Entrevista con Llorenç Rafecas, Director Técnico de Enantia
¿Qué objetivos de futuro se ha marcado Enantia, a corto y medio plazo?
Además, Enantia tenderá a conceder especial importancia a los contratos que den lugar a una relación de “partnership”, compartiendo riesgos en la fase de desarrollo y participando en los beneficios derivados cuando se llegue a la etapa de comercialización.
Por otro lado, incrementar todo lo relacionado con la investigación propia, tanto lo que se refiere a procesos originales de síntesis (a poder ser, patentables) destinados a la transferencia de tecnología, como a la preparación de productos complejos en forma enantioméricamente pura destinados a la preparación de nuevos fármacos o a la venta.
¿Qué les diferencia a ustedes de otras empresas similares del sector?
Por otro lado, nos diferenciamos en que somos un tipo de empresa único al combinar el conocimiento científico de grupos de investigación universitarios líderes en su campo con la experiencia de profesionales que han trabajado, tanto en I+D como en producción, en el campo de la química fina y la preparación de principios activos farmacéuticos a nivel industrial.
¿Es cierto, como dicen algunos, que la investigación española en este campo deja mucho que desear?
Donde sí existe una ligera disfunción, y en esto el caso español no es distinto al de muchos países europeos, es en la proporción de conocimientos generados que acaban protegidos por patente. Muy posiblemente, la creación de empresas de base tecnológica en entornos universitarios o de los otros agentes del sistema ciencia/tecnología (CSIC, parques científicos, institutos de investigación…) contribuya a cerrar esta brecha. Enantia, cuyo modelo de empresa se ajusta totalmente a esta tipología, hace una sólida apuesta por la investigación nacida en entornos universitarios y la protección de los derechos de propiedad industrial que se deriven de dicha investigación.