Asoma expone las ventajas de la ventana de madera
Redacción Interempresas
25/11/2020Una mayor eficiencia energética con el correspondiente ahorro en calefacción o luz, alta durabilidad y sostenibilidad ambiental son algunos de los puntos fuertes de este tipo de ventanas fabricadas en un material 100% natural, renovable, reciclable y ecológico. Además, desde la Asociación Española de Fabricantes de Ventanas de Madera (Asoma) se recuerdan otras grandes razones para apostar por ventanas de este material.
En los últimos años han surgido nuevas tendencias, estilos de construcción o diseños orientados a una mayor optimización de las viviendas y a la consecución de objetivos relacionados con la eficiencia energética. Sin embargo, sea cual sea esta tendencia, la madera sigue estando muy presente tanto en las construcciones llevadas a cabo en entornos rurales como urbanos. Suelos flotantes, paredes o el propio mobiliario son algunos ejemplos que demuestran que el gusto y preferencia de los usuarios por este material se mantiene.
Las ventanas son otro elemento fundamental de la vivienda en el que la madera sigue gozando de una gran reputación, pese a que la aparición de nuevos materiales en los últimos años ha hecho que algunos consumidores asocien las ventanas de madera al pasado y, por consiguiente, a unas peores características. Sin embargo, las ventanas de madera que se fabrican hoy en día cumplen a la perfección cualquier requisito de la edificación y no tienen nada a envidiar en cuanto a durabilidad, eficiencia y rentabilidad a las fabricadas con cualquier otro material.
5 razones para apostar por las ventanas de madera
Las principales ventajas o elementos diferenciadores de las ventanas de madera pueden resumirse en cinco grandes bloques. Oskar Huidobro, presidente de Asoma, detalla cada uno de ellos.
1. Sostenibles y respetuosas con el medio ambiente
La madera es el único material que mientras se forma (en el crecimiento del árbol) almacena carbono por el proceso derivado de la fotosíntesis, frente a otros materiales que en su fabricación emiten grandes cantidades de carbono. Además, la instalación de una ventana de madera ayuda a mitigar el cambio climático, ya que la propia madera mantiene almacenado el carbono durante toda su vida útil.
“En ocasiones solemos asociar la madera a la tala indiscriminada de árboles y bosques y esto no es así. En los países con mayor cultura de la madera, están los mayores y más cuidados montes. Si los propietarios forestales no venden su madera, no pueden reinvertir en el cuidado de los montes, con lo que éstos se abandonan y aumenta el riesgo de plagas e incendios. En España, los montes crecen a un 2% frente al 0,5%, que es la media en Europa donde, por cierto, tampoco existe deforestación ya que los aprovechamientos forestales se realizan acorde a lo que manda un proyecto elaborado por un ingeniero forestal. Además, los árboles son seres vivos que nacen, viven, se reproducen y mueren, cortándolos antes de que mueran se mantienen los montes jóvenes y se asegura su sostenibilidad en el tiempo”, afirma Huidobro.
2. Favorecen el ahorro energético
La madera tiene propiedades singulares: es renovable, sostenible, permeable, aislante acústico, térmico y eléctrico, y tiene muy buena respuesta estructural ya que aguanta muy bien las cargas. Gracias a estas propiedades, se posibilita un mayor ahorro en calefacción y aire acondicionado. Con el uso de ventanas de madera, la transmisión de calor entre un lugar cálido y un lugar frío es más fácil de minimizar que si empleáramos otro tipo de material, ya que la madera es un material aislante por naturaleza, con una estructura interna porosa y llena de aire que supone el mejor aislante térmico y acústico, mejorando el confort.
Además, el presidente de Asoma añade: “Durante su uso, y gracias a su gran aislamiento térmico y estanqueidad del aire, la ventana de madera ayuda a ahorrar grandes cantidades de energía, provocando que su precio se amortice en un corto plazo. Ahí un dato muy revelador: sólo un centímetro de madera aísla tanto como diez de ladrillo”.
3. Gran durabilidad
El cuidado que requieren las ventanas de madera supone una gran ventaja. Éste posibilita que su duración pueda extenderse a lo largo de varias generaciones, logrando una vida útil muchísimo mayor y evitando que el propietario deba sustituirlas a los pocos años de su instalación.
Antiguamente era necesario barnizar y lijar las ventanas cada poco tiempo, pero actualmente todas ellas ofrecen garantías de hasta 12 años sin necesidad de cuidado alguno. Y una vez llegue el momento de realizarlo no será necesario lijar, sino aplicar un sencillo producto para que luzcan como nuevas y, si se desea, se pueda cambiar también su color o aspecto.
4. Resistentes frente al fuego
Al contrario de lo que pueda pensarse, la madera es el material que tiene una estructura que resiste mejor en un incendio; no se derrite, tampoco emite gases tóxicos lo que ayuda, tal y como se comentaba en el punto 2, a aguantar durante más tiempo la estructura de la vivienda en caso de incendio.
5. Buenas también para nuestra salud
Al ser un material natural y debido a su porosidad, la madera evita aglomeraciones de gas radón y COV en las viviendas, atenuando la humedad en el ambiente y actuando como barrera ante los campos electromagnéticos de los hogares.
“Además, no podemos olvidar que la madera aporta una serie de beneficios a nuestra salud física y mental. A nivel físico, y al tratarse de un material higroscópico que regula la cantidad de humedad, ayuda a nuestras vías respiratorias y reduce el riesgo de irritación de las mucosa, s así como la presencia de gérmenes en la vivienda. Desde un punto de vista emocional, casi todos reconocemos que la madera aporta bienestar gracias a su aspecto estético, su tacto agradable o la calidez que desprende”, concluye Huidobro.
Sobre Asoma
Asoma está integrada tanto por fabricantes industriales de ventanas de madera, como por fabricantes y proveedores de elementos constructivos y servicios integrados en el ciclo de fabricación.
El principal objetivo de la Asociación es fomentar la ventana de madera como un elemento de alta calidad, y que cumple perfectamente los requisitos del Código Técnico de la Edificación.
Uno de los valores principales de Asoma, y por extensión de sus socios, es el compromiso por el medioambiente. La madera utilizada en la fabricación de la ventana de madera es de procedencia legal, justa y contrastada por certificación de Cadena de Custodia, aparte de por otros sellos de carácter más local, que aúnan calidad con seguridad en la procedencia.