Una planta diseñada por STADLER para Eco.Ge.Ri proporciona materiales reciclables de alta calidad y combustibles sólidos

El Grupo Porcarelli es una empresa italiana que opera a lo largo de toda la cadena de valor en la recogida, el transporte, tratamiento y valorización de residuos para convertirlos en nuevas materias primas. Luciano Porcarelli, copropietario del grupo junto con su hermano Giuseppe, explica que la empresa fue fundada hace más de cincuenta años “con la convicción de que los residuos pueden sustituir a las materias primas en la industria para proteger así los recursos naturales”. El grupo opera cinco plantas en las que los residuos se inscriben de nuevo en el ciclo productivo como materias primas secundarias, reduciendo el consumo de materias primas vírgenes y de energía. Hasta la fecha, sus plantas han recuperado más de tres millones de toneladas de fracciones reciclables.

A la hora de planificar su planta Eco.Ge.Ri, dedicada a la producción de combustibles sólidos recuperados (CSR) a partir de residuos industriales, el Grupo Porcarelli confió en STADLER “por su tecnología de clasificación de vanguardia, su diseño experto y su instalación profesional y rápida, y en TOMRA por su tecnología avanzada basada en sensores”, subrayan en una nota de prensa fuentes de STADLER.

“Llevamos colaborando con STADLER desde 2012. Cuando decidimos construir una nueva planta en Finale Emilia, STADLER fue la elección evidente”, declara Luciano Porcarelli, quien añade que “su experiencia en distintos sectores de residuos tenía un valor incalculable a la hora de ayudarnos a diseñar una planta flexible y sólida”. La planta Eco.Ge.Ri, inaugurada el pasao año en Finale Emilia (Módena), “es una de las instalaciones más innovadoras de su clase en Europa y evita que aproximadamente 150.000 toneladas al año de residuos que no se pueden seguir valorizando acaben en vertederos.

Este proyecto, prosiguen las mismas fuentes, “incluye la visión innovadora de Eco.Ge.Ri, la especialización técnica de STADLER en el diseño y la construcción de plantas de reciclaje personalizadas y las soluciones de clasificación más avanzadas. También demuestra que la gestión de residuos puede ser sostenible y rentable y además ayuda a preservar los recursos naturales y reducir el impacto ambiental”.

Los requisitos del Grupo Porcarelli para la planta eran claros. Eran necesarias “unas instalaciones capaces de gestionar una altísima producción que fuesen lo suficientemente flexibles como para procesar distintos tipos de materiales. Además, se requería alcanzar un producto final consistente y de alta calidad capaz de valorizar al máximo todos los materiales reciclables”.

STADLER presentó un concepto innovador. “Combinamos nuestros separadores balísticos y cintas de aceleración de alta velocidad con un estabilizador de film, que garantiza una excelente selección del material y control de PVC”, señala Pietro Navarotto, director de ventas de STADLER en Italia, quien añade que “la planta recibe residuos industriales de distintas fuentes y tiene capacidad para procesar entre 20 y 30 ton/h. Valoriza hierro, aluminio, varios tipos de plástico (PET, PEAD, PEBD, PP, PS, PU), papel y cartón y, por supuesto, CSR de muy alta calidad”.

El diseño solucionaba el reto de la variabilidad de los materiales de entrada gracias a sus dos líneas de alimentación, que se pueden usar de forma independiente o conjunta, en función de la calidad y la densidad del material. La primera línea alimenta a un trómel de STADLER para la selección del tamaño (pequeño <60 mm; tamaño medio de 60-350mm; y grande >350 mm). Por su parte, la segunda línea tiene un triturador para reducir el tamaño, seguido de otro trómel de STADLER para la selección del tamaño.

Los materiales de entre 60-350mm pasan por dos separadores balísticos STADLER STT5000_8 para clasificar finos, material 2D (ligeros) y 3D (rodantes). Se trata de una solución completa, ideal para separar RSU preclasificados y materiales pesados y moderadamente pesados.

La nueva cinta transportadora de aceleración de alta velocidad de STADLER con el nuevo estabilizador de film de STADLER transporta materiales 3D y 2D a los 5 ópticos AUTOSORT® de TOMRA con sensores NIR a una velocidad de 4,5 m/s. Los dos primeros ópticos clasifican plásticos con altos valores de cloro del flujo 2D (ligeros), mientras que los otros dos ópticos clasifican plásticos para su valorización a partir del flujo 3D (rodantes), y el resto del material se utiliza para fabricar CSR. El quinto equipo de TOMRA, un AUTOSORT® RDF, analiza el CSR, comprobando en tiempo real, la calidad del material de salida en términos de poder caloríficos, humedad y composición del producto para garantizar que cumple los requisitos para su uso.

La planta Eco.Ge.Ri se diseñó y construyó en un tiempo récord de tan solo tres meses. Debido a lo ajustado del plazo, la instalación se llevó a cabo mientras el edificio aún se estaba construyendo. La detallada planificación de STADLER y su coordinación con las empresas de construcción que participaban en las obras permitió realizar una puesta en servicio puntual para iniciar las actividades el día 6 de junio de 2022.

Esta capacidad y profesionalidad es el beneficio más destacado de este proyecto para Luciano Porcarelli, que lo que más apreció fue, “sin duda, la flexibilidad de STADLER para dar respuesta a todas las dificultades que comporta construir una nueva planta en la que trabajan varias empresas civiles al mismo tiempo. Su experiencia en proyectos complicados ha sido de auténtica ayuda”.

Eco.Ge.Ri es la segunda planta que STADLER diseña y construye para el Grupo Porcarelli: “en 2012 construimos una planta de tratamiento de residuos para la valorización de materias primas y la producción de CSR y, desde entonces, hemos tenido una colaboración muy fructífera”, afirma Pietro Navarotto.

El enfoque de STADLER con respecto al diseño y la construcción de plantas de clasificación con un fuerte equipo local guiado por su matriz ha vuelto a demostrar su eficacia, como señaló Luciano Porcarelli: “STADLER gestionó todo el diseño del proyecto desde su sucursal italiana. Lo cierto es que agradecemos mucho este enfoque local, porque agilizó y facilitó mucho la comunicación entre las empresas”.