Feragua solicita a la administración que agilice la tramitación de los tres embalses previstos en el Guadalquivir
Estos tres embalses sumarían un volumen de agua almacenada de unos 350 hm3, aportando una capacidad de regulación a la Cuenca de unos 120-150 hm3/anuales.
Feragua ha participado en la Comisión permanente de Sequía de la Cuenca del Guadalquivir, en el que ha solicitado a la administración hidráulica que tome nota de la "terrible tragedia de Valencia" y agilice la tramitación de los tres embalses previstos en la planificación hidrológica del Guadalquivir: el recrecimiento del Agrio, San Calixto y Cerrada de la Puerta.
Además de almacenar agua para los distintos usos, Feragua considera que todos cumplirán "una función esencial en la laminación de avenidas, y uno de ellos, el de San Calixto, está contemplado como una infraestructura estratégica dentro del Plan de Gestión de Inundaciones de la Cuenca, con un papel clave para evitar las inundaciones en Écija y Palma del Río".
El presidente de Feragua, José Manuel Cepeda, ha criticado la parálisis administrativa en obras de regulación en los últimos quince años y la falta de voluntad e iniciativa política para ejecutar las presas que estaban aprobadas en la planificación hidrológica, que “ha sido papel mojado”. De hecho, estos tres embalses llevan en la planificación desde 2009 y ya hubieran podido estar en funcionamiento "si se hubieran cumplido unos plazos lógicos".
"La descorazonadora realidad es que ninguno tiene proyecto cerrado aún, por lo que es imposible pensar en ellos como solución antes de diez años", indican desde Feragua.
Feragua ha pedido al Gobierno central un cambio en las políticas que hasta ahora "han priorizado el medio ambiente sobre las personas y cuyas consecuencias han quedado evidenciadas en la tragedia de Valencia".
“Hay que quitarle a las obras de regulación el estigma negativo que tienen y comprender que son infraestructuras verdes que generan riqueza, empleo, proporcionan garantía alimentaria y además salvan vidas cuando se producen lluvias torrenciales”, ha señalado José Manuel Cepeda. “Invertir en obras de regulación no es caro, lo caro es dejar de hacerlo”, ha concluido el presidente de los regantes andaluces.