“Debemos avanzar mucho más en el contenido práctico de nuestra educación”

Los alumnos de formación profesional de especialidades técnicas y los recién licenciados en ingenierías cuentan hoy con una buena base teórica, pero sus conocimientos están alejados de las tendencias actuales y de las prácticas tecnológicas del mundo industrial y de los retos y desafíos que plantea la Industria 4.0 en un mercado cada vez más competitivo. Xavier Segura, director general de Festo España y Portugal, es un firme defensor de la figura del educador como “líder e inspirador de las generaciones futuras en la utilización creativa y disruptiva de las nuevas y crecientes tecnologías”, y destaca la importancia de la formación en un país como el nuestro, con “un alto nivel tecnológico y unos sistemas industriales muy competitivos”.

Aunque existe buena voluntad, la relación entre entidades educativas y empresas no es actualmente tan estrecha y fluida como debería ser para afrontar los retos que tenemos por delante. La industria está iniciando la adaptación de los conceptos de Industria 4.0 y eso requiere una importante adaptación de los perfiles competenciales de las personas que trabajan y trabajarán en dichos entornos productivos. La fabricación avanzada incorpora una mayor complejidad tecnológica y, sobre todo, una intensa interacción y colaboración hombre-máquina. En ese sentido, es fundamental que las competencias de las personas se desarrollen al mismo ritmo que las tecnologías para evitar que se produzca un desalineamiento entre mercado laboral y demanda industrial.

Las universidades y centros de formación profesional deben adaptar estas nuevas tecnologías, así como nuevos sistemas educativos, para que los actuales y futuros profesionales adquieran el nivel formativo adecuado, no solo teórico sino también práctico. Este cambio y evolución competencial solo puede lograrse a través de una estrecha colaboración entre las diferentes entidades educativas y las empresas.

El reto hacia una industria conectada debe venir desde tres áreas. En primer lugar, por parte del Ministerio de Educación y las diferentes consejerías, que deberían acelerar las necesarias adaptaciones curriculares de las formaciones regladas actuales. En segundo lugar, mediante una potente formación profesional dual que, a través de un aprendizaje con un alto componente práctico, permita un rápido contacto y adaptación a la tecnología. Y por último, a través de una formación continua, enfocada a los profesionales de la industria para que puedan adquirir las competencias necesarias en este nuevo entorno de fabricación.

La cualificación técnica en España es muy buena, ya que disponemos de un sólido sistema educativo de formación profesional y universitaria. Desde mi punto de vista, debido al desarrollo tecnológico que estamos experimentando, debemos avanzar mucho más en el contenido práctico de nuestra educación, para potenciar la interacción y dominio de la complejidad tecnológica.

El actual currículum es muy amplio e incluye la mayoría de tecnologías de Industria 4.0, por lo que se requiere una adaptación curricular donde se potencie el aspecto práctico (aprender experimentando), así como la incorporación de conceptos relativos a integración de sistemas, conectividad, robótica colaborativa, ciberseguridad, realidad aumentada, entre otros, que adquieren una gran importancia en los nuevos sistemas industriales. Desde Festo consideramos que es muy importante disponer de nuevos medios de formación que acerquen el alumno a esta interacción, ya que, si los estudios son principalmente teóricos, nos encontraremos en un entorno en el que los estudiantes no estarán suficientemente preparados para una rápida inserción en un mundo industrial en continua evolución.

Actualmente los recién licenciados están muy preparados a nivel de contenidos, pero están alejados de las tendencias y prácticas tecnológicas del mundo industrial. Eso hace que su entrada en el mundo profesional sea más lenta y requiera un importantísimo esfuerzo formativo de las empresas para poder rentabilizar la incorporación de personas universitarias. Por eso, desde Festo insistimos en un enfoque más dual que combine el aprendizaje teórico y práctico también en ámbitos universitarios.

