Se disparan el mercado del ajo español en el mundo por la crisis del coronavirus y hay dificultades para atender toda la demanda
Redacción laagriculturadigital.com27/02/2020
Las peticiones de compra de ajo de Las Pedroñeras (Cuenca) han aumentado entre un 20 % y un 25 % en las últimas semanas por el cierre de fronteras en China, principal productor del mundo, a causa del coronavirus lo que el sector ve como oportunidad para abrir mercado en países como México o Líbano.
Así lo ha apuntado Julio Bacete, el presidente de la Mesa Nacional del Ajo y máximo responsable de la entidad Coopaman, integrada por seis cooperativas dedicadas a la comercialización de ajos, con sede en Las Pedroñeras, que ha explicado que las peticiones se han incrementado entre un 20 % y un 25 % en lo que va transcurrido de 2020.
Así lo ha apuntado Julio Bacete, el presidente de la Mesa Nacional del Ajo y máximo responsable de la entidad Coopaman, integrada por seis cooperativas dedicadas a la comercialización de ajos, con sede en Las Pedroñeras, que ha explicado que las peticiones se han incrementado entre un 20 % y un 25 % en lo que va transcurrido de 2020.
Asimismo, ha indicado que han surgido nuevos clientes, sobre todo de países como Indonesia y del Sur de África, pero también de Europa, que se han quedado sin su proveedor principal, China, por el cierre de fronteras por el coronavirus.
Bacete ha recordado que China es el principal productor del mundo, y con ellos no pueden competir en precio pero sí en calidad, al tiempo que ha resaltado que el aumento de consumo de ajo cuando aparecen epidemias "no es de ahora, sino de hace cientos de miles de años".
Y ha añadido que "el ajo es un antibiótico natural y se consume más cuando vienen enfermedades".
Por su parte, el vicepresidente de la Asociación Nacional de Productores y Comercializadores de Ajos (ANPCA) y responsable de Ajoescar S.L., Antonio Escudero, ha confiado en que ahora, nuevos países, que no conocían la calidad del ajo español sepan de su existencia, si bien ha lamentado que esto se produzca por la situación sanitaria actual por el coronavirus.
En este sentido, ha desvelado que países como México, Colombia, Ucrania, Líbano o Túnez están demandando algunas variedades de ajo español, ya que nuestro país es de los pocos que todavía tiene excedentes.
Sin embargo, ha matizado que no podrán atender todas las demandas porque no hay tanta producción disponible, dado que cerca del 70 por ciento de la campaña 2019/2020 ya estaba comprometida con clientes "fieles".
Escudero ha reconocido que el cierre de fronteras ha generado un aumento de los precios, si bien la situación del agricultor “no es para tirar cohetes” porque hasta finales del año pasado algunos estaban vendiendo los ajos por debajo de los costes de producción.
Las Pedroñeras, en la comarca de la Mancha conquense, está considerada como "la capital mundial del ajo morado"
Bacete ha recordado que China es el principal productor del mundo, y con ellos no pueden competir en precio pero sí en calidad, al tiempo que ha resaltado que el aumento de consumo de ajo cuando aparecen epidemias "no es de ahora, sino de hace cientos de miles de años".
Y ha añadido que "el ajo es un antibiótico natural y se consume más cuando vienen enfermedades".
Por su parte, el vicepresidente de la Asociación Nacional de Productores y Comercializadores de Ajos (ANPCA) y responsable de Ajoescar S.L., Antonio Escudero, ha confiado en que ahora, nuevos países, que no conocían la calidad del ajo español sepan de su existencia, si bien ha lamentado que esto se produzca por la situación sanitaria actual por el coronavirus.
En este sentido, ha desvelado que países como México, Colombia, Ucrania, Líbano o Túnez están demandando algunas variedades de ajo español, ya que nuestro país es de los pocos que todavía tiene excedentes.
Sin embargo, ha matizado que no podrán atender todas las demandas porque no hay tanta producción disponible, dado que cerca del 70 por ciento de la campaña 2019/2020 ya estaba comprometida con clientes "fieles".
Escudero ha reconocido que el cierre de fronteras ha generado un aumento de los precios, si bien la situación del agricultor “no es para tirar cohetes” porque hasta finales del año pasado algunos estaban vendiendo los ajos por debajo de los costes de producción.
