España podría pasar de ser el segundo productor de áridos de Europa al decimotercero
Nada hacía presentir la magnitud de la hecatombre en la que está sumida la economía española, arrastrando con ella a los diferentes motores que la sustentan, en este caso los áridos. La gravedad es tal que los empresarios que conforman Anefa, han mostrado su total preocupación ante una situación de riesgo insostenible.
Los áridos son la segunda materia prima consumida por el hombre después del agua. De hecho, cada español ha consumido en el 2012, unos 2.400 kg anuales, es decir, unos 6,5 kg diarios (en 2007 se consumieron cerca de 33 kg diarios). La diferencia es tan acusada que hace palpable la gravedad del asunto.
El sector de los áridos es el principal suministrador de materias primas para la construcción de infraestructuras, para la industria y para la protección del medio ambiente, lo que le confiere el carácter de industria estratégica. Los áridos se emplean en las obras como hormigón preparado, prefabricados de hormigón (el 80% del hormigón son áridos), mortero, aglomerados asfálticos (el 95% son áridos), construcción de carreteras (el 94% de los materiales necesarios para una carretera son áridos), ferrocarriles (balasto), etc. Estos materiales se emplean, mayoritariamente en las etapas iniciales de las obras, por lo que la evolución de su consumo es un buen indicador adelantado de la eficacia de los planes de infraestructuras.
El consumo anual de áridos se ha reducido hasta 2,4 toneladas/habitante/año, situándonos a la cola de Europa y enmarcándonos en datos propios de países tercermundistas en vías de desarrollo.
Desde el 2006, el consumo de áridos ha caído un 77%
La caída del consumo de áridos para la construcción en 2012 muestra una evolución territorial muy desigual, situándose en los extremos de mayor retroceso la Comunidad Valenciana (-58,2%), Castilla-La Mancha (-42,6%) y Canarias (-40,2%). En el caso concreto de la Comunidad de Madrid, el consumo de áridos para la construcción se desmoronó en 2012, cifrándose en 7 millones de toneladas (un -38,3% respecto al año anterior).
Navarra, Cantabria y Asturias son, por este orden, las Comunidades Autónomas con menor incidencia desde el inicio de la crisis, mostrando retrocesos por encima del 50%. En el otro extremo se sitúan la Comunidad Valenciana, Madrid, Canarias, la Región de Murcia y Andalucía, con retrocesos superiores al 80%.
Actualmente España, que se encontraba en segunda posición en 2006, ocupa el octavo lugar de Europa en producción total de áridos, por detrás de Alemania, Rusia, Francia, Turquía, Polonia, Italia y el Reino Unido. La situación es tan alarmante que se prevee que España pase al decimotercer puesto a finales de 2013, siendo rebasado también por Austria, Rumanía, Finlandia, Bélgica y Suecia. Se ha producido además un nuevo retroceso en el consumo de áridos para aplicaciones industriales, tales como cementos, vidrios, filtros, industria de la química, siderurgia, metalurgia… hasta los 25 millones de toneladas (-24,2%).
La edificación residencial continúa paralizada debido a que prosigue la depreciación de la vivienda, la escasez de transaciones y las restricciones al crédito. Las medidas introducidas por el gobierno en la segunda mitad del 2012, entre ellas, la subida de impuestos de la vivienda, no hacen nada más que empeorar esta situación de caos y desplome generalizado.
La obra civil proseguirá su caída, hasta situarse por debajo del 20% de los valores de 2006. El estado actual y las previsiones de la ingeniería civil son el reflejo de un país que dedica todos sus esfuerzos a consolidar sus cuentas públicas, sacrificando el proceso a la inversión en infraestructuras.
Tras siete años consecutivos de bajadas contundentes, el mercado ha quedado tan contraído que, si en 2014 se reactivase levemente la construcción, se podría producir la paradoja de un mercado que crecería a ritmos de dos dígitos pero que, sin embargo, continuaría inmerso en una crisis extrema.
El presidente de Anefa, Javier Andrada Andrada, a pesar de mostrar su inquietud ante tales visicitudes, señalaba: “Desde Anefa, hemos propuesto diferentes soluciones para atajar esta situación mediante un ambicioso plan estratégico, que se presentó el año pasado en Mérida". Igualmente hacía hincapié en el surgimiento de una nueva oleada de robos que azota al sector: “Al no tener vigilantes que hagan guardia en las explotaciones, su maquinaria queda en muchas ocasiones abandonada, invitando así a la aparición de delincuencia”. Con todo ello, el presidente de Anefa no parece abandonar el optimismo al afirmar con contundencia: “momento de crisis, momento de oportunidades”.
Madrid afronta el futuro con cierta esperanza
César Fernández Castro, presidente de AFA Madrid, centra su creencia en una pronta recuperación del sector en el desarrollo de los grandes proyectos que podrían iniciarse en Madrid en próximas fechas, como sería, Eurovegas, afincada en la localidad madrileña de Alcorcón, y que supondrían un buen empujón a la economía y un plan estructurado de nuevas infraestructuras.
César Luaces Frades, secretario general de Anefa, añadía con contundencia: “Debido a la brusca caída del sector, a poco que haya una recuperación de obra pública en los próximos meses podemos crecer a niveles de más del 10% e incluso del 20%”, mostrando algo de optimismo dentro de la preocupante situación que atraviesa el sector: “aunque no hemos tocado fondo, el potencial de mejora es enorme”.
El presidente de Anefa concluía con este planteamiento: “Somos optimistas. Evidentemente hay empresas que han desaparecido pero las que queden, saldrán reforzadas”.