Bayer apuesta por el desarrollo de un revolucionario herbicida para el año 2030 en paralelo a su programa de fitosanitarios de origen biológico
La multinacional alemana Bayer anunció hace escasas fechas su apuesta por el desarrollo de nuevos productos biológicos para combatir plagas y enfermedades en el contexto del sector agrícola mundial. Un proyecto en el que la empresa propietaria de Monsanto espera invertir más de 5.000 millones de euros en la próxima década con el fin de reducir un 30% el impacto de la actividad agraria en el medio ambiente para el año 2030.
Sin embargo, uno de los retos más ambiciosos que se ha propuesto Bayer es el lanzamiento de un herbicida químico capaz de controlar las malas hierbas que actualmente presentan resistencias al glifosato. Fuentes de la compañía han señalado que se trata de una nueva molécula aún en fase de desarrollo y que tendría un modo de acción totalmente distinto a los planteados hasta la fecha. Este nuevo modo de acción se caracteriza por atacar a la mala hierba a nivel celular, una estrategia que tiene como fin superar las resistencias que se estarían generando por el uso reiterado de herbicidas.
Este anuncio hecho por Bayer contrasta con la apuesta por los productos biológicos que está llevando a cabo la empresa y tras los duros reveses legales que está soportando en Estados Unidos a raíz de las denuncias de usuarios por la utilización de sustancias herbicidas basadas en el glifosato o, más recientemente, en el dicamba. No obstante, desde el gigante alemán aseguran que en estos momentos los productos biológicos no tienen la misma eficacia que las herramientas químicas en la lucha contra las malas hierbas.