Las Pedroñeras, en la comarca de la Mancha conquense, está considerada como "la capital mundial del ajo morado"
El “Ajo Morado de Las Pedroñeras” tiene su centro principal de producción en el área delimitada por las localidades de Las Pedroñeras, La Alberca de Záncara, Mota del Cuervo, El Provencio, Santa Mª del Campo Rus y San Clemente, situados en la provincia de Cuenca, en la comarca natural de la Mancha Baja. Desde este núcleo, los agricultores “ajeros” se desplazan para arrendar tierras nuevas, cuyas condiciones en cuanto a altitud, tipo de suelo, facilidades para el riego y condiciones climáticas sean similares, permitiendo una rotación amplia del cultivo, lo que ha hecho que el cultivo se extienda a por las comarcas aledañas, situadas en las provincias castellano manchegas de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo.
De este modo, la zona de producción, manipulación y envasado está hoy constituida por doscientas veintisiete localidades pertenecientes a las comarcas naturales de La Mancha, Mancha, Mancha Alta, Mancha Baja, Manchuela y Centro, pertenecientes a las provincias de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo, en la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha.
La superficie de cultivo del “ Ajo Morado de Las Pedroñeras ” se sitúa cada año entre 5.000 y 6.000 has , lo que supone el 50% de todo el ajo cultivado en Castilla-La Mancha. La plantación se realiza en el territorio definido por las comarcas naturales de La Mancha, Mancha, Mancha Alta, Mancha Baja, Manchuela y Centro, todas ellas pertenecientes a la Comunidad Autónoma de Castilla–La Mancha.
Cultivo del Ajo Morado de Las Pedroñeras
Preparación de terreno
Por su rusticidad y poca profundidad radicular, el cultivo del ajo no necesita una gran preparación del terreno. Generalmente, el cultivo del ajo entra en rotación detrás de un barbecho de cereal (trigo o cebada), o bien detrás de un barbecho de girasol, aunque este último no es muy aconsejable. La típica rotación que se da en la zona conquense es: cereal-girasol-cereal-ajos.
Por tanto la primera labor consiste en el alzado del barbecho. Esta labor puede ser profunda si se quiere que cumpla la misión de acumular agua otoñal, preparar un buen drenaje,(si es un terreno con alto porcentaje de arcilla), o airear para tener mayor riqueza microbiana, y por tanto, mayor número de principios nutritivos solubles.
Después de una labor profunda se refina el terreno con dos labores. La primera se encarga de pulverizar o de buscar un desmenuzamiento óptimo mediante la utilización de “cultivadores”, “binas” o con “rejas de golondrina”. La segunda labor, además de desmenuzar, sirve para enterrar el abono de fondo y el marcado de la línea de plantación. Esta labor se realiza cruzada respecto a la primera. En caso de la utilización de productos fitosanitarios y/o herbicidas de preemergencia se incorporaran en la misma época que se realice la segunda labor.
El “pintado” de la superficie del terreno consiste en marcar las líneas de plantación de tal forma que queden suficientemente claras para poder realizar la siembra a mano . El apero utilizado no tiene unas características especiales, es muy frecuente que lo fabrique el propio agricultor, adaptando un bastidor convencional, con una serie de rejas, colocadas a una distancia adecuada.
Preparación de la simiente
La multiplicación del “ Ajo Morado de Las Pedroñeras ” se realiza de modo vegetativo, plantando los “dientes” . La multiplicación por medio de semillas es nula, salvo para estudios de mejora genética, como se indicó anteriormente.
La simiente se desgrana antes de su plantación, esta operación consiste en disgregar los dientes de las cabezas , en las horas previas a la siembra, cuidando de que los dientes no sufran daño. Para prevenir daños posteriores, causados por hongos que atacan al ajo en sus primeros estadios, ya que los dientes pueden llevar esporas adheridas, o porque éstas pueden estar en el terreno de cultivo, es conveniente aplicar un tratamiento a base de fungicidas.
Plantación del bulbo
El agricultor usa el término “siembra”, para designar esta labor, aunque técnicamente el cultivo de ajo no se siembra , se “planta” , ya que lo que se utiliza es material vegetativo (dientes) y no semillas. Como se ha indicado, para evitar enfermedades y ataques de plagas, nunca debe repetirse la siembra del ajo en el mismo terreno del año anterior.
La época de realizar esta labor depende de la condiciones climáticas de la zona, evitando las épocas de precipitaciones. En nuestro caso, nos encontramos con que los inviernos son muy fríos y secos, por lo que la siembra se realiza desde primeros de diciembre hasta mediados de enero . Cuando se dispone del terreno en estado óptimo, con la línea de plantación marcada y la simiente desgranada y desinfectada, se estará en disposición de realizar la plantación. El marco de plantación vendrá determinado por los aperos y maquinaria que se utilicen para esta labor.
