"El Instituto Tecnológico Hotelero ejerce como nexo de unión entre las necesidades del hotelero y las soluciones que aportan las empresas tecnológicas"

Un aspecto que generalmente determina la decisión final de afrontar un proyecto de eficiencia energética es el plazo previsto para el retorno de la inversión; aquellos que no sobrepasan los tres años, tienen más posibilidades de llevarse a cabo

Un 70% de las empresas del sector turístico español son Pymes y autónomos, cifra que no varía demasiado en el caso preciso de los establecimientos hoteleros y alojamientos turísticos. En este sentido, una gran parte del sector no dispone de recursos o infraestructura para afrontar directamente este reto, por lo que acuden a la externalización para la toma de decisiones técnicas.

Lo cierto es que en este punto no siempre se acierta y se tiende a acometer acciones puntuales sobre puntos de conflicto (sustitución de viejas máquinas, etc.), en lugar de realizar un planteamiento de mejora de las instalaciones a nivel global, contemplando una planificación de inversiones basada en las necesidades globales del hotel para atender a la demanda. Esto significa que se deben tener en cuenta algunos conceptos como el análisis de los rendimientos de las máquinas en funcionamiento, las opciones para su sustitución por otras nuevas o tecnologías alternativas y renovables, el ahorro de energía generado por las mismas y el retorno de dicha inversión.

Por lo general, una de las mayores preocupaciones del hotelero es poder afrontar dicho proyecto sin que afecte a la actividad diaria del establecimiento y evitando que el cliente se vea afectado por los proyectos de mejora o reforma de las instalaciones.

Es muy importante elegir qué modelo de producción energética se desea implantar, optar por energías renovables, convencionales o un modelo combinado, y tras esto, elegir la tecnología más adecuada para responder a la demanda del establecimiento. La energía solar térmica, la aerotermia y la biomasa encabezan el ranking de las tecnologías renovables más demandadas.

En cuanto al resto de tecnologías, las más demandadas son todas aquellas que están dirigidas al ahorro en iluminación (leds…), climatización (bomba de calor…), calefacción y producción de A.C.S. (calderas baja temperatura o condensación y producción de agua caliente por bomba de calor).

Como hemos comentado anteriormente, existen diversas opciones de financiación a barajar, siempre en función de las condiciones particulares del establecimiento. La decisión estará fuertemente marcada en función de la disponibilidad o no de recursos propios, así como del nivel de endeudamiento que resulte asumible para el negocio hotelero.

Actualmente, debido a la buena situación del sector turístico en general y hotelero en particular, un gran número de hoteles tienen músculo financiero para llevar a cabo las medidas que necesitan, pero lo cierto es que el formato de ESE va ganando mercado poco a poco y actualmente se van firmando cada vez más contratos por la comodidad y facilidad que supone al hotelero no tener que encargarse de la financiación y poder dejar en manos de la ESE la operación de las instalaciones o de parte de ellas, asegurando su funcionamiento y rendimiento óptimo.

Generalmente, el cliente no percibe de manera directa las actuaciones en materia de eficiencia energética que ha llevado a cabo el establecimiento donde se aloja. Si bien se percata del confort, o más concretamente de los posibles fallos en la calidad del servicio.

El proceso de rehabilitación de un establecimiento se inicia generalmente por la renovación de espacios, algo que sí se advierte de forma más directa por el huésped, y que se refleja generalmente en una mejora de la satisfacción del huésped durante su estancia en el hotel.

Una de las funciones principales de ITH es fomentar la innovación y la incorporación de la tecnología, como herramientas para la mejora de la competitividad de las empresas que conforman el sector. En este sentido, el Instituto Tecnológico Hotelero ejerce como nexo de unión entre las necesidades del hotelero y las soluciones que aportan las empresas tecnológicas.

A través de nuestro servicio de asesoramiento técnico y gestión energética, o por consulta directa del propio empresario hotelero, ayudamos a identificar los problemas que pueden surgir en un alojamiento. Desde ITH, gracias a nuestros asociados tecnológicos podemos ofrecerles un catálogo de soluciones que se adaptan a sus necesidades, ayudándoles a establecer un plan de medidas y a priorizar las áreas donde es más necesario actuar.

Recientemente ha salido la segunda convocatoria del PAREER gestionada por el IDAE, que se centra en actuaciones integrales en edificios existentes de cualquier uso, que favorezcan el ahorro energético, la mejora de la eficiencia energética, el aprovechamiento de las renovables y la reducción de las emisiones de CO₂, excluyéndose la obra de nueva planta. Estas ayudas se estructuran en diferentes partidas, siendo una para la envolvente térmica, otra para instalaciones térmicas y de iluminación, otra para energía solar térmica y una última partida para energía geotérmica. El IDAE, además, dispone también de otras líneas como la ICO de eficiencia energética para hostelería.

Adicionalmente, existen más subvenciones a nivel autonómico que pueden encajar para financiar mejoras en determinadas áreas del establecimiento, y a nivel europeo como es el programa LIFE de eficiencia energética. En la web de ITH existe un listado actualizado de ayudas a nivel nacional, autonómico y europeo a disposición de cualquiera para que pueda ver las diferentes opciones de financiación a las que podría optar a la hora de enfrentarse a una mejora de las instalaciones o el equipamiento.

"ITH media para facilitar el proceso de incorporación de la tecnología, mediante la puesta en marcha de los que denominamos proyectos piloto"

Efectivamente, el Instituto Tecnológico Hotelero realiza proyectos de incorporación de tecnología en establecimientos hoteleros, con el objetivo de mejorar el rendimiento y optimizar los procesos de los establecimientos participantes.

De la mano de nuestros asociados tecnológicos, que ejercen como proveedores, ITH identifica a aquellos establecimientos hoteleros susceptibles de mejorar, optimizar o solventar una carencia concreta por medio de la incorporación de una herramienta o solución tecnológica ofrecida. En este punto, ITH media para facilitar el proceso de incorporación de la tecnología, mediante la puesta en marcha de los que denominamos proyectos piloto.

Por medio de este tipo de proyectos se comparan los resultados tanto a nivel operativo como económico, se evalúa el proceso de implantación, las dificultades encontradas y la percepción del cliente, antes y después de la implantación de la solución. De este modo, ofrecemos al hotelero información relevante y veraz sobre los resultados que puede aportar esta tecnología, para que a la hora de plantearse su incorporación pueda saber de antemano los resultados aproximados que podría conseguir.