La certificación forestal es clave para el desarrollo del mercado de productos sostenibles
El director general de FSC a nivel internacional, Kim Carstensen, hizo entrega de las Certificaciones de gestión forestal responsable obtenidas entre 2020-2021 por los montes públicos ubicados en Cuenca, a José Luis Martínez Guijarro, vicepresidente de Castilla La Mancha, en un acto oficial realizado en el Laboratorio de Bioeconomía forestal UFIL en el Campus universitario de Cuenca.
Instantánea del acto de entrega de la certificación FSC al Gobierno de la Junta de Castilla La Mancha.
“En la actualidad España cuenta con alrededor de 435 mil hectáreas certificadas FSC, pero es necesario aumentar la superficie certificada para cubrir todas las necesidades del mercado de productos sostenibles de origen forestal, cada día con mayor demanda y reconocimiento social”, ha resaltado Kim Carstensen, director general de FSC internacional.
“La certificación forestal es clave para el desarrollo del mercado de productos sostenibles. Desde FSC podemos ayudar a incrementar la rentabilidad de la selvicultura en España, pues la Certificación FSC demuestra la gestión forestal responsable, generando mayor valor e interés en el mercado de productos sostenibles”, añade Kim Carstensen.
En este sentido, Kim Carstensen destacó la importancia del creciente mercado de la madera para los sectores de la construcción y de la industria del mueble en España, asegurando que uno de los objetivos de FSC en España, “es ampliar la disponibilidad de madera certificada FSC en los principales mercados de demanda”.
“Junto con Andalucía, Galicia y Principado de Asturias, Castilla La Mancha, cuarta Comunidad con mayor superficie certificada, se está realizando un gran avance global en desarrollo sostenible. FSC espera seguir colaborando con las administraciones públicas y propietarios privados, pues cada logro obtenido representa una gran inspiración, pues los bosques del mundo necesitan más atención y seguridad de la que están recibiendo en la actualidad”,
Durante su discurso de entrega el director general de FSC internacional realizó especial mención a los pequeños propietarios forestales con gran presencia en España, poniendo de relieve la importancia de la certificación grupal “como medio de acceso de los pequeños propietarios al mercado de productos sostenibles”. “Creemos que la certificación grupal será una forma crucial de trabajar juntos para generar compromiso en torno a la gestión forestal responsable, basada en los beneficios para el propietario del bosque y con ello poner de relieve la importancia de la gestión forestal sostenible dentro de España”, ha manifestado Kim Carstensen.
En el acto de entrega de las certificaciones forestales al vicepresidente de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, han estado presente José Luis Escudero Palomo, Consejero de Desarrollo Sostenible, Darío Dolz Fernández, Alcalde de Cuenca, Jorge Marquínez García, Director General de Biodiversidad, Bosques y Desertificación del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Félix Romero Cañizares, Director General de Medio Natural y Biodiversidad, María Ángeles Martínez Hernández, Delegada Provincial de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en Cuenca, entre otras personalidades y empresas.
Superficie forestal certificada FSC en la provincia de Cuenca
En la actualidad, tras la ampliación de hectáreas certificadas en diciembre de 2021, la provincia de Cuenca dispone de 36.000 hectáreas certificadas FSC de Gestión Forestal responsable, un total de 11 montes de utilidad pública, cuya gestión es competencia de la Consejería de Desarrollo Sostenible de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha. Los 11 montes son: Los Palancares y Agregados, el Entredicho, Fuencaliente, Muela de la Madera, Pie Pajarón, Veguillas del Tajo, Cerro Candalar y ubicados en la ciudad de Cuenca, el Ensanche de las Majadas, en la localidad de Majadas, Marojal y Molatilla, en la localidad de Huélamo, La Redonda, en la localidad de Talayuelas y la Fuenseca y Otros en la localidad de Tragacete.
El Certificado FSC de Gestión Forestal responsable obtenido de forma voluntaria, con una vigencia de cinco años y auditado anualmente, supone el cumplimiento de unos estrictos requisitos ambientales y sociales recogidos en el Estándar español de Gestión Forestal FSC, auditados por entidades certificadoras independientes acreditadas.
“El Estándar español de Gestión Forestal, compuesto de 10 principios y 200 indicadores, es resultado de una adaptación y transferencia de nuestros Principios y Criterios internacionales a la realidad forestal española. Esta adaptación y transferencia es realizada por un Comité de Estándares de FSC España, donde están representadas las tres cámaras, ambiental, social y económica, base de nuestro sistema de gobernanza de membresía; y ha sido consensuado tras diversos procesos consultivos donde estuvieron involucrados los principales actores del sector forestal en España, lo que confiere a esta normativa un extraordinario carácter participativo y de transparencia”, expone Gonzalo Anguita, director ejecutivo de FSC España.
“La última versión del Estándar nacional entró en vigor en 2020, dispone de una vigencia de cinco años e introduce de forma permanente mejoras y revisiones que son impulsadas desde nuestra política de estándares internacional lo que garantizan solidez y credibilidad a nuestro sistema de certificación”, añade Gonzalo Anguita.
