El móvil, herramienta también para los detallistas
El móvil está ganando cada vez más terreno en el comercio. Los consumidores lo llevamos siempre encima y aprovechamos para comparar precios y buscar opiniones dentro de la misma tienda. En ocasiones incluso parece que se ha sustituido la labor del dependiente de por la de estos aparatos gracias a los que estamos continuamente conectados.
La pregunta es: ¿por qué no usan estos dispositivos los propios detallistas? El dependiente también puede encontrar argumentos de venta gracias a los teléfonos móviles y a las tabletas, del mismo modo que lo hace el cliente, y así además ofrecer transparencia, ya que el consumidor puede confirmar de primera mano lo que el vendedor le está explicando.
Por ejemplo, si un detallista sabe que está ofreciendo el mejor precio, puede mostrar el de otras tiendas online. Si es consciente de que el producto es de muy buena calidad, puede enseñar lo que se dice en foros y páginas especializadas. Y si el cliente duda acerca de si el producto le será útil, le puede ofrecer un vídeo demostrativo. Eso por no hablar de toda la información técnica que se puede encontrar en internet.
A veces la actitud ante las nuevas tecnologías es de confianza y de resistencia. Una resistencia que no sólo es inútil sino también innecesaria. Si confiamos en nuestro producto y en nuestro servicio, ¿por qué no vamos a contar con todo el apoyo que encontramos también en internet? Es más, ¿por qué dejamos que el cliente haga el que debería ser nuestro trabajo?