El 5G permite desarrollar una experiencia de poda conectando en tiempo real a un operario y un técnico que visualiza a distancia el árbol y guía el trabajo
El internet de las cosas empieza a ser una realidad en el desarrollo de los trabajos agrícolas gracias a la aplicación de la tecnología 5G. La primera experiencia se ha desarrollado en un campo de nectarinas de Albatàrrec (Segrià) en una experiencia pionera y experimental desarrollada por el consorcio 5G Barcelona, que tiene el propósito de demostrar como esta tecnología que mejora la conectividad puede contribuir a mejorar la productividad de las explotaciones agrícolas
La prueba piloto ha consistido en establecer un sistema de asesoramiento y formación entre un operario que podaba el campo sobre el terreno y un ingeniero agrónomo que se encontraba en otro lugar y le iba asesorando sobre la forma adecuada de realizar cada tarea. La conexión se establecía a través de unas gafas preparadas para la conectividad 5G que permitían compartir en tiempo real la visión del árbol y de cada una de las ramas sobre las que se iba a actuar, ejecutando el operario las recomendaciones que iba recibiendo del técnico. El proyecto está impulsado por el Departamento de Políticas Digitales del Gobierno de Cataluña y lo han desarrollado en colaboración con las empresas Vodafone, Cisco y Akis International en el marco 5G Barcelona.
La prueba piloto ha servido para optimizar el proceso de poda, una operación clave para mejorar el rendimiento agrario, y la tecnología que ha intervenido ha sido una antena 5G, que Vodafone ha instalado en la finca experimental de Akis International, y las soluciones de Cisco preparadas para el 5G. A través de unas gafas dotadas de cámara, micrófono y un visor con comandado con la voz. El operario y el ingeniero agrónomo iban compartiendo la experiencia en tiempo real interactuando de manera continua. El director de proyectos de Akis International, David Helecho, asegura que esto permite un planteamiento nuevo en la planificación de cualquier trabajo en el campo, que "esperamos que esté a disposición de cualquier explotación antes del 2025 una vez que las redes 5G se hayan extendido más allá de las grandes ciudades". De esa forma, igual que ahora se hace con la poda se podrá controlar y dirigir cualquier trabajo agrícola o ganadero, para resolver problemas sin necesidad de que los técnicos visiten las parcelas o las granjas, ahorrando tiempo y recursos, y permitiendo abaratar costes y contar en cada caso con el asesoramiento de uno o varios expertos para enfrentarse a cualquier tarea.
Desde el Gobierno de Cataluña, la consejera de Agricultura, Teresa Jordà Puigneró, que asistió a la experiencia, asegura que esta tecnología 5G permitirá hacer más competitivo el sector agrícola y a la vez contribuirá a facilitar el relevo generacional, porque conseguirá que el campo sea más atractivo como salida profesional para muchos jóvenes.