España sigue batiendo récord en accidentes laborales

El número de muertos en accidente laboral durante el mes de Enero 2009 ascendió a 71, de los que 49 perdieron la vida en el puesto de trabajo y 22 in itinere (en el camino de casa al trabajo o viceversa)", según el Boletín de Estadísticas Laborales (BEL) del Ministerio de Trabajo. En total, durante el mes de Enero del 2009 hubo 54.906 accidentes laborales, 24.770 menos que en el mismo período del año anterior, concretamente el 31,09% menos. Por sectores, el que más muertos sumó fue el de servicios (31), seguido de la construcción (9), el agrario (5) y la industria (4). A pesar del descenso considerable debido al proceso de cambio y evolución que vivimos hoy en día en la industria, el descenso del sector industrial debido a la crisis económica actual ha catapultado a la industria como sector más dañado en cuanto a siniestralidad laboral.

Conociendo estos datos nos da una idea de la inseguridad que nos encontramos en el día a día de cada uno de nosotros. Esto implica la imperatividad, por parte de todos nosotros, de actuar de la manera más rápida y eficaz posible para reducir la accidentalidad y eliminar la mortalidad en las estadísticas. El modo de atajar con este problema nos obliga a buscar el porqué de todas estas situaciones y atacar al problema de raíz.

¿De quién es la culpa?, sería una buena pregunta. Pues bien, hay veces que es muy fácil encontrar un solo culpable, o echarle la culpa a alguien pero no siempre es así. Hay muchos culpables. Éstos podrían resumirse en tres; la administración, las empresas y los trabajadores.

En España se ha calificado como cara y a su vez ineficiente; y a su vez no existe una divulgación adecuada de los conocimientos necesarios y documentación requerida algunas veces. Muchos nos preguntamos ¿porqué es tan fácil encontrar una directiva (de obligado cumplimiento y gratuita) y por el contrario, para adquirir una norma solo es posible previo pago de una cantidad económica (ciertamente elevada)? ¿Cuál es la razón si una norma es un medio para reducir las estadísticas que hemos comentado previamente?

También es verdad que no podemos fijarnos en el modelo europeo de legislación, ya que cada país es un mundo y cada uno podría requerir de una legislación hecha a medida. Quizá sea ese el problema, una legislación no debe ser copiada y traducida, sino que debe ser redactada en función de los requisitos que puedan ser aplicables en cada país.

Cuantas veces hemos oído comentar lugares donde las normas no son respetadas, ya sea por desconocimiento como por negativa de los empresarios en llevar a cabo medidas necesarias debido a que se requiere un desembolso económico elevado. Tanto fabricantes de maquinaria como propietarios de maquinaria deben hacer lectura de estas noticias para combatir las causas de la siniestralidad en España. Los pasos a llevar a cabo para obtener una máquina o instalación segura son eliminar, proteger, formar e informar. Para ello, el empresario dispone de dos vías totalmente gratuitas. Aquí, quedaría resuelto los inconvenientes o excusas que ponen ciertos empresarios hoy en día: el desembolso económico y el desconocimiento.

Estas dos vías para conseguir una máquina o instalación segura son la Directiva de Máquinas (transpuesta a la legislación a través del Real Decreto 1435) y la Directiva de Equipos de Trabajo (conocido como Real Decreto 1215).

El Real Decreto 1435 aplicable a cualquier máquina puesta en servicio a partir del 1 de enero de 1995 dentro del Espacio Económico Europeo nos da una idea de realizar el Marcado CE, con su correspondiente Declaración de Conformidad, placa de Marcado CE y Expediente Técnico de Construcción (requisitos esenciales de seguridad y salud, manuales, esquemas, ensayos, análisis de riesgos…), basándonos siempre en normas armonizadas que nos dan presunción de conformidad de la Directiva.

El Real Decreto 1215 aplicable al resto de máquinas, que nos indica las disposiciones mínimas aplicables a equipos de trabajo para cumplir dichas disposiciones.

Cuantas veces hemos visto realizar acciones imprudentes por parte de los propios trabajadores, sin tener en cuenta los posibles riesgos que podrían conllevar. Manipulaciones incorrectas, mantenimientos inadecuados, acciones temerarias para aumentar productividad, el no uso de EPI’s por incomodidad… son algunas de ellas.

Hasta que no exista una colaboración y pongan de su parte los tres culpables descritos, seguiremos en cabeza obteniendo los mejores puestos en siniestralidad laboral.

Pilz Industrieelektronik S.L. (empresa dedicada a la seguridad industrial), y todo su experimentado equipo seguirá trabajando día a día, para aplicar con rigurosidad la normativa vigente, dar las soluciones más adecuadas para reducir la siniestralidad en el sector industrial y que en las próximas estadísticas España no aparezca como líder en accidentalidad laboral. La seguridad no es solo un resguardo, un paro de emergencia, un sistema de control adecuado…; sino que es una cultura que debemos promover y llevar a cabo todos!