Los marcos de plantación más usados en la zona de producción del “ Ajo Morado de Las Pedroñeras ” están entre 0,45 y 0,5 m entre líneas, y 0,10 y 0,15 m. entre plantas dentro de la misma línea. Esto supone una densidad de siembra aproximada de 200.000 plantas por hectárea .
La plantación se realiza a una profundidad media de 4 cm. en suelos arcillosos y de 6 cm. en suelos arenosos. Para un perfecto desarrollo vegetativo del ajo, debe cuidarse de que el diente se plante con el germen (la parte que tiene forma de pico) hacia arriba , ya que si se planta hacia abajo, el tallo deberá realizar un giro para seguir su geotropismo natural, empleando para ello parte de sus reservas de energía, y con el consiguiente riesgo de que la planta pierda “arraigue” en el suelo. Realizar bien esta labor facilita la posterior labor de eliminación del escapo floral , ya que si la planta no se encuentra bien arraigada es fácil que resulte arrancada al eliminarse el escapo floral.
De este modo, aunque la plantación manual resulta muy laboriosa , garantiza un cultivo en perfectas condiciones iniciales. El número de horas de siembra manual oscila entre las 60 y 80 horas por hectárea. Pero como en el resto de los cultivos, la mecanización se está introduciendo poco a poco también en este sector. Las máquinas presentan la ventaja de reducir considerablemente los costes y el esfuerzo , pero presentan el inconveniente, de que, al dejar caer el diente por gravedad en el suelo, éste se depositará en cualquier posición.
Después de la plantación es necesario tapar los dientes con tierra para evitar que sufran daños por calor, frío, animales, pájaros, etc. Esta labor se realiza mediante cultivador de rejas o binas en línea. En el caso de la siembra mecánica no es necesaria esta labor, que ya las máquinas llevan incorporados estos aperos. Tras la plantación, se puede dar un ligero rulado con rastra ligera para obtener una pequeña compactación. Con ello se mejora la nascencia, ya que, si el diente dispone de más superficie en contacto con la tierra, captará mejor la humedad necesaria para germinar. Es conveniente realizar un rulado con un rulo dentado, ya que el rulo liso puede tumbar el bulbo a su paso, disminuyendo así el desarrollo germinativo.
Labores durante el ciclo vegetativo
* Riego: La mayor parte del cultivo de “ Ajo Morado de Las Pedroñeras ”, es de regadío , son pocas las parcelas de secano que se utilizan. Un aporte de 2000 m3/Ha , más las precipitaciones que se recogen como media en esta zona (cercanas a los 400 mm), resulta suficiente. Como es lógico, el número de riegos y la cantidad de agua a aportar en cada riego, dependerá de las condiciones ecológicas concretas, pero en ningún caso deben sobrepasarse los 3000 m3/Ha . En nuestra zona de cultivo, en la mayoría de las parcelas, el método de riego utilizado es el de aspersión , captándose el agua de pozos, ríos o balsas cercanas al cultivo.
* Fertilización: El abonado recomendado (según los tipos de suelos) de forma general y por hectárea de: 50 unidades fertilizantes de Nitrógeno, 110 unidades fertilizantes de P2O5 y 165 unidades fertilizantes de K2O como abonado de fondo; y de 65 unidades fertilizantes de Nitrógeno, en cobertera, aplicadas antes del 30 de marzo . El azufre es también importante, ya que interviene en el contenido de sulfuro de alilo , relacionado con las propiedades organolépticas , por lo que se aconsejan igualmente abonos con sulfatos de distintos macronutrientes.
* Control de mala hierbas. Escarda: El control de las malas hierbas está condicionado por el marco de plantación, si este es estrecho las hierbas deberán ser eliminadas de forma manual , La manera generalizada de eliminar las malas hierbas es asociar a los pases de cultivador entre líneas un repaso, combinando estas labores con la posible aplicación de herbicidas selectivos.
* Eliminación del escapo floral: El escapo floral es eliminado por los cultivadores , evitando la merma de las sustancias de reserva acumuladas en el bulbo . De este modo se acelera su maduración, pudiendo iniciarse la recolección. entre siete y diez días después. Cualquier riego realizado después de la eliminación del escapo floral resultará perjudicial ya que el tallo queda hueco y la entrada de agua dañará al bulbo.