Un líder siempre en la vanguardia
La revista Potencia no solo fue una de las publicaciones precursoras de lo que denominamos prensa técnica, o profesional, como prefiero llamarla yo, sino que marcó, de la mano de su primer director y fundador, un estilo muy personal. Nuestro querido y, tristemente ya fallecido, Jesús Elorz impregnó un estilo innovador y vanguardista a una publicación de carácter técnico, que permitió conectar un público falto de información periódica accesible sobre el ámbito de la maquinaria de movimiento de tierras y a los proveedores de esta. Con textos muy directos y fundamentos sólidos, coberturas de eventos y ferias, así como la introducción de una publicidad que no se veía fácilmente en aquellos años (década de los sesenta del siglo pasado), Potencia consiguió conectar proveedores de maquinaria pesada y usuarios/compradores de las mismas. Lo hizo de forma regular, a través de un canal amigable y conocido por todos.
Hoy podemos afirmar sin miramientos, que la revista Potencia, creó un nuevo nicho de mercado de prensa, contribuyendo así a desarrollar y normalizar la propia prensa profesional. Y con ese nuevo mercado, también propició el desarrollo de todo el sector de actividad al que se dirigía: el movimiento de tierras.
Desde aquellos años 60 hasta nuestros días, la prensa profesional no solo ha proliferado enormemente. Solo hay que echar un vistazo al portfolio de Interempresas para darnos cuenta. También se han diversificado los canales, los contenidos, etc. Como es lógico, con el devenir de los tiempos todo evoluciona. Potencia amplió sus miras para abarcar toda la industria de la construcción de infraestructuras, y llega a sus lectores por diferentes vías, incluyendo eventos tan significativos y reconocidos como los Premios Potencia, un hito insalvable para todos los profesionales del sector.
Pero a pesar de todos los cambios evolutivos (incluyendo los de la propiedad de la marca) Potencia ha sabido conservar su espíritu innovador y vanguardista. El mismo con el que inició su andadura Elorz, que el resto de directores hemos sabido aplicar de una u otra manera, y que ha permitido a la revista mantener su liderazgo. Incluso cuando mayor rivalidad ha llegado a existir en el mercado o en los peores momentos de crisis económica y financiera. Un mérito que es justo reconocer ha sido gracias no solo a los anunciantes y patrocinadores que siempre han apostado por nuestra revista, sino al equipo humano que ha estado detrás en cada momento.
Otro aspecto que me gustaría destacar, en esta conmemoración por motivo del significativo número 700, es la evolución del cambio de propiedad hasta nuestros días. Desde su nacimiento, bajo las siglas de la cooperativa PEDECA hasta nuestros días, Potencia pasó de ser el buque insignia de una pequeña editorial a formar parte del portfolio del principal grupo de comunicación B2B de España, el Grupo Interempresas. Un hito que no solo no le resta importancia, sino que esperamos favorezca, como lo está haciendo ya con los Premios Potencia, impulsar la cabecera mucho más allá de lo que podríamos haber imaginado nunca.
Con sus aciertos y sus fracasos, que también los hemos tenido, no vamos a negarlo, Potencia ha sido la líder en su segmento y ha evolucionado de forma constante. Con su integración en Interempresas, se le augura un futuro prometedor. La fuerza de los canales digitales y las herramientas online serán un revulsivo en esta nueva etapa. Y los grandes beneficiarios, como siempre han sido, los lectores y anunciantes. Porque una cosa siempre ha estado clara en todos los que hemos sido partícipes de la publicación. Una máxima que también imprimió Elorz y que todos hemos mantenido. Conectar a través de la información a proveedores y lectores en beneficio del sector. Ese siempre ha sido el interés de Potencia y todos los desarrollos han ido e irán en esa línea.
Felicidades por este número 700, una edición increíble que ha preparado el equipo, y por los próximos 700.
