Smart Solar se está utilizando en el ámbito rural para combinar las épocas de mayores necesidades de riego, las de verano, con los momentos de más insolación
Iberdrola Smart Solar, una solución integral y digital para autoconsumo de energía
El sector energético avanza en su transformación, permitiendo nuevos modelos de generación y consumo y una mayor interacción con un cliente más conectado, demandante de nuevas soluciones. Iberdrola lanzó hace unos años Smart Solar, una solución integral y personalizada para la generación y consumo de energía fotovoltaica, que se ha ido adaptando a las normativas en esta materia, y que permite ahorros en la factura eléctrica, además de incluir todas las ventajas de la digitalización.
Esta solución incluye un estudio personalizado, el diseño a medida, montaje y tramitación administrativa completa de una instalación solar fotovoltaica, ayuda en la tramitación de subvenciones, financiación, mantenimiento y su monitorización gracias a la Aplicación de Iberdrola Clientes. En ese sentido, Iberdrola está facilitado el acceso a una financiación favorable con acuerdos con distintas entidades financieras.
Esta solución llave en mano está dirigida a consumidores domésticos, comunidades de vecinos, pymes o grandes empresas, que pueden generar y consumir su propia energía eléctrica renovable, optimizando el consumo y mejorando la eficiencia energética de su instalación. Iberdrola realiza un estudio personalizado de la solución adaptado a las necesidades de cada cliente.
Smart Solar también se está utilizando en el ámbito rural para combinar las épocas de mayores necesidades de riego, las de verano, con los momentos de más insolación. Así, es perfecta para instalaciones agrícolas que utilizan grupos diésel para accionar bombas de riego, al poder sustituir este combustible por energía fotovoltaica, evitando entre otras cosas la logística propia del gasoil, además del componente cero emisiones de CO2 de una planta solar fotovoltaica.
Entre las soluciones Smart Solar para el segmento residencial, una de las más comunes es la instalación de 3 kW - 10 paneles solares que ocupan una superficie de 20 m2 en el tejado de la vivienda. Su coste aproximado es de 6.000 euros. La instalación puede producir una cantidad anual de energía de 4.950 kWh y la vivienda puede beneficiarse de la parte que autoconsuma de la generación de las placas. Las emisiones evitadas serían de unos 1.700 kg CO2/año.
Los ahorros generados con esta instalación pueden alcanzar hasta un 70% de la factura anual, si la vivienda dispone de baterías, y hasta un 40% si no dispone de ellas. En este caso, no se han considerado las ayudas municipales y/o autonómicas disponibles (bonificación de IBI, a través de IRPF o ayudas específicas con presupuesto definido). En el caso de instalaciones para empresas, los ahorros estimados pueden representar entre un 30% y un 35% frente al coste tradicional.
Como todas las soluciones smart de Iberdrola, el cliente podrá conocer en tiempo real la energía que produce y consume, de forma digital, a través de la web o la App de Iberdrola, y operar su instalación de forma autónoma.
Autoconsumo colectivo en comunidades de vecinos
El autoconsumo se ha abierto a otras modalidades, como el colectivo en comunidades de vecinos. La competitividad del autoconsumo hace que estas soluciones sean óptimas tanto para viviendas unifamiliares como en edificios residenciales, optimizando el consumo y mejorando la eficiencia energética de las instalaciones.
Iberdrola fue pionera en esta modalidad de autoconsumo con una instalación de 20 kilovatios en la ciudad de Madrid, ubicada en la azotea de un edificio residencial en el distrito Retiro de la capital madrileña.
Integrada por 60 módulos fotovoltaicos, la instalación abastece de energía limpia a los servicios comunitarios del edificio –ascensor e iluminación de la escalera y el portal- y a sus 31 vecinos que reciben también una compensación por los excedentes de la energía generada, que no consumen y vierten a la red.
Con esta iniciativa se promueve un modelo de vivienda más sostenible, evitando la emisión de CO2 a la atmósfera, y unos ahorros del entorno del 30% para cada uno de los vecinos adheridos a esta modalidad.
Al ahorro, la revalorización de la vivienda y la eficiencia energética, se suma una razón más para aportar por el autoconsumo solar: su contribución a la lucha contra el cambio climático al generar y consumir energía renovable, libre de emisiones de CO2.
Compensación económica por excedentes
Los cambios regulatorios introducidos en la legislación promueven la instalación de energía fotovoltaica para autoconsumo, ya que han reducido los costes -se han suprimido los cargos sobre la energía autoconsumida- se han simplificado los procesos de tramitación de las instalaciones y se han introducido nuevas modalidades de consumo –como el autoconsumo compartido- entre otras medidas.
Para las instalaciones con excedentes acogidas a compensación, la energía que no se autoconsume de forma instantánea se vuelca a la red, de manera que al final del periodo de facturación (como máximo un mes) el valor de esa energía excedentaria se compensa en la factura del consumidor.