Cobadu lanza un mensaje de tranquilidad tras evaluar las consecuencias del incendio
La pesadilla del incendio que vivió la cooperativa Cobadu en la noche del pasado domingo, día 6 de septiembre, se va matizando con el paso de los días. Según informa la propia cooperativa zamorana, el trabajo ininterrumpido de los bomberos y el personal de la cooperativa está siendo muy intenso desde que comenzara el incendio en la noche del domingo.
“El incendio comenzó en la nave 6, y se extendió hasta la 11, ambas incluidas, con efecto dominó. Las naves 6 y 7 son de fertilizantes, el resto son de cereales, con una dimensión de 90 metros de largo por 30 de ancho y una capacidad aproximada, dependiendo mucho de la densidad de cada cereal, de 12 a 14 millones de kilos. Hay que tener en cuenta que las instalaciones de Cobadu acogen una capacidad total de almacenamiento de 450 millones de kilos en sus 30 naves”, señala Rafael Sánchez Olea, director general de Cobadu.
Por lo tanto, la situación no es tan catastrófica como se temía al principio, debido a las dimensiones del incendio: “Me gustaría tranquilizar a los socios, gracias a Dios ya está controlado el incendio, que aunque ha sido fuerte, solo ha afectado a zonas de almacenamiento: cereales, fertilizantes y alfalfa. Todas las instalaciones productivas han quedado intactas, tanto las fábricas de pienso como las plantas de procesamiento de materias primas”.
Además, según afirma Sánchez Olea, hubo circunstancias que permitieron que el incendio no fuera tan fuerte: “Habitualmente en esa zona solemos aparcar tres camiones de distribución de gasóleo, llenos, para distribuirlo al día siguiente a nuestros socios y clientes, pero, afortunadamente, no estaban esa noche. Teníamos miedo de que el fuego rebasara esta zona, algo que no ha pasado gracias a la distribución de la cooperativa, cuyas instalaciones están divididas por amplias calles que han actuado de cortafuegos. Si se hubieran quemado las fábricas, hubiéramos tenido un problema mucho mayor. Nos centramos en aislar y en que el fuego no trascendiera de la cota que tuvimos marcada desde el principio. Hemos encontrado una colaboración muy importante de las autoridades, de los compañeros de la cooperativa, y de socios y vecinos que querían ayudar. Sin la estrategia común, habría sido imposible atajar el incendio”.