Casi un 39% de los beneficiarios de ayudas directas de la PAC en España supera los 65 años y podría estar jubilado
El 91% de los beneficiarios de las ayudas directas de la PAC en España durante la última campaña tiene más de 40 años, según el informe "Ayudas Directas y Desarrollo Rural" que acaba de difundir el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), en el que se hace un análisis de la edad y el sexo de los perceptores de estas ayudas comunitarias en 2017, tras cruzar los datos del FEGA con los del Instituto Nacional de Estadística (INE). Y la información puede resultar aún más chocante si se tiene en cuenta que el porcentaje de los que superan los 65 años entre las personas que cobraron la PAC en el último año fue de un 39% (que supone casi 260.000 personas), lo que deja claro el perfil demográfico del sector agroganadero en España y pone el descubierto hasta qué punto el sistema de ayudas de la PAC, que constituye casi un tercio de los ingresos brutos que reciben la mayoría de las explotaciones, puede ser un factor distorsionador en la renovación y reestructuración del sector en los próximos años. De hecho, el porcentaje de los perceptores de la PAC que en estos momentos tienen menos de 25 años supone solo un 0,62% del total.
Con estos porcentajes, cobra mucho más sentido el planteamiento de algunas comunidades autónomas y del propio Ministerio de Agricultura advirtiendo de la necesidad de que se produzca una cierta ruptura en el reparto de estos fondos y que se supere el concepto de derechos históricos ‘inmovibles’, abriendo de cara a la reforma que se está preparando nuevas vías de reparto que permitan que una parte más cuantiosa de los fondos puedan llegar a los agricultores jóvenes que se incorporen al sector
SECTOR DOMINADO POR LOS HOMBRES
Otro de los perfiles del sector que pone al descubierto este análisis del FEGA es que la agricultura y la ganadería son actividades fundamentalmente masculinas y en manos de agricultores individuales. El 92,87% del total de perceptores de ayudas directas PAC son personas físicas, frente a sólo un 7,15% que corresponde a personas jurídicas (cooperativas, SAT, sociedades mercantiles…). Y entre esas personas físicas, 426.705 son hombres agricultores y solo 252.214 son mujeres agricultoras.
Y esa diferencia, lejos de reducirse con la edad se va acrecentando, porque en el estrato más joven, de perceptores con menos de 25 años, las agricultoras son solo 914, frente a los jóvenes agricultores hombres, que son 3.270. Por el contrario, entre los perceptores de ayudas con más de 65 años, las mujeres son 102.728 son mayores de 65 años, frente a los hombres que son 156.228. Un dato que no deja de ser chocante, dada la configuración del sector hace 3 ó 4 décadas, y que parece apuntar por un lado a la mayor longevidad de la población femenina en el medio rural, y a la transferencia de la titularidad de algunos derechos a ellas que, por no haber cotizado, no son perceptoras de la jubilación.
AYUDAS AL DESARROLLO RURAL, UN PERFIL ALGO MÁS JOVEN
Respecto a los importes percibidos como ayudas al desarrollo rural, que fueron recibidas por 152.726 personas, la participación masculina es aún más abultada, ya que el 67,18% de los beneficiarios son hombres frente al 32,82% de las mujeres. Por el contrario, el perfil de edad está algo más rejuvenecido, ya que el porcentaje de perceptores con más de 65 años baja al 21,65%; mientras que el 62,78% tenían una edad de entre 40 y 65 años; el 14% estaba en el segmento de entre 25 y 40 años; y el 1,57% restante -2.398 personas- menores de 25 años.
El detalle de los importes y de los datos por edades, tanto a nivel nacional como en cada una de las comunidades autónomas, puede consultarse en el siguiente enlace