Ferduero: historia y retos en los regadíos del Duero

La Asociación Ferduero inició su andadura el 2 de marzo de 2007 con el nombramiento de la Comisión Gestora encargada de redactar sus estatutos y realizar todas las gestiones necesarias para su creación. El 26 de diciembre de 2007, 2 Juntas Centrales de Usuarios y 4 Comunidades de Regantes celebran la Asamblea Fundacional en la que se aprobaron los Estatutos y se nombró la Junta Directiva provisional a la que se encargó la ejecución de todos los trámites necesarios para la legalización de la Entidad. Estos trámites culminan el 30 de enero de 2008 con la Orden de la Consejería de Interior y Justicia de la Junta de Castilla y León por la que se autoriza la Inscripción de la Entidad denominada Asociación “Ferduero” de Comunidades de Regantes de la Cuenca del Duero en el Registro de Asociaciones con el nº 3857 de la Sección Primera y ámbito de actuación autonómico. Por último, el 3 de abril de 2008 se celebra la Asamblea Constitutiva de Ferduero con la participación de 16 Entidades (2 de ellas Juntas Centrales, que agrupaban a 75 Comunidades de Base), que totalizaban una superficie de 132.243,00 has.

En el momento presente ya hemos logrado asociar a 138 Comunidades de Regantes que aglutinan 246.110,04 has asociadas has en 13 años de existencia. Seguimos persiguiendo el objetivo de trabajar en defensa del regadío y con nuestra labor de informar a todas las Entidades Asociadas de los problemas que les afectan, de las gestiones que se vienen realizando con las distintas Administraciones, así como atender sus inquietudes y problemas. Además, continuamos con nuestro empeño de integrar nuevas Comunidades de Regantes para constituir un frente unido que luche por los intereses de todos.

Éramos la única Demarcación Hidrográfica que no contábamos con una Asociación de estas características y la razón de nuestra existencia se fundamenta en la idea de que sólo unidos podremos tener más peso ante las distintas Administraciones relacionadas con la gestión del agua y, a la vez, hacer frente a los grandes retos a los que se tiene que enfrentar día a día la agricultura de regadío: Planes Hidrológicos, reformas continuas de la Ley de Aguas y de los reglamentos que la desarrollan, Planes Especiales de Sequías, acuerdos con la Confederación Hidrográfica del Duero sobre obras, cánones y tarifas, impulso a la modernización de regadíos, relación y negociación de convenios con la SEIASA, negociación conjunta de tarifas eléctricas, seguros y otros servicios, problemas con la Junta de Castilla y León por el cobro de las subvenciones pactadas, protocolos de colaboración con la Administración Autonómica, etc.

Traspasados sus 13 años de existencia, la Asociación ha cogido cuerpo y peso específico ante las Administraciones y sigue creciendo de una manera lenta, pero constante, como tiene que suceder y los logros conseguidos son importantes. Hay quien no tiene calma y piensa que tenemos la varita mágica que todo lo resuelve o que los problemas se solucionan a la primera de cambio, pero nosotros pedimos un poco de paciencia, porque las cosas no suelen ser así. Somos una Entidad joven y con menos rodaje que las de similares características del resto de España, pero el protagonismo que hemos adquirido en los últimos años, tanto ante las Administraciones como ante la opinión pública por el efecto de los medios de comunicación, nos da confianza para afrontar los nuevos retos que día a día se nos presentan y que en el momento actual podríamos dividir en tres grandes desafíos:

