La línea de refinado procesará 27.000 toneladas de azúcar de caña procedente de Isla Reunión
La cooperativa ACOR comienza una nueva campaña de refino de azúcar
La planta de refinado de la industria con sede en Valladolid está integrada dentro de las instalaciones de la propia fábrica azucarera de remolacha, por lo que la mayor parte de los equipos son utilizados para el tratamiento de ambos productos.
Todo listo para una nueva campaña de refino en ACOR. La fábrica de azúcar de la cooperativa vallisoletana está preparada para transformar el azúcar bruto procedente de la caña. Gracias a un exhaustivo proceso, la materia prima se convierte en azúcar blanco.
La línea de refinado tiene una capacidad de procesamiento de casi 1.000 toneladas de azúcar bruto de caña al día, que llega a las instalaciones de ACOR procedente de distintos orígenes. Esta campaña se procesarán unas 27.000 toneladas procedentes de Isla de la Reunión, territorio francés de ultramar.
La fabricación con azúcar de caña
El sistema de fabricación que sigue el refinado de azúcar bruto es muy similar al de la remolacha. Las principales diferencias se encuentran en la primera parte del proceso, ya que la materia prima es diferente.
Algunos puntos de la fábrica no trabajan durante el refino, como las zonas de descarga y transporte de remolacha, la difusión o el tratamiento de la pulpa. En cambio, se dispone de una estación de decoloración, basada en resinas de intercambio iónico y de un punto de nanofiltración para el aprovechamiento de la salmuera empleada en la regeneración de estas resinas.
Distinto producto, misma calidad
La procedencia de este azúcar es distinta al de la remolacha azucarera, pero el producto final obtenido presenta las mismas propiedades y tiene la máxima calidad.
Además, coincidiendo con la actual situación de alarma sanitaria, los procedimientos y trabajos en la fábrica de la Cooperativa están ajustados a unas condiciones de seguridad muy rigurosas, tanto en el tratamiento del producto, como en el desarrollo de todas las tareas de los empleados de ACOR. A pesar de las dificultades propias del estado de alarma, se han cumplido los plazos de entrega de la materia prima y la fecha prevista para el inicio de la campaña.