Creo que no se puede generalizar en este aspecto. Nuestros estudiantes están muy bien preparados y tienen una rápida empleabilidad en áreas con una aplicación más práctica como es el caso de ingeniería, economía, TIC… Quizás en áreas de investigación avanzada como matemáticas, física o biomedicina la fuga es más elevada porque los recursos para investigación pura desgraciadamente son muy escasos. Otros países como Alemania, por ejemplo, invierten mucho más en becas de investigación que le aportan unos buenos resultados a largo plazo.

Bajo nuestro punto de vista, España tiene un alto nivel tecnológico, así como unos sistemas industriales muy competitivos, que, unidos a unas buenas infraestructuras y acceso al talento, nos hace muy atractivos a nivel internacional. Si bien la marca España destaca en el área de diseño, industrialización y fabricación, la industria debe trabajar las áreas de comercialización y exportación para poder competir mejor en un entorno global, ya que tradicionalmente aspectos alrededor de marketing, venta industrial y exportación no se han tratado con suficiente profundidad. Otros países como Italia invierten muchos esfuerzos en el área comercial, lo que les permite tener una elevada presencia internacional.

Es una pregunta compleja ya que es muy difícil opinar desde un punto de vista externo. Disponemos de una industria de alto nivel, que debe seguir avanzando en base a criterios de eficiencia, sostenibilidad, agilidad, productividad y alto nivel tecnológico para ganar mayor peso en el PIB, con la vista puesta en el 25%. Eso nos permitiría una base económica estable y de futuro que genere una mayor riqueza en la sociedad. Para ello el sistema educativo debe estar íntimamente ligado al desarrollo industrial y tecnológico, impulsando una formación avanzada, continua, con un alto componente práctico y a través de centros educativos dinámicos y equipados con sistemas de aprendizaje y metodologías adaptadas a las tendencias. Creemos profundamente en potenciar y valorizar la figura del educador como líder e inspirador de las generaciones futuras en la utilización creativa y disruptiva de las nuevas y crecientes tecnologías.

Como empresa tecnológica, el conocimiento y la preparación de nuestras personas es un pilar fundamental. Para afrontar los retos de productividad y competitividad global, los clientes esperan de nosotros un asesoramiento eficiente, competente y especializado en sistemas de automatización industrial. Esto supone invertir intensamente en formación continua para poder ganarnos día a día su confianza y responder a sus necesidades, tanto a corto como a largo plazo, en un momento donde el desarrollo tecnológico está en continua evolución.

Desde sus inicios en automatización, Festo apostó por el área didáctica, con el objetivo de acercar el conocimiento de la tecnología a las personas y de esa forma adquirir rápidamente las competencias necesarias que permitieran una adecuada utilización.

Dentro de la división didáctica, tenemos dos vertientes: sistemas de aprendizaje, donde desarrollamos equipamientos orientados a centros formativos para lograr un aprendizaje práctico tanto de tecnologías básicas como neumática, mecánica, hidráulica, etc…, así como de las últimas tendencias tecnológicas alrededor de Industria 4.0. Esta apuesta se ha reforzado en los últimos meses gracias a la adquisición de la empresa Labvolt, que nos ha permitido disponer mundialmente de la mayor oferta en sistemas educativos.

Por otro lado, el área de consultoría y formación trabaja en la mejora tanto de las competencias técnicas de profesionales, como de los sistemas productivos de las empresas, con el fin de ayudarles a incrementar su productividad.

El acuerdo con el Centro de Formación Somorrostro tiene por objetivo colaborar en la formación de las competencias tecnológicas necesarias para una rápida adaptación a los conceptos de Industria 4.0, así como aumentar las competencias técnicas de la región, con cursos dirigidos tanto a personas desempleadas como a la formación continua de profesionales.

Creemos totalmente en la formación dual, tanto desde el ámbito de la formación profesional como en estudios de grado o máster técnicos, por lo que, a través de acuerdos con diversas entidades como el caso de Salesianos España, buscamos acercar más rápidamente las tendencias tecnológicas al sistema educativo, para que los estudiantes tengan una rápida y efectiva entrada en el mundo profesional.