Las subastas electrónicas en las obras públicas
Las nuevas tecnologías en las compras
El uso de las nuevas tecnologías de la información y comunicación en la gestión de compras se ha desarrollado con la evolución de internet. Actualmente las tienen un gran impacto sobre toda la metodología de compras, desde el marketing de compras hasta el seguimiento del proveedor (evaluación de proveedores). Los impactos en los costes pueden venir de costes de compras (‘e-sourcing’), o de costes administrativos (‘e-procurement’).
Mientras que el ‘e-sourcing’ va a permitir optimizar los costes de las compras en la fase de licitación, el ‘e-procurement’ va a permitir optimizar los costes administrativos sobre todo en la realización de pedidos, envío a los proveedores y seguimiento de la entrega.
Tipos de subasta
Es interesante desglosar el ecosistema de las subastas electrónicas que permiten ahorro de costes de compras en el proceso de ‘e-sourcing’. En el comercio electrónico ‘e-commerce’ B2B se han desarrollado tres tipos de subastas:
- Subasta directa – subasta de ventas: el proveedor (vendedor) ofrece un producto y lo vende por el precio más alto o el último precio ofertado por el comprador.
- Subasta inversa – subastas de compras: la empresa compradora solicita ofertas para un contrato. El proveedor que consigue el contrato será aquel que proponga el precio más bajo en caso de solicitud de presupuesto (RFQ) para productos estándar, o la mejor oferta en caso de una solicitud de propuesta (RFP) para productos no estándar o servicios.
- Intercambio dinámico: Esta forma de subasta funciona básicamente como los bazares orientales. Los proveedores y las empresas compradoras pujan por cierto producto o mercado. Mientras los proveedores reducen sucesivamente el elevado precio inicial, las empresas compradoras aumentan los precios iniciales gradualmente. De esta forma, los participantes en la subasta consiguen un nivel de precio óptimo.
Además de estos tres tipos básicos de subastas existen opciones específicas de funcionamiento con relación a la propuesta de puja y la fijación de precios. A continuación listaremos los más utilizados:
- Subasta inglesa: Es la más popular. En una subasta de ventas inglesa el precio del producto ofrecido por el proveedor va aumentando gradualmente hasta que sólo queda un ofertante que adquiere el producto por el precio final. En una subasta inglesa inversa el precio establecido por el proveedor va reduciéndose gradualmente hasta que se cierra la subasta.
- Subasta holandesa (‘Top Down Auction’): El subastador propone un precio inicial muy alto y gradualmente va reduciéndolo hasta que un ofertante muestra su interés en comprar el producto a dicho precio. En una subasta holandesa inversa la empresa compradora propone un precio inicial inferior al que desea pagar por el producto y va aumentándolo gradualmente hasta que el proveedor esté dispuesto a vender a dicho precio.
- Subastas de ventas por el primer precio: Las partes interesadas entregan sus pujas en sobres sellados y una vez presentadas no pueden alterarse. Todos los sobres se abren a la vez. Este tipo de subastas de ventas suele ser la más adecuada para la concesión de licencias y contratos públicos. Las subastas inversas de este tipo se utilizan para ofertas públicas (de acuerdo con la normativa legal relativa a la concesión de contratos públicos).
- Subasta Powerbuying: Varias empresas compradoras se asocian y tratan de conseguir mejores precios sincronizando sus demandas. En las subastas inversas todos los compradores interesados reservan la cantidad que necesitan a un cierto precio sin obligación de compra. La reserva sólo se hace efectiva cuando otras empresas compradoras reservan también un volumen considerable del mismo producto o servicio. Sólo entonces el proveedor abre la puja a los compradores potenciales. Si los compradores individuales aceptan la oferta, se cierra la puja y todos los compradores consiguen el producto al mismo precio. Es un modelo de agregación sincronizada de volumen de compra.
Subastas inversas
Cuando se llevan a cabo subastas inversas se generan costes de plataforma (coste fijos o a comisión de la empresa especializada a la que se le contrata la plataforma y el diseño de la subasta), de organización (personal que organiza la subasta, preparación, definición del producto, selección de proveedores, test de productos, cooperaciones, etc.), y costes adicionales generados (por el entorno del mercado o la gama de servicios ofrecida por el proveedor; por ejemplo costes adicionales de mantenimiento de stocks). En relación a los costes de organización hay que decir que a medida que las empresas van llevando a cabo varias subastas van adquiriendo conocimiento del proceso, y los efectos sinérgicos resultantes pueden influir considerablemente en la organización de costes incluso en la fase de preparación.
Si una subasta inversa se realiza a través de una alianza comercial por parte de los participantes de la misma (subasta Powershopping), su éxito dependerá de factores de homogeneidad de necesidades y objetivos de ahorro, responsabilidad y participación activa, y factores adicionales como el nivel de expectativas de ahorro sobre el precio inicial.