando todos sus centros industriales en plataformas circulares”.
En la inauguración del ciclo también intervino, José Antonio Costa, director de Aimplas, en cuya sede tuvo lugar esta primera jornada del mencionado ciclo. Costa considera que los plásticos son, y van a seguir siendo, el material del futuro, ya que aportan beneficios difíciles de superar. “La legislación favorece sustituciones de materiales plásticos por alternativas que no son mejores sino, incluso, con un impacto más negativo. Pero es verdad que, si no se gestionan correctamente, los plásticos pueden dar problemas ambientales. De ahí la importancia de la economía circular en el sector”.
Costa hacía referencia a la revisión de la normativa vigente que se produjo en 2022, para adaptarla a los objetivos de la Unión Europea en cuanto a reciclaje de envases. Precisamente la legislación ha sido uno de los hilos conductores de todas las intervenciones que se produjeron en la jornada del viernes 22 de septiembre.
“Nuevas problemáticas”
El director general de Calidad y Educación Ambiental de la Generalitat, Jorge Blanco, apuntó que “estos cambios son necesarios porque la sociedad incorpora nuevas problemáticas y tecnologías”. Desde el punto de vista de la Administración, potenciar la economía circular es clave porque los vertederos son finitos y caros. “Lo mejor es no generar el residuo, pero en muchos casos es inevitable, así que hay que intentar que luego se puedan valorizar: energéticamente, reciclando o reutilizando. Desde la Administración apoyaremos cualquier tecnología que favorezca que vaya al vertedero lo menos posible”.
Además de la presencia institucional, la jornada incluyó la celebración de dos mesas redondas. En la primera de ellas, representantes de entidades empresariales del sector dieron su opinión sobre la actualidad regulatoria y las vías de financiación de la economía circular. Aunque los ponentes se mostraron “reticentes con los cambios legislativos, (…) los consideran necesarios”, agregaron desde Funseam.
El director de negocio de Aimplas estima que la ley tiene muy poco contenido técnico. “Se demoniza el plástico y eso va a provocar una sustitución más que una reducción. Si se sustituye el plástico por tetrabriks o metales, lo que se hace es complicar el sistema”.
Por su parte, la directora de Asuntos Técnicos y Sostenibilidad de la Asociación Española de Industriales de Plásticos (Anaip), Ángela Osma, dijo que “es importante que, cuando hablamos de circularidad, tengamos en cuenta que estamos hablando de muchos sectores diferentes y que cada uno tiene sus particularidades.”
La directora general de Plastics Europe en la Región Ibérica, Alicia Martín, afirmó que la normativa tiene que aplicar criterios científicos y analizar bien los ciclos de vida de los materiales. “Siempre pedimos es que los marcos legislativos sean armonizados y coherentes y que respeten el mercado único entre comunidades autónomas, ya que hay algunas con objetivos más ambiciosos que otras”. También solicitó que se tenga en cuenta la innovación y las inversiones que desarrolla el sector para avanzar hacia la economía circular y la neutralidad carbónica.
El director general de la Asociación Nacional de Recicladores de Plástico (Anarpla), Óscar Hernández Basanta, mostró su preocupación por la disminución de la demanda de plástico reciclado. “Residuos que en 2021 eran reciclables se están dejando de reciclar porque no es económicamente sostenible. La parte buena es que tenemos la opción de cambiar esto, ya que España es el segundo país con mayor capacidad de reciclado de Europa. Es cuestión de seleccionar más: lo que va a vertedero es porque no se selecciona”.
A vueltas con los PERTE
En la primera mesa redonda también se abordó la incidencia de los PERTE en el ámbito de la economía circular. La directora de Innovación, Estrategia y Advocacy de la Federación Empresarial de la Industria Química Española (Feique), Cristina González Alonso, destacó tres aspectos que, a su juicio, condicionan la eficacia de los planes. Por una parte, los plazos de ejecución, que son muy cortos y limitan la envergadura de los proyectos. Por otra, el presupuesto: “492 millones de euros pueden parecer muchos, pero al final hay que dividirlos en las distintas secciones y acaban por ser insuficientes.” Por último, demandó más flexibilidad a la hora de definir los porcentajes de las subvenciones.
La segunda mesa de debate —que también fijó su mirada en los PERTE— contó con la participación de representantes de diversas iniciativas empresariales de la Comunidad Valenciana que trabajan para propiciar la circularidad de los plásticos.
