Piden que se impulse la modernización de 80.000 hectáreas

Anuncian que si no hay diálogo convocarán movilizaciones y se negarán a hacer frente al pago de los cánones y tarifas que se liquidan a las comunidades, asumiendo incluso el riesgo de que se les puedan exigir por vía de apremio, tal y como determina la Ley

La Federación de Comunidades de Regantes del Duero (Ferduero) celebró hace unos días la Junta de Gobierno y Asamblea General en las que, además de tratar los asuntos ordinarios, se aprobó de la integración de nuevas Entidades. Ferduero, en sus 13 años de existencia, ya agrupa a 138 Comunidades de Regantes (CCRR) que suman 246.110,04 hectáreas.

Asimismo, los representantes de las CCRR unánimemente mostraron en el "hartazgo y la impotencia que les produce la falta de relación, comunicación, colaboración y diálogo con la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD).

Según los regantes, la CHD “ni escucha sus quejas, ni visita las Comunidades de Regantes para comprobar in situ sus problemas, ni atiende sus peticiones de reuniones y, además, ralentiza hasta límites insoportables cualquier trámite o expediente que se inicia en dicha Entidad”. “Los convenios, encomiendas de gestión, modificaciones de características, solicitud de claves de acceso al catastro, problemas administrativos y de funcionamiento de las Comunidades, cuestiones relacionadas con la explotación, etc, duermen el sueño de los justos y no se les ve avance alguno”, añaden.

Para Ferduero, la 'gota que colma el vaso' está en el Plan Hidrológico de la Demarcación, en el que -según los regantes- no se tienen en cuenta sus intereses y “ya no tienen confianza alguna en el Organismo de Cuenca, dado el incumplimiento en la ejecución del programa de medidas incluido en el plan vigente”.

Por otro lado, para los regantes del Duero, el Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO) vive en otra realidad, pero creen que la CHD, más cercana al territorio, se debería preocupar más por “dar solución a las necesidades de los usuarios, pero no es así”.

Consideran los representantes de los regantes que la situación es insostenible y se sienten “desamparados, ninguneados e impotentes“ante una Administración que”no se digna a hablar con sus administrados”. “Son muchas las Comunidades de regantes que tienen alguna cuestión pendiente con la Confederación y nunca antes había ocurrido esta situación de abandono y desatención hacia nuestro colectivo, de ahí nuestra decisión de adoptar medidas drásticas”, remarcan.

Otro de los asuntos tratados en la Asamblea General de Ferduero, considerado fundamental, es volver a dar impulso a la modernización de los regadíos, con las dotaciones presupuestarias de las que se dispone actualmente.

Para los regantes, lo prioritarios es:

• en primer lugar, se debe desbloquear la tramitación ambiental de los proyectos de las Comunidades que ya tienen convenios firmados y que tienen que tener ejecutadas sus obras antes del 31 de diciembre de 2023.
• en segundo lugar, que el Consejo de Ministros encomiende las obras incluidas en los Presupuestos Generales del Estado del Ejercicio 2021 para poner en marcha todos los trámites necesarios.
• en tercer lugar, conocer la financiación y las condiciones a tener en cuenta para aquellas obras que puedan acogerse al Plan de Reconstrucción, Recuperación y Resiliencia de la Unión Europea.

Todo ello combinado puede ayudar a cumplir el objetivo de modernizar las casi 80.000 hectáreas que están esperando modernizarse en Castilla y León.

Desde Ferduero demandan al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, a la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural y a SEIASA que, “de manera urgente, den todos los pasos necesarios en pro de la consecución de esta meta tan deseada por las Comunidades de Regantes”.

A pesar de las críticas, Ferduero finaliza tendiendo un puente a las Administraciones. “En nuestro ánimo está la búsqueda de la colaboración, la comunicación y el diálogo con todos organismos y Administraciones relacionados con la actividad agraria, frente a la confrontación, que no deseamos”, concluyen.