Aviones Boeing 777 más sostenibles con una superficie que imita la piel del tiburón
Las compañías BASF y Lufthansa han desarrollado una tecnología de superficie basada en la piel de tiburón para reducir la resistencia de los aviones. Denominada AeroSHARK, esta tecnología ha sido aplicada con éxito en un Boeing 777-300 ER, operado por Swiss International Air Lines, que hizo su primer vuelo comercial el pasado mes de octubre de 2022.

El fuselaje y las góndolas del motor de la aeronave, registrada como HB-JNH, han sido equipadas con aproximadamente 950 metros cuadrados de las llamadas películas Riblet, que replican las propiedades de eficiencia de flujo de la piel de tiburón para reducir la resistencia.
Gracias a su estructura superficial especial de nervaduras microscópicas, conocidas como riblets, AeroSHARK reduce la resistencia a la fricción de la superficie exterior de esta aeronave en poco más del uno por ciento, según los cálculos y simulaciones de flujo. Como resultado, el consumo de combustible y las emisiones de CO2 también se reducen en el mismo orden de magnitud. Para este Boeing 777-300ER de Swiss, equivaldría a un ahorro anual de alrededor de 400 toneladas de queroseno y más de 1.200 toneladas de dióxido de carbono. Para un Boeing 777F, en el que también está previsto implementar esta tecnología, el ahorro será de unas 370 toneladas de combustible y 1.170 toneladas de CO2 cada año.

La modificación AeroSHARK del HB-JNH comenzó a finales de agosto y culminó en varios vuelos de prueba el 8 y 9 de septiembre. Durante estos vuelos, se demostró en detalle que la modificación de AeroSHARK no tuvo un impacto negativo en la seguridad operativa y el manejo del Boeing 777. Por tanto, la Oficina Federal de Aviación Civil de Suiza concedió un permiso de vuelo temporal a la aeronave que despegó con pasajeros por primera vez el 10 de octubre.
En el mes de diciembre, la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA) otorgó a Lufthansa Technik el llamado Certificado de Tipo Suplementario (STC) que allana oficialmente el camino para la modificación en serie de dos variantes de Boeing 777 con las películas de riblet AeroSHARK.

Aplicación de las películas de riblet a un avión Boeing 777-300 ER.
El STC emitido por EASA permitirá a Lufthansa Technik aplicar en serie las películas de riblet a los aviones Boeing 777-300ER y 777F. El inicio de las modificaciones comenzó en Frankfurt y Zurich el pasado mes de enero. Cuando los once Boeing 777 actuales en Lufthansa Cargo y doce en Swiss hayan recibido su modificación AeroSHARK, reducirán la huella de carbono del Grupo Lufthansa en más de 25.000 toneladas anuales.

"La aprobación de AeroSHARK para las variantes del Boeing 777 es un paso importante en la distribución de esta nueva tecnología para una mayor sostenibilidad en el transporte aéreo", ha declarado Soeren Stark, director ejecutivo de Lufthansa Technik. "Con nuestro socio BASF, ahora podemos ayudar a nuestros clientes a hacer que subflotas enteras sean más respetuosas con el medio ambiente".
"La realización de un proyecto de este tipo solo es posible a través de la cooperación en sociedad y una gran confianza en la experiencia de cada uno. Juntos, hemos logrado desarrollar una solución a medida que combina la acción económica y la sostenibilidad a partes iguales", explicó Uta Holzenkamp, jefe de la división Coatings de BASF.
Lufthansa Technik y BASF tienen la intención de desarrollar AeroSHARK para tipos de aeronaves adicionales y para superficies más grandes, de modo que en el futuro puedan ayudar a las aerolíneas de todo el mundo a alcanzar sus objetivos de emisiones. En los cálculos iniciales del modelo, la tecnología de piel de tiburón en su etapa de máxima expansión podría incluso evitar emisiones de CO2 en una escala de hasta el 3%.
AeroSHARK reduce la resistencia a la fricción de la superficie exterior de esta aeronave en poco más del uno por ciento.
Gracias a la nueva tecnología, un Boeing 777-300R puede ahorrar alrededor de 400 toneladas de queroseno y más de 1.200 toneladas de CO2 al año.