Existe una clara relación fisiológica y psicológica entre la luz y los seres humanos
Don Holder comparte su experiencia en el diseño de iluminación escénica
El teatro Coliseum de Madrid acogió, el pasado 18 de julio, una masterclass del diseñador de iluminación Don Holder, organizada por la AAI (Asociación de Autores de Iluminación). Holder ha estado nominado en trece ocasiones en los Premios Tony, ganador de este premio en dos ocasiones por su trabajos en 'The Lion King' y 'South Pacific', y ganador de 5 Drama Desk Awards. Además, es un reconocido profesional responsable, entre otros diseños, de 'Anastasia', 'Golden boy', 'Spider-man turn off the dark', 'The king and I' y 'Tootsie'.
Aprovechando la ocasión, Don Holder habló de su trabajo y su visión de la labor del diseñador de iluminación, gracias a su extensa experiencia durante más de 29 años tanto en teatro musical como en ópera, cine, televisión e iluminación arquitectural.
“Si lo piensan, sin luz nada en nuestro mundo podría existir tal y como lo conocemos. Sin lugar a dudas, la luz es algo efímero que tiene un gran efecto en lo que vemos, pero también en cómo lo vemos”, empezó afirmando Don Holder. Y de esto último es un ejemplo muy claro el teatro. “El 99% de las personas probablemente desconoce la iluminación, pero el 100% se ve afectada por ella”, afirmó Holder parafraseando a Jennifer Tipton, su mentora.
Es sencillo: en el teatro, la luz crea el contexto visual y proporciona la lente a través de la cual se experimenta el evento teatral, sea un musical, una obra, ópera o danza.
Objetivo del diseñador de iluminación teatral
En cuanto al papel del diseñador de iluminación escénica, Holder afirmó: “Un diseñador de iluminación crea y manipula la luz para contar una historia”. Por ejemplo, la luz está hecha para sugerir un momento del día, para evocar una respuesta emocional particular. “En ocasiones, la escena se tiene que revelar a través de un enfoque muy preciso, por ejemplo, empleando un tratamiento del color desde diferentes ángulos”, matizó Holder.
A medida que iba hablando sobre su experiencia, Holder iba mostrando diferentes escenas de proyectos en los que ha trabajado que ejemplificaban sus palabras.
Efecto psíquico y fisiológico de la luz y los colores y cómo trabajarlo
Para explicarlo, Holder hizo referencia a la física y a la naturaleza de la luz: “Los físicos definen la luz como una radiación electromagnética que puede ser percibida por el ojo, pero creo que debemos pensar en ella como una onda vibrante de energía radiante que emana del sol o rebota en una superficie reflectante como la luna o el cielo, o que irradia de fuentes artificiales”.
Mediante una serie de gráficos y diagramas, Holder explicó cómo funciona la luz, cómo ésta ingresa en el ojo y cómo nuestro cerebro la procesa y la traduce. Todo ello para exponer, y llegar a entender, cómo la luz nos afecta a las personas, a los ritmos circadianos, y cómo los diseñadores de iluminación tienen que tenerlo en cuenta en el momento de desarrollar sus proyectos.
- Rojo: Bajo una luz roja o cálida nuestro apetito se estimula y puede aumentar el rito cardiaco. Holder hizo referencia a un estudio en el que se evidencia que en los días soleados las personas somos más optimistas y que bajo una luz roja o cálida sentimos que la persona con la que estamos es más atractiva. “Esto explica porque no hay luces frías ni azules en los restaurantes y hoteles de lujo”, apuntó.
- Verde: Está considerado el color más relajante para el ojo humando. En referencia a ello, Holder explicó que “hay estudios que confirman que en realidad tiene un efecto reparador en el cuerpo, puede dilatar los vasos sanguíneos, disminuir la respiración y algunas personas piensan que es la asociación del verde con nuestro hábitat ancestral lo que lo hace tan beneficioso”.
- Azul: Otro color muy común y que está asociado a la calma y la serenidad.
“Una cosa que también es importante recordar es que la luz es una especie de percepción subjetiva del color, es subjetiva, cambia dependiendo de ciertos factores, como la raza o el origen étnico, la edad o el género”, apuntó el lighting designer. Además, y sin lugar a dudas, existe una clara relación fisiológica y psicológica entre la luz y los seres humanos, es parte de nuestro ADN. "Este interesante efecto de la luz y de los colores es básico en la aplicación a nuestro trabajo, para conseguir unas respuestas emocionales determinadas", añadió Holder.
Entender el medio de la luz e inspirarse
Observar el mundo que existe a nuestro alrededor es básico para un lighting designer. En relación a todo esto, Holder habló de su misión: “Parte de mi trabajo como diseñador de iluminación es estudiar las relaciones que existen entre la luz y las personas, es comprender que cualquier elección que hagamos, sin importar cuán pequeña sea, puede tener un profundo efecto en la percepción. Parte de mi estudio personal es observar la luz en la naturaleza, estudiar el obra de los grandes artistas que pueden representar la luz en dos dimensiones de manera sorprendente en un lienzo”. En relacion a las obras de grandes artistas, Holder explicó que todos ven la luces de forma ligeramente diferente, pero todos ellos logran crear una sensación de tiempo y lugar, evocando una respuesta emocional real en el espectador. "Esto es a lo que trato de aspirar cuando creo vida en el teatro", sentenció.
En definitiva, un diseñador de iluminación, especialmente en el teatro, tiene que ser un observador de la luz en el mundo y en la naturaleza, entender y comprender un vocabulario visual. Todo ello con el objetivo de poder crear vida, poder manipular la luz y contar historias a través de ella, y así afectar a la percepción para poder provocar sensaciones y emociones en los espectadores.