El Itacyl mantiene su apuesta por la investigación en los cultivos de leguminosas
El Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y Léon (Itacyl), tras registrar recientemente tres, se ha convertido en el mayor generador de variedades de garbanzo a nivel nacional y uno de los mayores a nivel europeo.
El Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y Léon (Itacyl) continúa apostando por la investigación sobre leguminosas, ya que este producto se caracteriza por su elevado contenido en proteína, lo que constituye una de las principales fuentes de aminoácidos para la alimentación humana y animal, y por su capacidad de fijación del nitrógeno atmosférico. Eso hace que las necesidades de aportes nitrogenados en su desarrollo vegetativo sean muy reducidas.
Estas características especiales, y la necesidad de poner en valor la contribución que las leguminosas hacen a la producción sostenible de alimentos orientada a la seguridad alimentaria y la nutrición, llevaron a la Asamblea General de las Naciones Unidas a declarar el 10 de febrero como el Día Mundial de las Legumbres. Con esta distinción se pone en valor este alimento y se resalta que las leguminosas son saludables, nutritivas, ricas en proteínas y su cultivo mejora la fertilidad del suelo.
Investigación en nuevas variedades
El Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl) ha registrado recientemente en el Registro de Variedades Comerciales tres nuevas variedades de garbanzo denominadas Pirón, Tauritón y Úrbel. Con las tres nuevas variedades reconocidas, el Itacyl se ha convertido en el mayor generador de variedades de garbanzo a nivel nacional y uno de los mayores a nivel europeo.
En total, el Itacyl tiene registradas 33 variedades de leguminosas: 6 de garbanzo (Cuaiz, Duratón, Garabito, Pirón, Úrbel y Tauritón), 5 de guisante proteaginoso (Cabestrón, Chicarrón, Luna, Viriato y Ucero), 18 de judía (Cotorrón, Tañoga, Almonga, Bolita, Cabramocha, Carazo, Cárdeno, Cavadilla, Corcal, Oracada, Orvillo, Morala, Rincada, Sestil, Sillar, Socueto, Tremeya y Trigaza), 2 de lenteja (Águeda y Guareña) y 2 de alverjón (Gario y Oberón).
Además, el Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl) está desarrollando otros proyectos de investigación y servicios en el ámbito de las leguminosas, como es el caso de ‘Legugrano’, cuyo objetivo es la selección, mantenimiento y multiplicación de líneas de leguminosas de grano candidatas al registro de variedades comerciales.
Además, se han puesto en marcha convenios de producción de semilla para las figuras de calidad Lenteja de La Armuña, Lenteja de Tierra de Campos, Garbanzo de Fuentesaúco y Garbanzo de Pedrosillo.
También se continúa trabajando con el banco de germoplasma, que es una herramienta muy útil para la selección de variedades locales en cuanto a la producción de semillas de calidad. Y se está desarrollando una experiencia piloto de monitorización en campo sobre plagas y enfermedades en leguminosas de grano.
Investigación en tecnología y salud
Las legumbres son una fuente de energía y compuestos nutricionales de alto valor y, por lo tanto, un método adecuado para aumentar el valor biológico de los productos alimentarios. Además, las propiedades saludables de las legumbres se han investigado en profundidad. Su consumo se ha asociado con una amplia gama de beneficios, como la disminución del riesgo de padecer enfermedades crónicas o mejorar su padecimiento (diabetes, obesidad, patologías cardiovasculares).
Por todo ello, para el Itacyl es muy interesante investigar la introducción en alimentación de nuevas fuentes de leguminosas, así como en aplicaciones tecnológicas que mejoren tanto las propiedades saludables como tecno-funcionales de las mismas y que faciliten su incorporación en una mayor gama de productos alimentarios.
Los efectos beneficiosos de las legumbres están relacionados en parte, con la presencia de compuestos fenólicos, dentro de otros fitoquímicos y péptidos con bioactividades antioxidantes y antihipertensivas, tal y como han reportado los miembros del equipo de la Planta de Procesos y Productos Alimentarios del Itacyl en diferentes trabajos publicados recientemente. Estas investigaciones se han realizado tanto con estudios in vitro como en ensayos clínicos asociados a proyectos como Biodough (Desarrollo de harinas tecno-funcionales mejoradas para la elaboración de productos saludables-Feader-PEP-2017-807) cofinanciado por fondos Feader.
Estos proyectos se realizan en colaboración con empresas y entidades como Emesa, Molendum, Agropal o Urcacyl, y centros de investigación colaboradores como CSIC-ICTAN, Universidad del País Vasco o el Hospital Universitario de Valladolid.
Además, las legumbres son una buena fuente de carbohidratos y ?bra poco digeribles, que reducen de manera muy significativa el índice glucémico (IG) de los productos desarrollados, dando lugar a alternativas a snacks u otros productos panificables.
La aplicación de tecnología como la extrusión, altas presiones hidrostáticas, tratamientos hidrotérmicos o la germinación han sido reportadas por el grupo como estrategias factibles para producir harinas más saludables y con propiedades tecno-funcionales mejoradas muy interesante en el caso harinas de leguminosas que no poseen gluten o pseudocereales, pero que también pueden mejorar ciertas propiedades de cereales convencionales.
La marca de garantía Tierra de Sabor comercializa más de 150 productos de legumbres.
Legumbres de calidad diferenciada en Castilla y León
Las legumbres ocupan un lugar muy importante en la agricultura de Castilla y León y su cultivo está muy consolidado dentro de la rotación tradicional de cultivos en la Comunidad.
Castilla y León es la primera comunidad autónoma en superficie cultivada de judía seca, con el 73 % del total nacional, y la segunda en garbanzo, con el 29 % del total, y únicamente por detrás de Andalucía.
Además, la Comunidad es la que cuenta con mayor número de legumbres amparadas bajo una figura de calidad con protección europea, todas ellas Indicación Geográfica Protegida (IGP). Cuentan con esta protección cinco legumbres: Judías del Barco de Ávila, Lenteja de La Armuña, Garbanzo de Fuentesaúco, Lenteja de Tierra de Campos y Alubia de La Bañeza-León.
Además, Castilla y León también cuenta con las marcas de garantía Garbanzo de Pedrosillo, Garbanzo de Valseca y Judión de La Granja. Todas ellas, a su vez, bajo la marca de garantía Tierra de Sabor, que comercializa más de 150 productos de legumbres.
Estas ocho figuras de calidad amparan a 66 empresas, que en 2019 han comercializado 1.623 toneladas de producto por un valor superior a los tres millones de euros.