Ofita explora con jóvenes diseñadores nuevos conceptos de espacio, mobiliario y equipamiento para el trabajo en el hogar
El trabajo en casa está creciendo de forma espectacular, y todas las previsiones apuntan a que se va a convertir en una verdadera revolución debido a su positivo impacto medioambiental, económico y familiar, así como a las nuevas posibilidades ofrecidas por las Tecnologías de la Información y la Comunicación. “Pero ello debería ir también acompañado de un profundo replanteamiento, tanto del tipo de trabajo como de las condiciones de convivencia familiar, especialmente de la relación con los hijos”, según Camilo Agromayor, director general de Ofita.
En su opinión, las actividades laborales van a ocupar un espacio crecientemente importante en el hogar, y ello “requiere un profundo replanteamiento de su configuración”. Pero existe, además, otro factor determinante: el progresivo desarrollo del ocio digital, basado en las TICs. “La constante necesidad de formación, por medio de sistemas de aprendizaje interactivo, junto con la generalización del ocio multimedia y el protagonismo de las actividades vinculadas con las redes sociales, nos están arrastrando, irremisiblemente, hacia un nuevo concepto de hogar digital, estructurado en torno al ordenador, las telecomunicaciones y los sistemas audiovisuales…..el mismo tipo de equipamiento utilizado en el trabajo de oficina, para la realización de un tipo de tareas muy similares”.
En este contexto, el laboratorio de tendencias de Ofita, Ofilab, convocó hace unos meses el workshop “Home, Smart Office”, para desarrollar con jóvenes diseñadores nuevos conceptos de espacio, mobiliario y equipamiento para el trabajo en el hogar. El objetivo: provocar una reflexión sobre el impacto social de las nuevas formas de trabajo.
“Propusimos este tema no sólo porque el teletrabajo sea una nueva manera de entender la relación trabajador/empresa, sino también porque es una de las tendencias que va a provocar una mayor revolución en el propio diseño de las oficinas”, señala Camilo Agromayor, director general de Ofita.
En su opinión, el teletrabajo en general y el trabajo en casa en particular, están afectando a la forma de entender y diseñar los espacios de oficina por la proliferación de nuevos conceptos, como los puestos no territoriales, que conlleva. “Así, en las oficinas, y en gran medida como consecuencia del teletrabajo, adquieren mayor importancia los espacios colectivos –áreas de trabajo en grupo y zonas de comunicación informal- y los puestos personalmente asignados dan paso al pool de espacios de trabajo”.
Según las conclusiones del workshop de Ofita, ya no se trata, por lo tanto, de crear un espacio de trabajo específico dentro del hogar, en línea con la filosofía y la lógica del «despacho» tradicional. Todo apunta, más bien, a la necesidad de avanzar hacia conceptos de espacios multifunción, de carácter polivalente, que integren de forma natural todos los elementos tecnológicos necesarios, y que puedan transformarse de forma rápida y sencilla para adaptarse a una u otra actividad. Y que contribuyan a una mayor humanización, tanto del trabajo, como de la convivencia familiar y la educación de los hijos.
Nos proponen una situación familiar más o menos tradicional, una pareja con dos niños. La pareja trabaja en casa tres días a la semana y dos fuera de esta. Los niños de 6 y 8 años ocupan su tiempo entre el colegio y la casa.
Menos en las horas de sueño, el resto del día, conviven en un mismo espacio dónde el trabajo y el ocio se encuentran.
“Entendemos que uno de los beneficios que te puede dar el trabajo en casa cuando tienes una familia es disfrutar de su compañía sin perder la posibilidad de aislarte cuando sea necesario. Nuestro proyecto responde a esa situación y necesidades. Partimos de la utilización de las superficies interactivas como medio de trabajo y ocio. Una pared móvil de vidrio transparente que se vuelve opaco según la necesidad y sobre el cual se puede proyectar. Es una superficie vertical que se utilizará para trabajar, jugar, en una o ambas caras simultáneamente. Este tabique contiene dos mesas que se deslizan juntas o por separado a ambos lados de la superficie de vidrio creando distintas combinaciones según las necesidades de la actividad a desarrollar”, explican los jóvenes diseñadores que han participado en este proyecto.
Las conclusiones de de este workshop están publicados en el blog: ofilab.ofita.com, y en www.ofita.com
También podeis descargarlo directamente aquí: OfiLab 2011 (17 5)