Desciende el consumo de pescado en España, pero se mantiene por encima de la media mundial
El pasado mes de julio se presentó un informe sobre el consumo de pescado llevado a cabo por el Consejo de Productos del Mar de Noruega (Norge). En dicho informe se desprende un descenso en el consumo de pescado y marisco en España de 1,7 kg por habitante y año en los últimos cuatro años. La compañía ha realizado un estudio en nuestro país, llevando a cabo 2.859 encuestas, para entender las causas que han propiciado esta bajada en la demanda de productos del mar.
Hildegunn Fure Osmundsvåg, directora del Consejo de Productos del Mar de Noruega, presentó el informe sobre el Consumo de Pescado de productos del Mar de Noruega en España, en el que destaca una caída de 1,7 kg anuales por habitante con respecto a 2012. Para saber el motivo de este descenso en el consumo de pescado en España, Norge ha realizado 2.859 encuestas en todo el territorio nacional que incluye las diferentes especies de pescados que se consumen y las preferencias de la sociedad divididas en edad, ingresos, regiones y géneros.
Rueda de prensa de presentación del informe.
A pesar de este descenso, España sigue siendo uno de los países líderes en consumo de pescado y marisco, con una cifra anual de 42,4 kg de media por cada habitante, mientras que la media mundial se sitúa en 18,9 kg por persona al año. España se sitúa de esta forma en el Top 5 en Europa en consumo de pescado per cápita. Sin embargo, los españoles consumen actualmente casi el doble de carne que de pescado, con una cifra aproximada de 93 kg al año.
Causas del descenso en el consumo
Nueve de cada diez españoles afirma que toma pescado una vez a la semana y el 70% incluso en dos o más ocasiones. Teniendo en cuenta este dato, ¿cuál es la causa del descenso en la demanda de productos del mar? Según afirmó Hildegunn Fure Osmundsvåg, este descenso viene determinado por la reducción de las cantidades ingeridas por los españoles. ¿Y por qué se han reducido las cantidades? La causa de siempre: la crisis económica.
Sin embargo, y a pesar de que el pescado todavía se cataloga como un alimento caro, la crisis económica no es el único factor que influye en el descenso del consumo. “Los hábitos de vida están cambiando. La gente no tiene tiempo para cocinar y eso supone que prefieran demandar alimentos que no impliquen mucha complicación. Su consecuencia directa es que hoy en día la gente consume más pescados y mariscos en forma de tapas, entrantes o raciones más pequeñas”, advirtió la directora del Consejo de Mar de Noruega durante la presentación.
También influye la edad de los consumidores, ya que las personas entre 18 y 34 años incluyen menos pescado en su dieta habitual, ya que lo consideran caro y dicen tener escasos o nulos conocimientos en cuanto a cómo cocinarlos. En este sentido, un 37% de la población joven afirma no tomar pescado nunca mientras que el 75% de los consumidores de entre 50 y 65 años lo toma como mínimo una vez a la semana.
Motivación para comprar más pescado.
“Los motivos de los españoles para comer más pescado fresco en general, son fáciles de entender y muchas de sus preferencias se pueden llevar a cabo sin problemas. Cuando les preguntamos qué debería ocurrir para que comprasen más pescado fresco, un 46% respondió que debería tener una mejor relación calidad/precio. Hasta un 44% de los encuestados piensan que el pescado fresco debería tener menos espinas. Otro factor clave para motivar a los consumidores a que coman más pescado fresco es reducir el tiempo de espera (en cola) a la hora de pedir pescado. Hasta un 16% dice que es importante”, reza un extracto del informe presentado por Norge.
También se explicó que el consumidor piensa que los Productos de Valor Añadido en bandeja no son tan frescos como los del pescadero, una percepción errónea y que conlleva invertir mucho tiempo para ganarse la confianza de los consumidores. Sin embargo, ganarse esa confianza acabaría con otra de las barreras con las que se encuentra el consumidor: ¿cuál es el corte adecuado para cada especie diferente de pescado? El producto en bandeja concluiría dicho debate, ya que conlleva comprar el producto con una buena calidad de preparado.
El salmón toma protagonismo
Del estudio realizado por Norge también se desprende un cambio en las preferencias de los consumidores, con un aumento en el consumo del salmón. Según los datos de Europanel, en el año 2012 se consumían 50.000 toneladas de salmón en España mientras que en 2015 se consumieron 65.000. El salmón ya es el segundo pescado más consumido en España, ya que del total de pescado que se come en nuestro país, un 7% se corresponde con esta especie.
Hildegunn Fure Osmundsvåg, directora del Consejo de Productos del Mar de Noruega.
Liderando el consumo en España se sitúa nuevamente la merluza, producto estrella de nuestro país, aunque su tendencia sigue siendo a la baja. Según datos de Europanel, en el año 2012 los españoles consumieron casi 200.00 toneladas de este pescado blanco mientras que en 2015 el consumo cayó a las 150.000 toneladas. En tercera posición y muy cerca del salmón, se encuentra el consumo de bacalao, otro clásico en nuestras cocinas.
Menos ingresos, menos consumo de pescado
Otro de los datos llamativos que se desprende del informe de Norge es que los consumidores con menor poder adquisitivo comen pescado con menor frecuencia. Entre 2012 y 2015, los hogares con ingresos menores a los 18.499 euros anuales que consumían pescado de manera frecuente pasaron de ser el 53% a ser el 49%. En cualquier caso, los pescados y mariscos gozan de una excelente popularidad, ya que 8 de cada 10 kilos tiene como destino las cocinas españolas. “Las comidas y cenas son los momentos favoritos a la hora de decidirse por elaborar una comida de pescado; el 21% de los consumidores toma la decisión ese mismo día, mientras que el 18% decide en la misma tienda”, advierte el informe.