La DO Rueda inicia su vendimia en tiempos de COVID
Coincidiendo con el 40 aniversario de la denominación, una de las grandes novedades de esta campaña es la producción del Gran Vino de Rueda. Esta nueva categoría supone un valor añadido, ya que se realiza con uvas provenientes de viñedos con más de 30 años de antigüedad, lo que permite mantener el viñedo antiguo y preservar el patrimonio de la zona.
La Denominación de Origen Rueda ha dado comienzo a la vendimia 2020 con las variedades que poseen un ciclo vegetativo más corto y una maduración más temprana como son la Sauvignon Blanc y la Chardonnay. Esta última es una de las nuevas variedades autorizadas en el pliego de condiciones de este año en la DO.
A lo largo de las próximas semanas la vendimia se generalizará tanto a las bodegas como al resto de variedades, que ya irán alcanzando su grado de maduración idóneo para la recolección, esperando que la vendimia de la variedad Verdejo, autóctona de la zona, comience la próxima semana.
Este año, la campaña cuenta con 1.580 viticultores y 74 bodegas elaboradoras registradas; de ellas, tres son nuevas: Bodegas Cyatho, Lagar de Moha y Finca Caraballas.
Hay una superficie inscrita de 19.892 hectáreas y el 97,87% (19.470 ha) corresponden a variedades blancas y, de éstas, el 87,88% (17.111 ha) son de Verdejo, variedad principal de la Denominación de Origen Rueda.
Nocturna y a máquina
La vendimia en la DO Rueda se caracteriza por realizarse de noche y a máquina. Estos dos factores influyen de manera decisiva en la calidad de los vinos. La mecanización permite que la recogida sea selectiva por parcelas, en función de la maduración y a criterio del enólogo. Por tanto, se decide el momento óptimo de su recogida, consiguiendo aumentar el nivel de calidad de las partidas de uva que entran en bodega.
Por su parte, al vendimiar de noche se aprovecha la bajada de las temperaturas, reduciendo al máximo las posibles oxidaciones de las uvas, conservando sus cualidades organolépticas en perfectas condiciones y mejorando el equilibrio entre graduación y acidez, lo que es muy importante para la elaboración de vinos de calidad. Además, con la entrada de la uva en las bodegas a menos temperatura, se consigue un importante ahorro energético.
En definitiva, la recolección se realiza por la noche, pero iluminada por la potente luz de las máquinas. Una vendimia adecuada para elaborar vinos de la máxima calidad, que convierten a la Denominación de Origen Rueda en líder de los vinos blancos con DO de España.
Controles de calidad y pruebas PCR a veedores
La principal función del CRDO Rueda es controlar el origen y la calidad, por lo que los Servicios Técnicos se encuentran en pleno funcionamiento, inspeccionando la procedencia de la uva, las producciones por hectárea de los viñedos, el estado sanitario y la cantidad de uva de cada variedad. Posteriormente la recogida se entrega en cada una de las bodegas, desechando las partidas que no cumplan los requisitos establecidos por el Reglamento del Consejo Regulador.
Este año se contratarán unos 20 auxiliares para esta vendimia que, junto a los ocho veedores del Consejo Regulador, llevarán a cabo los controles necesarios.
El Consejo Regulador realizará las pruebas PCR a estos auxiliares con el objeto de minimizar riesgos de contagio y colaborará con la Junta de Castilla y León en la realización de las pruebas diagnósticas a los temporeros itinerantes que contraten las bodegas para esta vendimia.