Hi-Macs da vida a Harria Gorde, una colección de esculturas que reivindica los derechos humanos
Harria Gorde consta de 14 instalaciones de microhormigón y 14 muebles elaborados con materiales resistentes como la madera de castaño y Hi-Macs, la piedra acrílica de LG Hausys, distribuido en España por Gabarró Hermanos. Ambos elementos han sido elegidos por su durabilidad y resistencia al paso del tiempo, pues persisten sin deformarse o deteriorarse. Además, para un artista de la madera como José Pablo, era esencial el uso de materiales que tuvieran la capacidad de ser manipulados con herramientas de ebanistería.
Esta colección nace de la inquietud personal del diseñador y escultor vasco José Pablo Arriaga por temas como la igualdad y la libertad de expresión. Para mostrar estos desequilibrios de la sociedad, realizó unas instalaciones de hormigón en las que se inspiró para crear unos muebles que representan una ventana a la esperanza y el respeto.
Proveniente de una familia de larga tradición carpintera, José Pablo Arriaga, con tan solo 10 años, decidió seguir los pasos de su padre tallando arcones típicos del País Vasco para las decoraciones navideñas de colegio. Con el paso de los años, decidió convertir el taller de su abuelo en un estudio de diseño donde enseñar sus creaciones y dar a conocer su trabajo.
Una colección de muebles reivindicativa y humana
Harria Gorde es una locución del euskera que significa ‘mantener la piedra’. Con esta colección, el escultor pretende explicar cómo frenar y superar los obstáculos que impiden avanzar a la sociedad del siglo XXI.
Materiales que perduran en el tiempo
Para crear su obra, el escultor buscaba un material noble, de características similares a la madera de castaño; que transmitiese la misma sensación de durabilidad, que se amoldase perfectamente a otros materiales, que pudiera manipular con sus propias herramientas y que, sobre todo, le garantizara la misma resistencia que las maderas con las que, años atrás, su familia tallaba arcones. Hi-Macs cumplía a la perfección todas estas cualidades y aportaba elegancia y ligereza a las obras.
El escultor no utiliza colores puesto que no entiende su significado y considera que restan protagonismo a los materiales. Por este motivo, era esencial encontrar un tono que le permitiera jugar con las luces, pues para Arriaga las sombras que proyectan dotan de color y significado a las mismas. Concretamente, para la realización de Harria Gorde, el escultor se decantó por la emblemática tonalidad Alpine White de Hi-Macs por la claridad y luminosidad que consigue transmitir.
Las propiedades termoformables de la piedra acrílica de LG Hausys fueron otra de las razones por las que Arriaga se decantó por Hi-Macs, ya que es un material que prácticamente puede adoptar cualquier forma imaginable.
A través de esta colección de muebles, Arriaga ha conseguido mostrar los derechos de todos los individuos frente a los desequilibrios de la sociedad; gracias al uso de materiales nobles y a la creación de formas tridimensionales. El resultado es un mobiliario de diseño, con una simplicidad fascinante y un significativo trasfondo.