Por el derecho al juego
El juego favorece las destrezas que pueden considerarse necesarias para que en un futuro los niños y las niñas contribuyan a cambiar la sociedad.
Según el estudio ‘La contribución del juego infantil al desarrollo de habilidades para el cambio activo social’, elaborado por el Grupo de Investigación Cultura Cívica y Políticas Educativas de la Universidad Complutense, el juego favorece las destrezas que pueden considerarse necesarias para que en un futuro los niños y niñas contribuyan a cambiar la sociedad como ‘changemakers’ (agentes de cambio): la creatividad, la empatía, la resolución de problemas y la cooperación, estas últimas relacionadas además con la socialización.
El estudio, que cuenta con la participación de 1.242 niños y niñas de entre 3 y 12 años, explora los hábitos del juego infantil en España y su contribución al desarrollo de habilidades para el cambio social, destacando aspectos como:
- El 44,7% de los niños españoles juega en casa frente al 18,3% que mencionan espacios exteriores como la calle y los parques como espacio de juego habitual. Así, el hogar es el lugar más habitual donde juegan, seguido de los centros educativos (35%). Se observa por tanto una participación lúdica mayor en los espacios privados, interiores y domésticos (75%).
- Más del 80% de los niños y niñas españoles están satisfechos con la cantidad de tiempo de juego aunque todos afirman querer más, y no juegan a diario, sino cuando las actividades programadas durante la semana se lo permiten, por lo que se percibe un abuso de las extraescolares.
- Apenas el 10,3% menciona a sus padres y madres como compañeros habituales de juego. La mayoría expresa que les gustaría jugar más con ellos y ellas, destacando como principal causa la falta de tiempo por motivos laborales, siendo más frecuente esta situación en los padres que en las madres.
- En preferencias de juego, ambos (niños y niñas) se decantan por los que suponen asociación y actividad pero muestran diversidad en cuanto al tipo de juego: con especial atención a los juegos deportivos en ellos, y los juegos colectivos de movimiento en ellas. En las chicas hay también más juego simbólico (aquel basado en el desarrollo de una historia), mientras que ambos comparten la inclinación por los videojuegos, ellas incluso con más afición que ellos.