“La pérdida de cuota del sector platanero la podemos cifrar, y sin temor a equivocarnos, en un 30%”
Entrevista a Francisco Rodríguez, presidente de Asprocan, Productores de Plátanos de Canarias
Participan en la feria con un stand que muestra su compromiso con la Responsabilidad Social Corporativa…
Desde hace tres años estamos inmersos en diversas iniciativas orientadas a tener un producto lo más natural posible. Para ello hemos promovido iniciativas para tratar de contrarrestar las plagas con productos naturales.
Con este stand pretendemos proyectar esa nueva iniciativa que hemos puesto en marcha y transmitir a nuestro consumidor que nosotros cultivamos de manera artesanal, sana y saludable. En definitiva, lo que queremos es proporcionar a nuestro consumidor un producto con todas las garantías de calidad como es el Plátano de Canarias.
¿Cómo es la técnica “artesanal” que utilizan para su producción?
Tratamos de combatir las plagas a través de depredadores naturales, por ejemplo, de insectos que se alimentan de estas plagas, con lo cual erradicamos todos los productos químicos y actuamos sobre la plaga con productos naturales.
Háblenos de las ayudas comunitarias y de los retos que afronta la producción y comercialización del plátano...
Este año, atraviesa una situación muy complicada y sin precedentes en la historia del sector. En lo que hace referencia a las ayudas, el plátano recibe ayudas de la Unión Europea a través del POSEI, mediante las cuales llegan al sector platanero 141 millones de euros. Esta cantidad se ha vuelto insuficiente debido a que, desde el 15 de diciembre del año pasado, se activó la bajada de aranceles. Se trata de una rebaja del arancel considerable, ya que estamos hablando de 28 euros por tonelada, que sin duda repercuten en el precio. Nos hemos encontrado con un mercado totalmente distorsionado al que estábamos acostumbrados. Perdemos cuota de mercado. De hecho, en la actualidad, la pérdida de cuota la podemos cifrar y sin temor a equivocarnos, en un 30%.
Esta situación se agrava aún más por los acuerdos bilaterales promovidos por el Gobierno de España. Por eso, aunque tengamos esas ayudas, son insuficientes. Por ello planteamos un incremento de la ficha financiera por parte de la UE, mientras que al gobierno español le hemos planteado ayudas al transporte que hasta la fecha de hoy no disponemos.
Ha habido un avance importante, puesto que ya vamos a tener la opción de que se nos recoja dentro del marco del Real Decreto de Transporte. De momento, tomamos ese principio de acuerdo con cierta cautela y precaución, puesto que, un acuerdo sin ficha financiera, al final no atiende al sector. Porque en definitiva, por mucho Real Decreto que modifiquemos, es evidente que, si no hay ficha financiera, no va a tener efecto.
Para hacer frente a esta situación tan crítica, ¿qué otras iniciativas han emprendido para fomentar su consumo?
Además de las mencionadas, tenemos en trámite y estará lista en pocos días, la información pública de indicación geográfica protegida, similar a una Denominación de Origen. Esta iniciativa es muy importante para nuestro sector.
Además, hemos puesto en marcha iniciativas en centros escolares para recuperar el mercado perdido. Por ejemplo un proyecto piloto, concretamente a finales de septiembre pasado en La Rioja, mediante el que pretendemos trasladar toda la experiencia del cultivo a la escuela. Buscábamos la participación de toda la comunidad escolar –padres, profesores y alumnos–, a través de una especie de juego interactivo en el que aquellas clases que alcancen una puntuación determinada, tendrán la posibilidad de ir a Canarias y de contemplar en vivo y en directo, cómo cultivamos. Esta es la mejor manera de transmitir qué producto es el que tenemos y cómo lo hacemos.
También promovemos proyectos en otros mercados, como es el caso de Alemania y Bélgica. En esa línea trabajamos con el Icex y Proexca, y esperamos ponerla en marcha a principios del próximo año.