La internacionalización, una exigencia para crecer en el sector aeronáutico
La industria aeroespacial y aeroportuaria se encuentra en un estado de salud excelente. No sólo está superando la crisis sino que además continúa creciendo de forma sostenida. La industria aeronáutica es una industria con características muy singulares. Para empezar ésta se desarrolla en un mercado absolutamente global. El mercado mundial se abastece con sólo cuatro fabricantes finales de aviones comerciales, Boeing, Airbus, Embraer y Bombardier. Las piezas para fabricar estos aviones se fabrican en fábricas repartidas por todo el mundo. Además, los aviones aterrizan y despegan todos los días en cientos de aeropuertos cuyas especificaciones aeronáuticas son idénticas en todo el mundo. La experiencia del pasajero en Singapur, Roma o Santiago de Chile, en el interior del avión o de la sala de embarque de un aeropuerto es tremendamente similar. No existe un mercado más global que el aeronáutico.
Además, la industria aeronáutica es una industria de largo ciclo económico. Es una industria que requiere grandes inversiones, con series largas pero con cadencias de producción moderadas que hacen que los retornos no sean inmediatos sino más bien a largo plazo. La decisión de desarrollar un nuevo modelo de avión, o la expansión de la terminal de pasajeros de un aeropuerto, es una decisión estratégica, a 10-15-20 años. Hay demasiado en juego para que ésta se vea afectada por unas simples elecciones generales.
Estas dos características, mercado mundial y de largo ciclo económico, hacen que esta industria no se haya visto muy afectada hasta ahora por la actual crisis económica. La caída del mercado nacional, o de los países desarrollados, se ve compensada por el buen comportamiento de las dinámicas economías de los países emergentes. Airbus puede no vender aviones en Europa, pero los mercados de China, Indonesia, India o Brasil siguen creciendo. En Asia y Oriente Medio se siguen construyendo nuevos aeropuertos. Las previsiones indican que el transporte aéreo mundial va a duplicar la demanda del número de aviones en los próximos 20 años. Existen pocos sectores con un futuro tan atractivo.
Y lo mejor es que en este prometedor mercado España es una potencia mundial de reconocido prestigio. Tanto a nivel de la industria aeronáutica como el de la ingeniería aeroportuaria. En este contexto, la internacionalización de las empresas de la industria aeronáutica es absolutamente necesaria. No sólo es necesaria para seguir creciendo sino, más importante todavía, que también es necesaria para simplemente sobrevivir en el medio plazo. Los éxitos del pasado no son garantía para el futuro.
Debemos todos tener claro que debemos estar presentes internacionalmente. Es una de las mejores vías para crecer y la única para sobrevivir como industria. En un sector global, la innovación en los productos, la presencia en los mercados exteriores y la diversificación de clientes, es absolutamente necesaria para consolidar uno de los motores del desarrollo de la economía española.