Así, el director de Reciclado de Acteco, Ángel Martínez-León, solicitó que los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica sean, precisamente, más transformadores, que aporten a las empresas más posibilidades a la hora de afrontar proyectos. “Estamos perdiendo la oportunidad de hacer proyectos innovadores. Nosotros hemos solicitado dos PERTE de economía circular y a mitad de partido nos han cambiado las reglas. Estamos descolocados. No digo que no se haga bien, pero se puede hacer mejor.”
Por su parte, el responsable técnico de Gazechim Composites Ibérica, José Antonio Berja, explicó que los composites pueden erigirse en materiales alternativos a las materias primas clásicas. Se trata de materiales compuestos que contribuyen a la circularidad desde el primer momento. Berja remarcó que para generalizar su uso es necesario incrementar el reciclado. “Es de las pocas palancas que necesitan los materiales compuestos: tanto reciclado mecánico, como térmico y químico”.
Las mesas de debate abordaron diferentes cuestiones relacionadas con los distintos métodos de aprovechamiento de los residuos plásticos.
Curso de Economía Circular
Aprovechando esta primera jornada presencial, Joan Batalla presentóla primera edición del Curso Ejecutivo 'Hacia una economía circular', un curso gratuito, en formato online, que ha desarrollado Funseam, en colaboración con la Fundación Repsol. El objetivo es dar recursos a profesionales del ámbito de la sostenibilidad que quieran profundizar en el conocimiento de la economía circular, explorar sus implicaciones en diferentes sectores y comprender los desafíos prácticos a los que se enfrentan las empresas en su implementación.
El curso empieza el 10 de octubre y, a lo largo de siete jornadas y con un enfoque eminentemente práctico, abordará qué aportan las soluciones circulares en el desarrollo de nuevas oportunidades de negocio. Cuenta con la participación de trece profesionales de gran experiencia en la materia, que ayudarán a los participantes a comprender los principios de la economía circular y a evaluar la situación actual.
Distintas aplicaciones, diferentes tecnologías
La mayoría de las intervenciones que tuvieron lugar en esta segunda mesa redonda gravitaron alrededor de los residuos, que se gestionan de manera muy diversa según el sector. El director general de Ilunion Reciclados y de la División de Economía Circular, Pedro Martín Pérez, puso el acento en los materiales procedentes de aparatos eléctricos y electrónicos. Ilunion Reciclados cuenta con una planta en la localidad leonesa de La Bañeza. Una instalación “que es referente en la separación de metales como el cobre y el aluminio, pero los residuos plásticos cada vez adquieren más protagonismo”. Martín Pérez declaró que “tenemos algunos proyectos de innovación que persiguen mejorar la separación de los plásticos, pero ahora queremos trabajar la extracción de los componentes de los plásticos mixtos, a los que se puede dar salida. También tenemos puesto el foco en la espuma de poliuretano, con salida valorizable en forma de pellets”.
Otro de los sectores que también esta impulsando medidas dirigidas a lograr una economía circular es el de la industria textil. En opinión de la directora de Competitividad e Innovación de la Asociación de Empresarios Textiles de la Comunidad Valenciana (Ateval), Laura Santos, cada año se generan 900.000 toneladas de residuos textiles, que hay que intentar recuperar y valorizar. “La economía circular es un reto en nuestro sector, porque las leyes europeas nos van a afectar mucho. Acompañamos a las empresas para que se pongan al día, pero también toca concienciar a los consumidores, aunque la ropa de segunda mano y de alquiler son opciones cada vez más viables.”
Desde hace ya un tiempo la industria del automóvil recurre a materiales reciclados. De hecho, según Santiago Sánchez, PLTE- Thermoplastics & Ecodesign de Faurecia Interior Systems, el sector se avanzó a la normativa en el uso de estos materiales. No obstante, para que todo este trabajo sea efectivo también hay que centrarse en el ecodiseño, en producir coches más fácilmente reciclables. “En un coche este proceso es muy complejo, pues hay una gran variedad de plásticos y muchos constructores ni se lo plantean. Ahora mismo, la línea de trabajo se centra en recuperar lo que se pueda del exterior del vehículo”, por lo que reclamó “un diálogo entre los distintos actores de la cadena de valor para poder aprovechar la máxima cantidad de materiales posible”.