Transporte eléctrico sin picos de carga

Encimeras y puertas, escalones, elementos para paredes y techos, tarimas y parqués: en el almacén central de Bero Holzhandelsgesellschaft mbH en Drensteinfurt, cerca de Münster (Alemania) se apilan innumerables productos de madera hasta donde alcanza la vista. En la cercana sede de Seiling GmbH & Co KG en Ahlen se almacenan materiales de construcción y aislamiento, suelos, así como suministros de carpintería y una amplia gama de accesorios. ¿Qué destaca en ambos lugares? El característico olor del material. Además, llama la atención el bajo nivel de ruido: aunque circulan constantemente múltiples vehículos industriales de un lado a otro en los pasillos del almacén, el ambiente es agradable y tranquilo. ¿Y qué hay del olor a gasoil típico de muchas zonas exteriores? También brilla por su ausencia.

Ambas empresas forman parte del Grupo Behrens, uno de los principales mayoristas del sector maderero y de elementos de construcción de Alemania, con un total de 14 sedes. La zona de suministro abarca amplias zonas de los estados federados de Renania del Norte-Westfalia, Baja Sajonia, Bremen, Hamburgo, Brandemburgo, Sajonia-Anhalt, Turingia y Sajonia. Con unos 850 empleados, el volumen de ventas del Grupo Behrens asciende a los 250 millones de euros al año. El sector está en auge incluso en tiempos de pandemia, informa Andreas Jedamzik: “No hemos registrado una caída de las ventas desde el comienzo de la crisis”. Al fin y al cabo, siempre se está construyendo, y los confinamientos y las restricciones se están aprovechando para hacer más renovaciones de lo habitual.

Andreas Jedamzik es el director de flota del Grupo Behrens que asciende a un total de 115 camiones y vehículos industriales. En Drensteinfurt se utilizan 16 carretillas elevadoras de carga lateral y equipos especiales para transportar las pesadas mercancías, algunas de varias toneladas, de forma eficiente y fiable desde la zona de recepción de mercancías hasta el almacén y desde allí hasta la zona de expedición. “La sostenibilidad tiene una prioridad especial para nosotros”, describe Jedamzik. “Para nuestros camiones, confiamos en accionamientos modernos y económicos, y también vemos posible la transición a la tecnología del hidrógeno en un futuro próximo”. ¿Y las carretillas elevadoras? “El 40 % de nuestra flota opera con electricidad. Solo estamos invirtiendo en carretillas elevadoras eléctricas y, para 2022, el 90 % de la flota será eléctrica. Seríamos la primera empresa maderera alemana en alcanzar estas cifras”. Por ello, el Grupo Behrens también puede considerarse pionero en el sector.

Ya sea dentro o fuera en el almacén de Drensteinfurt, como en el centro de distribución de Ahlen, a pocos kilómetros de distancia, en el Grupo Behrens todas las carretillas elevadoras obtienen su energía de baterías de plomo. “Esto nos supone varias ventajas”, explica Marcel Gerwin, director de la planta de Ahlen: “los vehículos industriales son rápidos, potentes y no producen ruidos ni gases de escape. Los motores diésel, por ejemplo, pueden liberar partículas de hollín que se depositan en la madera y la contaminan”. Gerwin también está plenamente satisfecho con la disponibilidad de su flota: “Las carretillas elevadoras eléctricas nos duran fácilmente una jornada de trabajo, se cargan durante la noche y están listas para volver a utilizarse al día siguiente”.

El proceso en el almacén central de Drensteinfurt es algo diferente. Debido a los largos tiempos de funcionamiento y la alta utilización, muchos de los vehículos necesitan baterías de cambio. Esto significa que hay unas 31 baterías por cada 16 carretillas elevadoras, que se sustituyen cuando es necesario. Las estaciones de carga del Grupo Behrens se equiparon con tecnología de carga de baterías del especialista austriaco Fronius: un total de 101 cargadores Selectiva 8120 y dos Selectiva 8160 suministran energía a la flota de vehículos industriales del mayorista maderero de forma eficiente y fiable. “Esto los convierte en una parte importante y esencial de nuestra intralogística”, subraya Jedamzik.

Anteriormente, la empresa había utilizado varios cargadores de batería de alta frecuencia de otros fabricantes, pero estos causaban problemas: “había graves interferencias de frecuencia en nuestra red”, recuerda Jedamzik. “El motivo eran los picos de carga y los armónicos que se producían cuando conectábamos varias carretillas elevadoras a los dispositivos de carga al mismo tiempo, entre otras cosas. La gran demanda de energía al principio de la fase de carga incluso bloqueaba nuestro sistema informático con regularidad y teníamos que llamar a nuestros técnicos para que realizaran tareas especiales constantemente”. El resultado eran graves restricciones en el proceso operativo y costes innecesarios, una situación que el gestor de la flota no podía ni quería seguir tolerando.

