La Escuela Superior de Ingeniería de Cádiz preludia la celebración de su centenario con el XV CNIM mientras lucha por conseguir un nuevo recinto

Fue el 8 de agosto de 1903 cuando se firmó el decreto de creación de la Escuela Superior de Bellas Artes e Industria. Hay un antecedente en 1856, con el Ministerio de Industria, Comercio y Navegación en tiempos de Isabel II. Se llegó a celebrar un acto inaugural, pero por problemas financieros no se pudieron poner en marcha los estudios de industria —aunque si los de comercio y navegación.

Fue a principios del siglo XX cuando se iniciaron realmente las titulaciones de "perito", en su especialidad mecánica, eléctrica y química. En la misma escuela se impartía también, por aquél entonces, ingeniería naval y aparejadores. Como se ve, un amplio abanico impulsado por el desarrollo de la industria naval en la zona.

Las actividades de la escuela fueron detenidas durante la Guerra Civil, de1936 a 1944. En 1945 se reanuda relegada únicamente a la especialidad de perito mecánico. En 1962, el entonces director general de Enseñanzas Técnicas del gobierno necesitó un recorrido en coche de caballos por la bahía de la mano del entonces director de la escuela, Germán Muñoz Beato, para darse cuenta de la importancia de la industria naval. El director general solicitó un local adecuado, con la promesa de incluir ingeniería naval en el nuevo recinto. Fue así como León de Carranza, entonces alcalde, cedió los terrenos de una antigua fábrica de gas, lo que permitió la edificación actual de la calle Chile.

Se prevé a corto plazo la titulación superior en ingeniería industrial, y la especialidad de sistemas

En aquel momento, con equipamiento nuevo, fue una escuela puntera. Sirvió además para incluir la especialidad de electricidad y, más tarde, la electrónica industrial. Tras la inclusión de la informática, siempre en primer ciclo, hace 8 años inició la enseñanza superior, con un segundo ciclo en Organización Industrial. De esta forma pasó a ser escuela superior. El presente año es el del 40º aniversario del nuevo edificio.

Son hoy más de 2.000 alumnos, con un crecimiento, aunque moderado, sostenido en los últimos años. El reparto por especialidades está bastante equilibrado, si bien la más solicitada es la ingeniería informática. Serían más si no fuera obligado ir a otras universidades o provincias para seguir el segundo ciclo, y si hubiera más especialidades. Por ejemplo, la de Ingeniería de Sistemas, por la que la escuela está poniendo todo el empeño para implantarla a partir del próximo año.

Y es que, de nuevo, las instalaciones se han quedado pequeñas. Ahora están distribuidos entre tres locales, lo que impide una cierta cohesión y dificulta la relación sinérgica entre todos. Miguel Pastor, el director del centro, dispone ya de un nuevo proyecto que supone un salto adelante cualitativo que, no sólo es conveniente dada la situación actual, sino estrictamente necesario. Y como suele ocurrir, la financiación se convierte en el escollo principal, especialmente en tiempos de "déficit cero". Aunque "si las cosas marchan bien, durante la primavera se podría disponer ya de todas las bendiciones" —señala Pastor. La Universidad de Cádiz está excesivamente endeudada y, actualmente, para poder iniciar una obra es preciso disponer previamente de la financiación sin posibilidades de endeudamiento adicional.

Otro problema añadido ha venido por parte de los grupos ecológicos, que aseguran que los terrenos previstos están reservados por la naturaleza a algunas "lagunas episódicas". Puede ser un argumento a considerar, salvable con sólo trasladar unos metros las instalaciones previstas. Si bien se da el caso de que, con el mismo criterio, habría que vaciar completamente el campus actual adonde tiene previsto trasladarse la escuela.

Más allá del CNIM, la escuela ha previsto diversos actos para la celebración de este aniversario: conferencias técnicas con participación empresarial, música... Por su parte, los colegios profesionales de ingeniería industrial y técnica han hecho una petición a la alcaldesa para que le sea concedida a la escuela la Medalla de Oro de la ciudad por los servicios prestados a la sociedad gaditana. Astilleros e industria aeronáutica, que se nutren básicamente de ingenieros de esta escuela, prevén ofrecer todas las facilidades para el éxito de la efemérides.

La luz verde al proyecto de nueva escuela sería, en todo caso, la mejor forma de celebrar este Primer Centenario

En manos de la alcaldesa está la concesión a la escuela de la Medalla de Oro de la ciudad. En manos del rector, la nueva escuela