La trazabilidad de los productos se impone en la nueva normalidad
Agustín Fragoso, SI Channel Manager & Software de Schneider Electric zona ibérica
09/09/2020En la nueva normalidad, marcada por la volatilidad y la necesidad de incrementar la agilidad y la resiliencia tanto de plantas como de cadenas de suministro, la digitalización tiene más sentido que nunca, ya que permite a los fabricantes adaptarse de forma rápida a los cambios del mercado, proporcionando flexibilidad, agilidad, resiliencia y visibilidad a una cadena de suministro cada vez más compleja.
Y, hablando de visibilidad, desde hace algún tiempo ya se observaba un cambio importante en las demandas y necesidades de los consumidores. Un interés creciente en la salud y en el impacto ecológico de todo aquello que consumen. De ahí, la necesidad de que estas cadenas de suministro deban ser capaces de monitorizar y trazar todos los productos que fabrican.
Una transición necesaria
Los fabricantes son muy conscientes de estos nuevos retos, por eso, cada vez son más los que aceleran la digitalización de sus actividades, un 20% lo ha hecho durante la crisis del COVID-19 según un estudio reciente de LNS Research.
En este sentido, es importante señalar que optimizar la digitalización no necesariamente implica grandes inversiones de capital ni cambios radicales de infraestructura. Existen soluciones que pueden adaptarse fácilmente a los sistemas existentes posibilitando un despliegue y un ROI más rápidos. Así, pueden vincularse las funciones de control y supervisión, lo que permite hacer cambios o ajustes durante la operación y ahorrar tiempo y dinero.
Tecnologías que facilitan la trazabilidad
Un ejemplo de este tipo de soluciones, son la gestión avanzada de recetas y la gestión de lotes automática, que, trabajando de forma conjunta con los sistemas de control de activos de la planta en tiempo real, ayudan a salvaguardar la calidad del producto automatizando los procesos por lotes para ofrecer una calidad constante siguiendo las especificaciones de la receta.
La mejor manera de abordar estos retos es aplicando un enfoque de dos niveles. Primero un sistema de gestión de recetas de planta gestiona las recetas a nivel local y, después, se coordina con un sistema global que garantiza la consistencia. Así, se crea una única receta para cada tipo de producto a partir de todas las utilizadas. Por otra parte, el mantenimiento de registros electrónicos automáticos permite a los usuarios capturar la configuración de lote ideal y ajustar las recetas para que la reproduzcan. Esto, además de reducir el tiempo de inactividad del equipo e incrementar el uso general de los activos y, por tanto, el rendimiento operativo y la producción, crea una completa genealogía que hace posible una trazabilidad de extremo a extremo de los productos.
En resumen, gracias a la digitalización y soluciones como los sistemas de gestión de recetas y lotes integradas, las compañías del sector industrial pueden mejorar la calidad, la trazabilidad y el cumplimiento de regulaciones, al tiempo que les ayudan a abordar algunos de los principales desafíos de la nueva normalidad.