Jedamzik había oído hablar de la tecnología de carga rentable y estable de Fronius, que ofrecía una solución técnica perfecta para esta situación, y decidió probarla. Incluso durante la fase de prueba con los primeros dispositivos Selectiva, las averías se redujeron considerablemente. El responsable de esto es el proceso de carga Ri, con el que vienen equipados los cargadores Fronius. En comparación con los procesos convencionales, este permite una distribución más uniforme de la necesidad de energía durante todo el tiempo de carga. Además, los dispositivos tienen una función especial de calendario que permite fijar el inicio de la carga a una hora concreta. “La tecnología de carga Fronius permite a los clientes cargar las carretillas elevadoras en horarios escalonados y evitar los temidos picos de corriente, incluso si se conectan varios vehículos al mismo tiempo al final de la jornada”, explica Matthias Leibold, Experto en Soporte Técnico de Fronius Perfect Charging. Esta solución impresionó al Grupo Behrens, que decidió pasarse a la tecnología de carga Fronius.

Marcel Gerwin, director de obra de Seiling GmbH & Co KG en Ahlen: “Las carretillas elevadoras eléctricas nos duran fácilmente una jornada de trabajo, se cargan durante la noche y están listas para volver a utilizarse al día siguiente”.

Los cargadores Selectiva ofrecen toda una serie de ventajas adicionales. El proceso de carga Ri no solo consigue reducir los picos de carga: esta innovadora tecnología también permite un funcionamiento muy eficiente desde el punto de vista energético. A diferencia de otros procesos, este se basa en la resistencia interior (Ri) de la batería conectada en cada caso y ajusta la curva característica en consecuencia. “Cada proceso de carga es, por tanto, único, y las características de la batería se detectan automáticamente. Esto quiere decir que cada batería recibe exactamente la cantidad de energía que necesita”, explica Leibold. “Por un lado, esto disminuye el consumo eléctrico, reduce el calentamiento perjudicial de las baterías durante la carga y, por lo tanto, prolonga su vida útil hasta en un 30 %. Además, su capacidad se conserva durante más tiempo”. Para el Grupo Behrens, esto se traduce en un ahorro eléctrico y una sustitución menos frecuente de las costosas baterías de tracción. Este último es un importante punto a favor para la empresa, que apuesta por la sostenibilidad. “Además, gracias a la detección automática de tensión, podemos conectar cualquier batería a cualquier cargador”, añade Jedamzik. “Así, reducimos la complejidad de manejo y, junto con la alta calidad y la baja tasa de averías de los cargadores Selectiva, garantizamos una alta disponibilidad de nuestra flota de carretillas.”

Con la nueva tecnología de Fronius, también resulta innecesaria la circulación de electrolito con la que estaban equipados los anteriores cargadores de baterías. “Muchos fabricantes ofrecen la circulación de electrolito como equipamiento adicional para reducir la temperatura durante la carga y así prolongar la vida útil de las baterías, reducir el consumo de energía y aumentar la disponibilidad”, explica Matthias Leibold. “El proceso de carga Ri ofrece todas estas ventajas en una, y sin los elevados costes de adquisición y funcionamiento de una bomba de circulación”. Además, gracias al sofisticado proceso de carga, los empleados tienen que rellenar el agua de la batería con menos frecuencia. “Esto nos ahorra tiempo y, a largo plazo, también dinero, y las baterías están mejor protegidas contra la desecación”, resume Jedamzik. “Los equipos Fronius nos han convencido de tal forma que ahora son los únicos que utilizamos en todos nuestros centros”.

La colaboración entre el Grupo Behrens y Fronius continúa: el especialista en materiales de madera ya ha equipado algunas de sus sedes con instalaciones fotovoltaicas. “Nuestro objetivo es poder generar nosotros mismos una gran parte de la energía que necesitamos: otro elemento importante de nuestra estrategia de sostenibilidad”, explica Jedamzik. Los inversores utilizados para convertir la corriente continua generada en los paneles solares en corriente alterna utilizable también son de Fronius. “Estamos trabajando en el montaje de una instalación fotovoltaica en la sede central de Drensteinfurt como parte del plan de desarrollo de la misma”, cuenta Jedamzik, dando una idea de cómo será el futuro próximo de la empresa. “Esta también estará equipada con inversores Fronius”. Lo mejor: Bero puede utilizar la energía solar autogenerada directamente para operar su flota de carretillas elevadoras y reducir así su gasto energético. “La solución inteligente de un solo proveedor que nos permite ahorrar costes y reducir nuestra huella ecológica al mismo tiempo nos ha dejado totalmente convencidos”, afirma el director de la flota, que está muy satisfecho.