La Fira pone en marcha su ampliación
El proyecto del japonés fue presentado al público a finales del pasado mes de febrero, en un acto que quiso representar la buena sintonía entre instituciones que ha hecho posible el acuerdo de ampliación.
La nueva feria estará completamente terminada en el año 2007, si bien dos años antes ya contará con unos 142.000 metros cuadrados. Por otra parte, la zona donde están situadas las instalaciones se convertirá en una de las áreas con más proyección del área metropolitana: la Gran Vía en L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona) capitalizará una inversión de 1.800 millones de euros en proyectos como la City Metropolitana, la Ciudad Judicial, hoteles y diversos servicios.
Además, este acuerdo también ha buscado solucionar el clásico talón de Aquiles de Montjuïc 2: el transporte público. A la feria llegarán dos líneas de metro (L2 y L9), los Ferrocarriles Catalanes y un tren elevado que la conectará con los pabellones que tiene la Fira en Montjuïc-1.
Acuerdo institucional
Los dos emplazamientos actuales de Fira de Barcelona, Montjuïc y Gran Vía, alcanzan en la actualidad los 205.000 metros cuadrados. En 2007, la superficie total bruta de Fira, —la suma de los dos emplazamientos— será de 340.000 metros cuadrados. Las obras de ampliación requerirán una inversión de 470 millones de euros, cuyo acuerdo de financiación de las obras por parte de las diferentes administraciones implicadas se firmó el pasado 14 de febrero. (ver cuadro).
Cómo será la Fira
El proyecto se centra en conseguir un espacio fluido, dotado de dinamismo, a través de elementos como el agua y los árboles; las formas orgánicas de los edificios, en contraste con los palacios feriales planos. Apuesta por el uso de fuentes de energía natural, como el aire, el agua y el calor solar para disminuir el impacto medioambiental, convirtiéndose a la vez en elementos de diseño que incrementen el impacto visual. Otra característica básica del proyecto es un diseño distintivo de los edificios, fácil de comprender, sencillo, rico y funcional que proporcione a los visitantes un espacio cómodo.
El recinto se organizará a través de una espina central de un kilómetro de longitud que recorrerá los pabellones, haciendo accesibles todos los espacios. Discurrirá desde la calle Amadeu Torner, donde habrá un gran vestíbulo y uno de los accesos más importantes, hasta el Paseo de la Zona Franca, donde se habilitará otro acceso y otro gran vestíbulo de entrada. Ambas entradas, la de la Avenida Amadeu Torner y la del Paseo de la Zona Franca, estarán conectadas por los vestíbulos del Metro, tanto de la línea 2 como de la línea 9.
En la Puerta Amadeu Torner se ha proyectado una gran cúpula y en el acceso de la Zona Franca habrá un vestíbulo y una zona verde de más de dos hectáreas que dará acceso a un gran auditorio con capacidad para 1.800 personas. Pero la puerta emblemática de la feria se encontrará en la Gran Vía de les Corts Catalanes, donde se encontarán dos edificios singulares: dos torres de 114 metros de altura y 28 pisos donde habrá un hotel, oficinas e instalaciones comerciales. Desde la Gran Vía se podrá acceder al recinto ferial mediante los FFCC de la Generalitat de Catalunya y la línea 9 del metro.
Doble recinto
La ampliación de la feria supone una inversión total de 470 millones de euros, de los que 400 corresponden a la ampliación propiamente dicha y 70 al sistema de transporte que conectará ambos recintos (Montjuïc 1 y 2). Estos 70 millones no se incluyen en el convenio de financiación porque está previsto que se haga bajo concesión administrativa.
El convenio se firmó el pasado 14 de febrero y contempla una inversión total de 400 millones de euros. La mayor parte aportados por la Generalitat, que contribuirá con 75 millones de euros de forma directa. Otros 65 millones corresponden a un crédito del Instituto de Crédito Oficial (ICF) y 200 más proceden de deuda avalada por el Gobierno catalán. En el acuerdo se contempla una ampliación de capital de 60 millones de euros durante la que se produirá una redistribución de capital de la sociedad patrimonial —Fira 2000— que se encarga de llevar a cabo el proyecto. Después de la operación, la Generalitat tendrá el 39,4 por ciento de las acciones, los gobiernos locales el 34,8 por ciento y la cámara de comercio, el 25,7 por ciento. Por otra parte, el consorcio de la Fira de Barcelona pierde su representación del 25 por ciento en el consejo de administración, que es adquirida a partes iguales por el resto de entidades.
Poco después de la firma del convenio se nombró a Josep Maria Cullell, ex consejero de Economía de la Generalitat, presidente de Fira 2000.