Entrevista a Henry Cheng, director general de Durst China

China ha sido el primer país en sufrir las devastadoras consecuencias de la crisis provocada por el coronavirus COVID-19. También está siendo el primer país en empezar a salir de esta situación. Henry Cheng, director general Durst China, explica a Interempresas Industria Gráfica cómo ha vivido y vive su compañía y el sector esta crisis y ofrece algunos consejos para nuestras empresas.

Henry Cheng, director general de Durst China.

El mayor impacto en términos de productividad lo estamos viviendo justo en estos momentos, debido al ciclo de recuperación de los distintos países. China fue el primero en salir de esto, así que tenemos que ser muy cuidadosos en cómo manejamos esta situación, tenemos que prestar mucha atención a cómo todo esto puede afectar a la cadena de suministro durante este tiempo y controlar, por tanto, los tiempos para evitar que se ralenticen los plazos acordados y que aumenten los costes de envío.

Hemos parado los viajes, esto implica que un altísimo porcentaje de nuestras comunicaciones sean no presenciales... así que creo que tenemos que aprovechar esta situación para explicar al mercado qué es lo que podemos hacer por ellos a través de casos de éxito, ayudar a aquellas empresas que deseen reestructurar sus negocios y lograr que nuestros clientes y potenciales clientes entiendan la singularidad de estos tiempos que estamos viviendo y cómo, una inversión, puede ayudarles en términos de eficiencia y productividad, por ejemplo.

Estudiando la situación de los diferentes sectores a los que nos dirigimos, vemos clara diferencias. Las industrias textil y cerámica están sufriendo un duro golpe. La industria textil está teniendo pérdidas, lógicamente nadie quiere comprar moda durante los tiempos de confinamiento... y esto implica que las marcas internacionales estén cancelando muchos pedidos. Algo muy similar ocurre en la industria cerámica. Así que prevemos que en mayo muchas fábricas tengan que cerrar... En este contexto, los “chicos” grandes se volverán más grandes y los más pequeños tendrán que luchar por mantenerse vivos... Pero, por suerte, China es un país muy grande y cuenta con una enorme demanda interna. Así que muchas industrias se redirigirán hacia el mercado doméstico.

Pienso que la demanda siempre está ahí. La única cuestión que puede marcar la diferencia para las empresas chinas de este segmento de mercado es que las marcas internaciones vengan y abran aquí sus puertas, ya que, durante los próximos meses, si no más, viajar será más complicado debido a las actuales circunstancias. Creo que China es una oportunidad para las marcas internacionales, ya que cuenta con una fuerte demanda doméstica y esto sería lógicamente muy bueno para todas aquellas empresas relacionadas con el mundo de la publicidad y la comunicación gráfica.

Creo que sufriremos una recesión o una depresión, pero incluso en esta nueva perspectiva, hay oportunidades si los negocios son conducidos de forma creativa. La mejor actitud en estos momentos es ser positivo y buscar estas nuevas oportunidades, porque siempre, siempre, están ahí y en estos momentos aparecen muchas otras nuevas que antes no estaban. Así que hay que ser positivos.

Parte del equipo de Durst China.

Durante el primer trimestre, todo ha estado prácticamente parado. En marzo, el Índice Manufacturero (ISM) y de Gestores de Compras (PMI) fueron de solo 54,1 y 50,0, lo que son de por sí, datos muy, muy bajos... De aquí, descendimos hasta los 39,6 y 35,7 puntos, así que se puede ver un contraste muy importante de cerca de un 20%, casi equivalente a lo que sufrimos durante la crisis de 1997. Esto ha sido así, lógicamente, por el confinamiento y las medidas impuestas desde enero.

En estos momentos, la economía está comenzando a despegar lentamente. A medida que los trabajadores vayan volviendo a sus puestos y la gente vaya saliendo a la calle, las cifras irán mejorando. Durante el primer trimestre, se ha registrado una contracción del PIB, pero gracias al rápido y fuerte crecimiento doméstico, la recuperación se acelerará durante este segundo trimestre.

Yo creo que una de las cuestiones más importantes para acelerar la economía es que la gente vuelva al trabajo. El 98-99% de las empresas ya están de nuevo operativas y la tasa de recuperación de los trabajadores es también de cerca del 90% desde el 28 de marzo. Con esta vuelta, creo que estabilizaremos el crecimiento, los índices de precios y el empleo.

Por otro lado, el gobierno está inyectando dinero a través de microcréditos para ayudar a las empresas, adoptando las medidas pertinentes en términos de reducción de impuestos y también exenciones a las operaciones comerciales. Al mismo tiempo, trata de mantener la estabilidad de nuestra moneda en RMB, creemos que esto puede ayudar a mantener el flujo de efectivo de nuestros negocios.

También, estamos tratando de mantener la estabilidad de nuestras exportaciones...

Sin duda, ya que nivela la carga operativa de las empresas. Por este motivo el gobierno está inyectando tanto dinero e implementando todas estas medidas para ayudar a proteger el tejido empresarial... Y creo que además este año disfrutaremos de un largo fin de semana debido a la celebración de nuestro Día del Trabajo. Así que, tendremos unos días de vacaciones que incentivarán los viajes y el gasto de la población, ayudando así a las pequeñas y medianas empresas.

