Inauguración en Sevilla

Consolidado como un evento de referencia en el sur de Europa, este Symposium reúne cada dos años a los distintos sectores de la Sanidad Vegetal en un mismo foro con la finalidad de promover el intercambio de información, analizar su problemática actual y debatir sobre las posibles soluciones.

El Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas de Andalucía Occidental (COITAND) ha organizado la decimosexta edición del Symposium Nacional de Sanidad Vegetal que se inaugurado esta mañana en Sevilla. Las principales empresas y entidades de este sector se han reunido junto a destacados profesionales implicados en esta disciplina con el objetivo de abordar durante tres jornadas los últimos avances y tendencias respecto a la protección de las plantas y la seguridad alimentaria desde todas sus vertientes.

El 16º Symposium de Sanidad Vegetal ha sido inaugurado por la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, Carmen Crespo. En su intervención ha destacado la importancia del sector agroalimentario en esta comunidad autónoma donde ya se ha superado la barrera de los 12.500 millones de euros en exportaciones. La consejera también ha señalado la relación coste-beneficio y la prevención como dos de las claves fundamentales en la sanidad vegetal del futuro. Crespo ha reconocido la labor de los técnicos y profesionales que se dedican a esta materia desde la Junta de Andalucía y ha puesto de relieve que la región "ha superado ya el 25% de superficie agraria en sistema de producción en ecológico", lo que no implica, ha dicho, que no haya que "aplazar" las medidas contenidas en el Pacto Verde Europeo, como son las estrategias Biodiversidad y De la Granja a la Mesa, para hacer frente a la crisis generada por la invasión de Ucrania.

De izquierda a derecha: Antonio Vergel, presidente del COITAND, Carmen Crespo, consejera de Agricultura de Andalucía, Fernando Miranda, Secretario General del MAPA y Carlos León, coordinador general del Symposium.

Tras la inauguración del evento, la primera de las intervenciones ha corrido a cargo de Fernando Miranda, Secretario General de Agricultura y Alimentación del MAPA. En su ponencia marco ha subrayado que las estrategias contenidas en el Pacto Verde Europeo que afectan a la agricultura y la ganadería, proponen objetivos cuantitativos que "no están respaldados por un estudio de impacto". Sin embargo, el responsable del Ministerio ha matizado que "algunos objetivos nos parecen razonables como los relacionados con el uso de antibióticos y la sostenibilidad en el empleo de fertilizantes y fitosanitarios".

Fernando Miranda ha constatado que los objetivos del Pacto Verde pueden repercutir en "más costes y reducción en las producciones que sustituimos por importaciones de terceros países que pueden no cumplir con los criterios de sanidad vegetal a nivel europeo. Estos objetivos no son vinculantes legalmente para los Estados Miembro por lo que no están reflejados en el Plan Estratégico de la PAC elaborado para España".

Respecto a la coyuntura motivada por la guerra en Ucrania, Miranda cree que "esta crisis trae un cambio de prioridades, como es la disponibilidad de alimentos en la UE porque no sabemos cuánto va a durar la guerra. Por eso desde Europa ya se están dando señales sobre la necesidad de marcar otros tiempos para la aplicación de las estrategias del Pacto Verde, aunque esto no significa que vayamos a revertir el camino de la sostenibilidad" que se ha emprendido.

Estas señales a las que se ha referido serían el aplazamiemto de la publicación del reglamento de uso sostenible de fitosanitarios y la comunicación sobre la restauración de espacios naturales, fijadas en un principio para finales de marzo y que ahora se posponen hasta el próximo mes de julio.

En cuanto a la reducción de 50% en el uso de productos fitosanitarios que propone el Pacto Verde, Fernando Miranda ha puntualizado que se llevará a cabo teniendo en cuenta indicadores ponderados, según el riesgo de cada uno de los productos fitosanitarios utilizados por los agricultores. Además, esta reducción parece que se va a cuantificar en el conjunto de la UE y no por países. "Lo importante es ponderar cada producto fitosanitario en función de su riesgo y saber dónde están los mayores problemas, que actualmente se concentran en pocos productos, en cultivos y zonas concretas. Habrá agricultores que no tengan que reducir nada porque ya cumplen con los criterios establecidos”.

Por último, se ha referido a la importancia de implantar el cuaderno digital de explotación “para obtener un dato más fino sobre lo que se aplica y en qué cultivos para poder tomar decisiones a nivel quirúrgico”. En su opinión, la primera barrera de la sanidad vegetal es el agricultor; seguido de los servicios de alerta de las CC AA y el Comité Fitosanitario Nacional donde se articula la política a seguir.

“En los próximos años vamos a mejorar en la información relacionada con la sanidad vegetal para ser más precisos tanto en la aplicación como en la toma de decisiones, gracias al cuaderno digital y a la agricultura de precisión. Sin sanidad vegetal no tendríamos el sector agroalimentario que tenemos actualmente”, ha concluido.

La jornada ha continuado con varias ponencias centradas en los Planes de Contingencia y la Normativa de la Unión Europea en materia de plagas de cuarentena, el manejo de nuevas plagas como el cotonet en cítricos o sobre el nuevo Plan Andaluz de Sanidad Vegetal.

El 16º Symposium Nacional de Sanidad se va a desarrollar a lo largo de tres jornadas y se extenderá hasta el próximo viernes 1 de abril.