Un etiquetado más riguroso para las legumbres es clave para incentivar su cultivo y su consumo en España. 10 de Febrero 'Día Internacional de las Legumbres'
El 10 de febrero está declarado por la ONU como una jornada internacional para concienciar sobre los beneficios que conlleva consumir esos alimentos sanos, nutritivos y ricos en proteínas.
Desde el Centro de la Legumbre en España, los Consejos Reguladores de cuatro figuras de calidad controlan todo el proceso de producción de cada una de ellas.
Su director técnico, Nicolás Armentero, ha subrayado en declaraciones a Efeagro que los bajos precios internacionales de las legumbres obstaculizan la competencia.
"Quizás al consumidor no se le pone nada fácil la identificación del producto", ha sostenido el responsable, que ha considerado un "gran obstáculo" que "en el etiquetado no se ponga claramente si es de importación o exportación".
Se calcula que tres cuartas partes del consumo nacional proceden de legumbres importadas, especialmente de países como Canadá, Estados Unidos o México.
Según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), el consumo de legumbres se situaba en 2018 en 3,20 kilos por persona al año, el 2,4 % más que un año antes, aunque su nivel ha caído bastante en las últimas décadas.
"Nos gustaría que hubiera una mayor demanda por parte de los consumidores", ha apuntado Armentero, que ha reconocido que a los productos españoles de calidad les "falta un poco de potencial para estar más presentes" en el mercado.
Armentero se ha mostrado a favor de trabajar con variedades autóctonas para que sean más productivas y resistentes a las plagas, y que puedan adaptarse al cambio climático después de que las últimas cosechas hayan sido "bastante malas por las malas condiciones".
En las últimas cinco campañas se produjeron de media en España unas 269.000 toneladas de leguminosas grano (judías secas, lentejas, garbanzos), según datos del ministerio.
A nivel mundial, la producción media de las últimas campañas se aproximó a los 45 millones de toneladas, según la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Las legumbres son plantas que retienen carbono y fijan nitrógeno en los suelos, mejorando su fertilidad y la productividad agraria.
A nivel nutricional, son alimentos bajos en grasa y sodio, que contribuyen a reducir el riesgo de hipertensión y enfermedades cardiovasculares, y no tienen colesterol ni gluten, recuerda la FAO.
Constituyen una fuente de proteínas de origen vegetal, hierro, potasio, fibra y folato, una vitamina B que se encuentra de forma natural en muchos alimentos y ayuda a prevenir anomalías en el feto durante el embarazo, entre otros beneficios.
La ONU recomienda el consumo de legumbres como una manera de diversificar las dietas, sobre todo en los países en desarrollo