El sector agrario mantiene un elevado índice de siniestralidad laboral
Los accidentes laborales en el sector agrario y pesquero descendieron en 2023, pero el índice de siniestralidad mortal sigue siendo el más alto de todas las actividades económicas.
Los accidentes laborales en el sector agrario cayeron el 1 % en 2023, con 28.779 casos, mientras que se registraron 72 muertes, un 24,2 % menos que en 2022, lo que no evita que se mantenga como el índice más alto de todas las actividades económicas, por delante de la construcción, la industria y los servicios.
Son datos ofrecidos por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, pero que no reflejan con precisión la realidad, porque no están contemplados los accidentes sufridos por personas que no encajan en la definición legal de trabajador. Estos accidentes no son considerados 'de trabajo' y es lo que sucede con los percances protagonizados por personas jubiladas, menores de 16 años, familiares colaboradores, etc. que no son personas vinculadas a la actividad laboral tal y como se define en la legislación.
En ASAJA se valora positivamente el descenso de los accidentes en 2023 y señala que los graves y mortales están en su mayoría relacionados con la utilización de maquinaria, sobre todo con el vuelco de tractores, la principal causa con 38 fallecidos en 2023, aunque la tendencia es descendente, según Sandra Muñoz. "Hay que insistir y sensibilizar tanto al empresario como a los propios trabajadores de la importancia que tiene el conocer los riesgos asociados a la utilización de la maquinaria. En lo que es el tractor, se ha hecho mucha insistencia y estamos muy contentos de la disminución que ha habido en la en la mortalidad", apunta la técnica de la organización en declaraciones a Efeagro.
Rescate de un conductor de tractor tras sufrir un accidente en Medianas, Burgos. (Foto: 112CyL)
Un aspecto sobre el que incide Asaja es en adaptar la ley de riesgos laborales al sector agrario, en el que hay mucha temporalidad en la contratación, a veces por unos pocos días, y con trabajadores que en muchos casos no dominan el idioma español, lo que dificulta su formación. Muñoz sugiere impartir cursos en los que se expida un carné habilitante, de forma que se genere una bolsa de trabajadores a la que el empresario agrario pueda acudir cuando necesita personal.
David Erice, del gabinte técnico de UPA, incide en que para mejorar la tasa de accidentes en el sector quizás debe hacerse un desarrollo más concreto y adaptado de la ley de prevención de riesgos laborales. Apunta también otros aspectos que influyen en los accidentes, como la alta edad de los trabajadores y empresarios autónomos del sector y la soledad en la que, por general, realizan su tarea.
No obstante, sitúa también el uso de la maquinaría en el centro de la problemática, recuerda que el parque de tractores en España está “obsoleto” y solicita que los planes renove cuenten con más presupusto e incluyan también ayudas para incorporar arcos de seguridad en los tractores que no tienen cabina.
“Mucha precariedad”
Las organizaciones sindicales califican los datos de accidentes en el sector primario como “insoportables“ y ”una lacra”, respectivamente. La responsable de Salud Laboral de UGT-FICA, Pilar Ituero, pone el acento en el cumplimiento de la ley de prevención de riesgos laborales, sobre todo en los casos de empresas muy pequeñas, mientras que Vicente Jiménez, de CCOO, aboga por que haya "más cultura de salud laboral" porque se trata de un sector "que tiene mucha precariedad y una eventualidad de más del 40 %".