El Certificado FSC de estas 36.000 hectáreas de superficie forestal incluyen en su alcance los aprovechamientos forestales, en este caso la madera lo que supone que la comercialización de este producto forestal cuenta con certificado FSC de Cadena de Custodia, incrementando con ello su valor sostenible y comercial en los mercados de la madera, con fuerte demanda en el sector de la construcción y la industria del mueble.
Monte de Palancares y Agregados, primer monte en Castilla La Mancha en obtener un certificado FSC de gestión forestal y cuarto monte en España en obtener Certificado FSC que garantiza la conservación de su biodiversidad.
Enmarcado dentro de la superficie total certificada FSC de Cuenca, el monte de Palancares y Agregados, propiedad del Ayuntamiento de Cuenca, con 4.863 hectáreas, es el primer monte certificado FSC de la provincia de Cuenca y de la Comunidad de Castilla La Mancha (2020). En agosto de 2021 amplió su alcance ecosistémico, al obtener Certificado FSC de Servicios del Ecosistema. El Certificado FSC de Servicios del Ecosistema obtenido garantiza de forma rigurosa, mediante datos verificables y contrastables, que la gestión y actividades forestales realizadas en Palancares y Agregados tienen un impacto positivo en la conservación de la diversidad de especies.
Certificación de la Conservación de la Biodiversidad en Palancares y Agregados
“La Certificación FSC de Servicios del Ecosistema es un procedimiento adicional que los titulares de bosques certificados FSC realizan para dar mayor alcance a su compromiso medioambiental, demostrando el impacto positivo que su gestión forestal tiene en uno o varios ecosistemas forestales definidos por FSC; y con ello atraer el interés de empresas responsables que quieran colaborar y apoyar económicamente la conservación de los bosques y de sus ecosistemas tan necesarios para el desarrollo de la vida humana”, aclara Gonzalo Anguita director ejecutivo de FSC España.
La certificación FSC de Servicios del Ecosistema obtenida por el Monte de Utilidad Pública 106 Palancares y Agregados verifica que sus actividades de gestión forestal conservan la biodiversidad, para lo cual se ha demostrado el impacto positivo de su actividad forestal sobre la conservación de la diversidad de las especies, mediante la aportación de datos verificables y contrastables relacionados con el número de flora y fauna protegida comparando 2020 a 2012; y la mejora de la superficie de hábitat disponible para las especies raras y amenazadas.
Actuaciones para garantizar la conservación de las especies
Entre otras actuaciones desarrolladas para garantizar la conservación de las especies se establecen zonas de protección y conservación para las especies más amenazadas, raras o sensibles, se regula el uso recreativo para evitar molestias a la fauna protegida, se excluyen del aprovechamiento de productos forestales las zonas con hábitats peculiares o singulares, se garantiza la regeneración natural de las masas o cubiertas forestales, se realiza una restauración ecológica de los ecosistemas y paisajes degradados, se realizan reforestaciones con especies arbóreas autóctonas, se desarrollan una adecuada infraestructura de defensa contra incendios forestales; y se implementan métodos no químicos para el tratamiento de plagas.
Biodiversidad de gran valor ecosistémico en Palancares y Agregados
El monte de utilidad pública es un ejemplo nacional de gestión forestal sostenible desde el inicio de su primera ordenación en el año 1894. Fue declarado Monumento Natural de “Palancares y Tierra Muerta”, por Decreto 2/2001, de 16-01-2001 e integrado también en la Red Natura 2000.
El monte ubicado en el término municipal de la ciudad de Cuenca al noreste de la Provincia se asienta sobre un extenso páramo calizo en el que se han desarrollado elementos singulares de origen kárstico (forma de relieve originada por meteorización química de determinadas rocas) como torcas, lapiaces, siams, escarpes... constituyendo elementos Geomorfológicos de Protección Especial según la Ley 9/1999 de Conservación de la Naturaleza de Castilla-La Mancha.
De entre el conjunto de biodiversidad de incalculable valor ecológico y ecosistémico, destaca la diversidad de especies arbóreas como las coníferas en forma de extensos pinares de pino negral; y composiciones mixtas de pinares con otras formaciones de coníferas como los sabinares albares (conífera longeva) y los enebrales y otras formaciones mediterráneas como los quejigares y encinares.
Por otro lado, en las zonas más sombrías y profundas en las torcas, el monte dispone de bosques mixtos eurosiberianos más propios de zonas del norte, con presencia de avellanos, tejos, mostajos y olmos de montaña, entre otros.
Junto a estos bosques se desarrollan especies arbustivas como majuelos, aligustres, cerezos de Mahoma, endrinos, cornejos y zarzas. En estos ambientes aparece el bonetero de hoja ancha (Euonymus latifolius), uno de los arbustos más escasos de la Península Ibérica. Debido a su reciente descubrimiento, todavía no se encuentra legalmente protegida a nivel regional, aunque sí lo está a nivel nacional.
En cuanto a la fauna destacan por su grado de amenaza rapaces protegidas como el halcón peregrino, el águila real y el alimoche consideradas especies Vulnerables en Castilla-La Mancha. Otras rapaces forestales protegidas son el azor, el busardo ratonero o el águila calzada, estando la primera incluida en la categoría “Vulnerable” en el Catálogo Regional de Especies Amenazadas, mientras que las otras dos son de Interés Especial. Además, el monte de Los Palancares y Agregados se incluye dentro del Área Crítica del águila perdicera.