1. Revisión del Plan Hidrológico de la Demarcación horizonte 2022-2027: En estos momentos y hasta el 22 de diciembre de 2021 se encuentra a exposición pública el borrador del Plan Hidrológico de la Parte Española de la Demarcación Hidrográfica del Duero. Ya presentamos cientos de alegaciones al Esquema Provisional de Temas Importantes, pero los peligros siguen acechando nuestra actividad, por lo que Ferduero ha creado un Grupo de Trabajo para elaborar nuevas alegaciones sobre contaminación difusa, dotaciones, incremento de costes, caudales ecológicos, programa de medidas, gobernanza, etc. La influencia del movimiento ambientalista sobre los Gobiernos y la opinión pública es evidente, pero no nos vamos a resignar a aparecer como los causantes de todos los males y del ya manido cambio climático.
2. Seguir impulsando la modernización de los regadíos existentes, así como la transformación de las nuevas zonas regables ya proyectadas. Contamos ya con más de 120.000 ha modernizadas desde el año 2000 hasta el momento presente y casi otras tantas susceptibles de modernizar, de las que 80.000 ya han aprobado la modernización. De estas últimas, algunas ya están en ejecución, otras licitadas o con convenios firmados o en marcha y el resto a la espera y dando los pasos necesarios que culminen con su modernización. Del mismo modo, demandamos que las zonas regables de transformación como Payuelos y La Armuña y otras de menor tamaño pero no menos importancia, vean finalizadas sus infraestructuras de riego definitivamente tras largos años de espera.
3. Todo el esfuerzo que están realizando los regantes para modernizar sus regadíos se puede ir al traste si no cuentan con el recurso agua suficiente para satisfacer las necesidades de sus cultivos o si no se frena el aumento desmesurado de los costes de producción. Por eso seguimos demandando incrementos de regulación en aquellos sistemas de explotación que se han revelado tradicionalmente como deficitarios (Órbigo, Carrión, Cega) y los que lo puedan ser en el futuro, así como sustituir el uso de aguas subterráneas por superficiales en aquellos acuíferos con riesgo de sobrexplotación. En cuanto a los costes y teniendo en cuenta que los riegos modernizados necesitan de energía eléctrica para su funcionamiento, nuestra principal batalla está en la búsqueda de soluciones para paliar el desmesurado incremento de los costes de la energía. En lo que a nosotros nos corresponde, ya hemos adaptado nuestras instalaciones para eliminar todos los consumos innecesarios, adaptarnos a los períodos más baratos, optimizar las potencias contratadas y organizar compras conjuntas de energía en el mercado diario y a futuros con el fin de reducir al máximo la factura. Pero no resulta suficiente. Necesitamos con urgencia que el Gobierno se atreva a dar los pasos necesarios para aplicar un IVA reducido, permitir modificar las potencias dos veces al año para adaptarlas a las necesidades reales de consumo y facilitar la implantación de energías renovables para autoconsumo y con posibilidad de vertido a red con el fin de amortizar la inversión necesaria.

A la consecución de estas tres metas tendríamos que añadir un reto más global y no menos importante, el de cambiar la visión que tiene de nosotros la sociedad para ser de verdad ese sector esencial que nunca para y que en algunos momentos se ha reconocido a lo largo de la pandemia que estamos padeciendo, aunque pensamos que no lo suficiente, un sector empresarial que solo pretende vivir dignamente proporcionando alimentos a la sociedad y siempre desde un objetivo y un fin claro de sostenibilidad, que no es otra cosa que asegurar las necesidades del presente sin comprometer las de futuras generaciones.

Para conseguir este objetivo también ponemos el énfasis en la formación de agricultores, directivos, gestores y técnico de nuestras Comunidades de Regantes, poniéndoles al día en las novedades legislativas, en los avances técnicos, en la digitalización de su actividad, en el cuidado medioambiental del territorio en el que desarrollan su trabajo, siempre caminando hacia la llamada Agricultura 5.0.

Este es nuestro cometido y en la consecución de todos estos fines enfocaremos nuestro trabajo. Si bien estos pueden ser los grandes logros, no podemos olvidarnos de la labor callada del día a día al servicio de las Comunidades y que no trasciende tanto: asesoramiento, resolución de problemas particulares con las diferentes Administraciones, petición de entrevistas a distintos niveles acompañándoles a las mismas, etc. Esperamos seguir creciendo para poder lograr todos estos objetivos, razón por la cual animamos a todo el sector del regadío a seguir peleando juntos en beneficio de nuestro colectivo y a los que aún no están, les invitamos a integrarse en nuestra Asociación para formar un frente común aún más fuerte que contribuya a la solución de los problemas del regadío y de nuestro mundo rural. Nadie si no nosotros va a luchar por revertir la situación que estamos padeciendo en el ámbito de nuestras zonas regables, por mucho que a algunos se les llene la boca hablando del Reto Demográfico y la España Vaciada.

Finalmente, es necesario hacer una mención a la colaboración mutua que han tenido todos estos años Ferduero y Tierras. Tengo que agradecer a la revista Tierras toda la visibilidad y la notoriedad que ha dado a Ferduero con nuestra participación en tres Encuentros de Comunidades de Regantes, la multitud de jornadas de riego organizadas a lo largo de esta década, artículos y entrevistas en Tierras, etc. En Ferduero, por nuestra parte, hemos intentado apoyar las iniciativas de Tierras cada vez que nos lo ha pedido. Esperamos que en el futuro se mantenga tan buena sintonía y que tengamos éxito en nuestro cometidos.