Propulsar el gasto interno de esta forma es fundamental para que China pueda autosostenerse porque no vemos que el mundo vaya a recuperarse en mayo... por este motivo el gobierno está intentando hacer todo lo posible y concentrar parte de sus esfuerzos en la economía doméstica. Creemos que esto es un punto fundamental también para la recuperación salarial...

En conclusión, estamos intentando incentivar el consumo interno y, al mismo tiempo, fortalecer nuestro posicionamiento en la cadena de suministro global.

Esta es una cuestión muy difícil, porque cada país, cada región tiene sus propias condiciones económicas, así que es muy difícil hacer comparaciones.... pero ya que me estáis pidiendo que lo haga, un mensaje a las empresas europeas es que echen un vistazo, en detalle, a la cadena de suministro global. EE UU y muchas compañías están adoptando una postura antiglobalización.

En este contexto, yo creo que Europa y China pueden ir juntas, trabajar unidas y aprovechar las fortalezas de cada región, aumentando la colaboración y la cooperación. Esta es la forma de traer más facturación a las empresas y crear trabajo. Creo que esta es la forma de que superemos esta situación…

La forma en que la gente interactúa, cómo nuestros negocios han sido dirigidos hasta ahora... sí, habrá cambios notables… pero creo que esto puede ser algo positivo porque nos permite ser creativos y buscar nuevas oportunidades, nuevas formas de comunicación, nuevas fórmulas de venta, nuevas formas de interactuar... este es el camino que hay que tomar. En este sentido, las compañías chinas están pensando cómo deberían reconducir sus negocios. Es el momento de aumentar la eficiencia y la productividad.

Sí, aparecerán nuevos servicios y productos. El 5G se hará cada vez más importante... es evidente que todos estos cambios requieren de una conectividad aún más rápida. Así que creo que muchas empresas ya están buscando vías para adaptar sus negocios incluso a otras actividades -muchas han entrado en la producción de mascarillas- pero, sí, hay que mirar más allá y estoy convencido de que el camino es anticiparse a las nuevas formas de interacción entre las personas.

Durst China

¿A qué zonas geográficas atienden desde Durst China?

Damos servicio a toda China y, también, a Taiwán.

¿Cuál es el perfil de sus clientes?

Nuestros clientes en Durst China vienen principalmente de los sectores del gran formato y de las industrias de la producción de etiquetas, estampación textil y decoración cerámica.

¿Qué modelos y tecnologías Durst tienen mejor acogida entre sus clientes?

En el segmento del gran formato, la Rho 512 ha sido el producto tradicionalmente mejor posicionado y disfruta de una excelente acogida entre aquellos clientes que producen aplicaciones flexibles, roll-to-roll. Además, nuestra solución híbrida P5 350, cuyo lanzamiento tuvo lugar el pasado año, está teniendo una excelente respuesta por parte del mercado. De hecho, ya hemos comenzado a instalar varias unidades P5 350 en el mercado y tenemos otras de camino. Así que estas son las soluciones más demandas por nuestros clientes... y este año lanzaremos la versión LED de la Rho 512, para la que también tenemos buenos expectativas.

¿Y para la industria de las etiquetas?

Contamos con un producto muy fuerte, la Tau RSC. Tan pronto fue presentada, ya teníamos nuestro primer cliente y, muy poco tiempo después, incluso antes de que la primera Tau RSC se instalase en China, ya teníamos algunas otras perspectivas de negocio muy interesantes, que serán cerradas en breve ya que este segmento de mercado es estratégico para nosotros, especialmente, durante la situación acontecida por el COVID-19.

¿Y en cuanto a la industria cerámica?

Sobre el sector cerámico, consideramos que nuestra solución ColorGate tiene potencial para el mercado cerámico chino... a pesar de que nuestra industria tiene ciertas características específicas que la diferencian de la industria cerámica italiana y española, prevemos un buen futuro para este producto en la gestión de color y, por supuesto, el mercado está esperando con muchas ganas que llegue el esmaltado digital, que es otra propuesta muy interesante para nuestros clientes.

Durst SmartShop, una solución para afrontar este cambio de paradigma

En estos momentos, Durst está invirtiendo en el desarrollo de su propuesta software y en su solución para e-commerce SmartShop. La integración online del “bucle” pedidos-producción-logística es crítico en el éxito de cualquier negocio y es una cuestión a la que la empresa está prestando mucha atención…ya que “cerrar el círculo de la cadena de suministro es necesario para ser más eficientes y rentables”.

Debido a esta crisis, el nivel de confianza del consumidor, que afecta directamente al gasto, es muy bajo. “Pero está claro que esta desconfianza no se debe a que no haya dinero, sino a la incertidumbre que provoca esta situación… la gente tiene miedo de lo que pueda ocurrir mañana, a perder sus trabajos y cómo esto afectaría a su capacidad de consumo… Esta fobia, este miedo, es un círculo vicioso del que debemos salir…”, apunta Henry Cheng, director general Durst China.

Pero, ¿qué podemos hacer como empresarios? “Creo que nuestro papel es ayudar a generar esta confianza a través de nuestra comunicación con el consumidor, creando y cumpliendo con una propuesta de valor basada en la calidad –una propuesta de valor, lógicamente, adaptada a esta nueva situación- que es lo que puede ayudar a generar confianza y, por lo tanto, gasto entre los clientes… esta es la forma en las que las empresas pueden dar una respuesta creativa a esta situación”, concluye el director general Durst China.